Había una vez una bailarina que no encontraba su canción. Ella danzaba cualquier clase de melodía, pero nunca estaba contenta con sus pasos. Le gustaban los movimientos suaves, pero nada de lo que encontraba tenia ritmo dulce como para usarlos.
Cuando era pequeña, le decían que cada bailarina tiene su canción. Que cada bailarina tiene el ser conectada con un conjunto de notas, y que si la encontrabas, tendrías paz. Y bailarías por siempre con alegría.
Ella estaba triste, perdida. Tenia que encontrar su canción rápido, sabia que con semejante tristeza, no le quedaba mucho tiempo. Escucho toda clase de música y se ilusiono cuando mas de tres notas encajaban, pero en el fondo, sabia que era un engaño. No se le erizaba la piel, no cerraba los ojos para disfrutar las notas, no sentía armonía.
Le dolían los pies, pero mas aun, le dolía el corazón. La amargaba completamente, la llenaba de angustia. Quizá, ella no era suficientemente buena para encontrar una canción. ¿Y si ya la había escuchado, pero la había dejado ir? ¿Y si alguien mas encontraba su canción antes que ella? Podía suceder, a veces, una canción le pertenecía a dos bailarinas, y los peores conflictos salían de no tener certeza.
Estaba mas triste de lo normal, a punto de quitarse sus zapatitos, cuando la escucho en su cabeza. Era tenue, y si le prestaba demasiada atención, parecía desaparecer. Era un recuerdo, ¿y de donde provenía?
Y recordó, al subir a su piso, de la habitación de abajo salia esa hermosa canción. Corrió desesperadamente, con la ilusión de que siga sonando. Y finalmente, la encontró. Toco la puerta con timidez, ya que siempre ignoraba a su vecino, y este algo sorprendido, la dejo escuchar.
Su tristeza parecía desaparecer y se reemplazaba por felicidad. No se cansaba de bailar y sonreír por el simple hecho de estar escuchándola. Con el tiempo, se dio cuenta de que la melodía se iba haciendo mas larga, y comprendió que no todas las notas eran de su agrado, no todas las notas sonaban a la perfección.
Y lo mejor de todo, es que ya no le importaba que no todo encajara. Si tenia cien notas bien tocadas no iba a sufrir las cinco que sonaban mal. Se enamoro de su canción, y simplemente, dejo que sonara para siempre.
xoxo Ona
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Nada en específico
Historia CortaTerror Amor Fantasía Acción Todos los géneros literarios en una sola historia. ¿De qué trata esto? En realidad, nada en específico.