She wolf - Camren G!P

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Cerros de libros se encontraban apilados en el escritorio de Michael Jauregui, tenía sus niveles de estrés al máximo. Él era uno de los pocos pilares que mantenía todo en orden, debía cuidar de su familia, pero a su vez ser un lider de una manada y asegurarse que esta no llegara a su extinción, al menos no bajo su dominio. Los protectores, como llamaban a los jefes supremos tenían una plena cofianza en él ya que en su familia se encontraba una genética increible jamás antes vista. Cualquier persona que sabía del tema sabría que todos los Jauregui son geneticamente fuertes y poderosos.

Pero llegó Camila a la familia, y todo se le estaba saliendo de las manos.

La pequeña castaña se veía debil, algo normal, pero daría todo de él para que esto saliera de la mejor manera, tendría un nieto después de todo. Un híbrido.

Su principal preoupación era la madre de Camila, la pobre señora llamaba todos los dias a la casa de los Jauregui preguntando y hablando con su hija, nunca recibiendo una respuesta concreta de por qué no volvía a casa.

Lauren no se encontraba en caza, habia salido con Chris por comida, con Camila embarazada el tema alimenticio era completamente importante, no podían perder a la castaña.

Aprovechó que su hija no estaba abrazada a Camila, como siempre, para hablar con ella.

-Camila... - dijo Michael mientras se sentaba en el sofá donde se encontraba recostada la castaña cubierta por mantas

-Hey, Mike - le dijo sonñolienta, era normal para él encontrar dormida a Camila, el bebé en camino le quitaba todas las fuerzas que tenía pese a que comía bastante

-Cómo te sientes? - preguntó - cenaste algo? - dijo mientras ponía una mano sobre la frente de la castaña para comprobar que no tuviera fiebre, al estar debil las enfermedades llegaban una detrás de otra.

-Algo cansada, pero fuera de eso todo normal - dijo subiendo la manta hasta el cuello

-Subo la calefacción? - preguntó Michael

-Por favor, está helando - le dijo con una sonrisa. Michael le devolvió una sonrisa triste, estaban a puertas del Verano en Miami, la casa era un horno.

-Camila... tu madre llamó hoy, mientras estabas con Lauren - le dijo con un tono más serio

-No-no sé qué hacer - le dijo - ella.. ella nisiquiera sabe que llevo un bebé, Michael, no sabe que esto podría matarme - dijo

-Tienes pensado contarle... todo? - preguntó Mike

-No-No lo sé, ella... no creo que lo tome bien, además todos ustedes estan involucrados y por lo tanto si le cuento a mi madre, todos ustedes deberían estar de acuerdo - dijo la castaña tratando de recuperar el aire, hablar le cansaba.

-Por mi parte, deberías contarle, es tu madre cariño, está preoupada por ti, además, eres de la familia, no se lo puedes ocultar a tu madre por siempre, bien? - dijo Michael mientras abria la nevera en busca de algún tipo de proteína para la castaña - bingo! - dijo al encontrar el preferido de la castaña, o eso creía

-Nuggets para la novia de mi hija - dijo llevandole el plato con algunas salsas al lado

Apenas el olor entró por sus fosas nasales, las ganas de vomitar aumentaron al máximo lo cual hizo que la castaña se levantara de donde estaba para llegar al lavadero

-Lo siento Mila - le dijo - aun.. no sé que te apetece y que no - dijo Michael

-Son... es algo común del embarazo, cierto? - preguntó, Mike asintió

-Lauren - dijo desde donde estaba la castaña, la conexión que tenían ambas era increible, podían predecir los movimientos de la otra segundos antes, en este caso el olor de Lauren la volvía loca y era reconocible para ella.