capítulo 23.-

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Alexis estaba bien, solo se había quedado dormida esperando, pero cuando despertó seguía con ganas de ir al baño, así que todos fueron al baño portátil cerca del auto y luego volvieron a las tiendas.

El fin de semana pasó rápido, y ya era lunes, todos estaban trabajando, era un día normal hasta la hora del almuerzo. Alexis y Thomas, como trabajaban juntos y en casa prepararon el almuerzo para los niños y para ellos, y cuando estaban todos sentados, golpearon la puerta muy bruscamente.
Ambos se asustaron, y Thomas se levantó de su silla para ir a abrir, Alexis iba atrás de él.

—¿Quién es? - Dijo Thomas, lo más calmado que pudo.
—Yo, Travis, abre, deprisa.

Thomas y Alexis se alivieron al saber eso, Thomas abrió y Travis entró muy rápido y cerró la puerta tan fuerte que algunos niños se asustaron.

—¿Todo bien? ¿por qué no estás trabajando? - dijo Alexis, luego de darle un beso.
—La policía estuvo merodeando el lugar, hablaron con mi jefa, le preguntaron sobre mí, ella dijo que yo trabajaba ahí y no sé, quizás hasta les dio mi dirección - dijo asustado.
—Tenemos que irnos, pero ya - Thomas dijo eso y tomó el teléfono para llamar a los padres de los niños.
—Espera, no - dijo Alexis, calmada - Tú deberías esconderte con Ian, nosotros no podemos irnos y ya, además sería muy sospechoso.
—Mh, tienes razón - Travis se calmó un poco.

El plan era el siguiente: todos de quedaban en la casa, menos Ian y Travis, si es que la policía llegaba, ellos negarían todo lo que les preguntaran sobre los chicos, mientras que esos dos, se irían a otro lugar, que por el momento no saben cuál es.

Dos horas después.

Ian y Travis ya se habían ido, Emma estaba en casa con Thomas y Alexis, cuidando a los niños. Obviamente estaban nerviosos, lo que menos querían era que llegara la policía y que los niños tuvieran que ver todo.

Siguieron pasando las horas y la policía no llegaba, ya no estaban los niños, así que no habría alboroto. Thomas y Emma estaban viendo tv en el living mientras que Alexis estaba en su habitación, pensando... aún no sabía por qué los perseguía la policía, tampoco se atrevía a preguntar, pero sabía que apoyaba a Travis incondicionalmente.

11:32 p.m.
La policía llegó a la casa, traían una orden, así que aunque no le abriéramos la puerta, podían derribarla o algo así.

Llevaron a todos a la comisaría y comenzaron las preguntas, ninguno habló, así que los separaron y comenzaron a interrogarlos por separado, pero aún así ninguno dijo la ubicación de los chicos, aparte de que tampoco sabían, ninguno dijo nada que pudiera perjudicar a los chicos.
Ya habían pasado casi tres horas, y los policías ya estaban cansados, así que dejaron que Emma, Thomas y Alexis estuvieran en la sala de espera, todo bien hasta que.

—Mierda, Travis está llamando - dijo Alexis, mientras miraba su teléfono.
—Agh, justo lo que nos faltaba - dijo Thomas, levantándose del asiento.
—Contesta, pero no hables fuerte y no digas su nombre.

Alexis contestó y se escondió un poco para que los policías no vieran, probablemente no estaba permitido que hablaran por teléfono.

*Llamada*
Hola - dijo Alexis, despacio.
Princesa, ¿cómo estás? - dijo amable.
—Estamos en la comisaría, no creo que sea conveniente hablar ahora, yo te llamo en cuanto pueda, ni se te ocurra ir a la casa, la vigilan y cuidate mucho, te amo -Alexis iba a cortar.
Espera - gritó Travis.
—¿Qué pasa?
—¿No tienes curiosidad sobre por qué nos persiguen?
—¡Claro que la tengo! - gritó y todos voltearon, ella volvió a esconderse - pero no es un buen momento ahora, yo no te presionaré, cuentame cuando quieras pero no ahora.
—Eres la mejor - rió.
Lo , cuidense.
—Te amo -colgó.

Las horas siguieron pasando, los chicos estuvieron en la comisaría toda la noche, y por la mañana los dejaron irse para que se bañaran y demás, pero luego debían volver.

Ya eran las 10:23 a.m. y la policía ya había empezado a interrogar, y a todos juntos esta vez. Les contó todo, sobre las drogas, la manera ilegal de conseguirla, quién estaba a cargo (aunque específicamente no sabían quién era, llevaban mucho tiempo buscándolo) , etc. Todos estaban muy sorprendidos, Alexis más que nada, pero a pesar de todo, ellos seguían sin saber el paradero de Ian y Travis.

Miren, les ofrezco un trato - dijo el policía que interrogaba - nosotros seremos flexibles con sus amigos, solo deben decirnos el nombre de su jefe, es él a quién verdaderamente queremos.
—Por última vez - dijo Emma - ¡no sabemos en dónde están!
—Pero pueden contactarlos - dijo el policía - sabemos que pueden.
—No - dijo Alexis.
—¿Podríamos hablar a solas, por favor? - Thomas habló calmado.
—Claro, cinco minutos - contestó el policía y se fue.
—Chicas, piénsenlo, si los atrapan, podrían dejarlos en la cárcel un montón de tiempo, pero si vuelven y dicen quién es su jefe, podrían darle solo un par de años, o quizás haciendo servicio comunitario, aunque lo dudo - dijo Thomas.

Hablaron los cinco minutos, no dijeron nada muy sospechoso, por si estaban grabando o escuchando, per la cuestión es que decidieron que después llamarían, les contarían el plan y luego ya es cosa suya si se entregan o no.
Alexis estaba enojaba y decepcionada, pero en el fondo sabía que Travis era un buen tipo y solo lo hacía porque era dinero fácil, seguía confiando en él después de todo, y amándolo, claro.

Adolescente en problemas. [Travis Mills]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora