Desperté con un terrible dolor de cabeza.
Ayer había bebido más de lo normal. Suspiré incorporándome de mi cama, caminé hasta el baño para darme una ducha.
Cuando terminé, bajé a la cocina, encontrándome con Ethan.
— Dónde estabas anoche? — preguntó enfadado.
— Buenos días para ti también.
— No estoy jugando Grayson. Mamá estaba preocupada.
— Lo siento sí?. Estaba por ahí. — respondí restandole importancia.
— Crees que todos te comprendemos por que estas deprimido? No Grayson, he vivido toda mi vida comprendiendote, entiende que ya eres un adolescente y que....
— Y tú crees que a mí me importa? Ethan, no seas hipócrita por que no te queda. — lo corté, volviendo a mi habitación, bufé.
Como si le importara tanto, ugh, odio que sea así.
Salí de mi habitación por segunda vez, para ir junto a mamá, fui a su habitación y la encontré llorando.
— Mamá....
— Hijo mío. — corrió hacía mí, cuando apenas me vio entrar, la abracé al instante, y no pude evitar llorar. — Lo siento mucho hijo. Ella descansó, el mundo se lleva incluso a los más fuertes — susurró en mi oído, mientras me abrazaba con más fuerza.
— P-por qué ella? — solloce, mi madre se apartó tomando mis manos.
— Todo estará bien, lo prometo.
Mi llanto cesó. Me quedé por minutos observando nuestras manos.
— Saldré un momento. — pronuncié con firmeza, deshaciendo el contacto con ella, y volviendo a mi habitación por un abrigo, y un gorro.
— A dónde vas? — preguntó Ethan.
—En un lugar donde no me fastidie nadie. — respondí saliendo de casa y dando un portazo.
El frío chocaba por mis mejillas, caminé hasta llegar a su casa, la cual estaba solitaria, su madre viajó, y no volverá hasta el lunes. Con cuidado ingresé a la casa, la puerta de atrás estaba abierta al igual que la de vidrio que daba a la alberca, fruncí el ceño, caminé hasta llegar a fuera de nuevo, encontrándome con ella, tenía el cabello suelto, solo traía una playera negra, y tenía los pies dentro de la piscina, corrí hasta ella, toque su hombro y ella volteó.
— Grayson! — dijo abrazándome, la cargué en mis brazos, y ella rió. — Te amo Gray. — exclamó entre risas, sonreí.
-— ¿Cómo es quéno... tú estabas muert....?
— No, lo estoy, nunca te dejaría Gray, me salvaste.Eres mi héroe.— susurró, sonrió y de un saltó bajo de mis brazos. — Alcanzame si puedes!— gritó corriendo, la seguí con mucha rapidez, se me había perdido de vista, la busqué por todos lados, pero no la encontré.
Fue allí en donde me dí cuenta de que era sólo una ilusión.
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black ticket. // gbd.//
FanfictionGrayson, esté es tu boleto negro, se trata de un viaje negro. Disfrútalo.