One shots! Rochu

¿Vendra?

El helado viento de Moscú, la blanca y bella nieve.
¡Que hermoso es la capital de la gran Rusia!
Un chino temblaba de frío esperando a su pareja.

¿Donde estará? -se preguntó

Frío, hace frío.
Entro en una cafetería y con mala gana pidió un chocolate caliente.

Sigue pasando el tiempo, las estrellas brillan, la nieve cae pero él no esta ahí.

Quedaron, pero...
¿Le habrá engañado?

De repente, ve gotas caerse a su pantalón

-No, no llores imbecil, se fuerte, él vendrá, que no llores.. -se decía

Recibió una llamada de teléfono

- ¿Diga?
-Escúchame, hoy no podré ir, tengo cosas que hacer, mañana quedamos.
-Si... ¡Y pasado mañana! ¡Y dentro de mil años! Tonto... Dime la verdad...
-Es la verdad, nunca me escuchas
- Eso no es verdad aru, yo tengo paciencia contigo pero...
¡Han pasado días desde que no nos vemos! ¿Estas por otra?
- ¡No seas tonto! ¿Estas en el sitio donde concordamos?
-Pues sí, y ¿sabes que? Me voy, paso de ti
- ¡Yao! Espérame, ¡iré a verte!

El chico de paro y miro sorprendido al movil, ¿vendrá?

-¿Seguro que vendrá? -se preguntó

Mientras tanto, el ruso cancelo su reunión sólo por capricho de su amor. No, la culpa era suya, no organizaba bien y dejaba en pocas ganas a su amado.

Desde pequeño le conocía, le salvó la vida, le admiro. ¿Pero él?
¿Que hizo él para salvarle?

- Yo salvare... Su corazón...- se dijo

Con su mejor coche se fue a la plaza donde se encontró con el asiático.

- ¿Iván?
- Te lo prometí, hoy hay cita
- Iván.. Perdóname por no confiar en ti
- Perdóname por haberte infravalorado, mi pequeño y hermoso girasol.
- ¡Aiya! ¡Me haces sonrojar!

El ruso le besa en la mejilla al pequeño chino, le susurra cosas tiernas.
Tiernas como un pastel.
Dulces como el chocolate.
Y sobre todo, sinceras.

Compensación por mi hiatus.
:,(