Una mirada en el espejo

De vuelta

Con una mirada asesina y apretando un puño, la joven de cabello rubio se dirigía al hombre de chaqueta de cuero que sostenía un cartel con la típica bienvenida para quien busca a alguien en el aeropuerto

O bueno... No tan típica

"BIENVENIDA A CASA, RENY"
¿Cómo estuvo Atlántica?

Cuando por fin llegó a estar frente a él, antes de de que pudiera reaccionar y decir algo siquiera, le arrebató el cartel y comenzó a desgarrarlo con un coraje casi demoníaco, tirando los pedazos en la primera papelera que vio.

-- Vaya, que humor...-- le dijo el hombre a la chica

--¡Cállate! Gracias por decirle a todos que vengo de una clínica psiquiátrica y no de España ¡maldito!-- le reclamó la chica, antes de abrazarlo --Pero aún así te extrañé mucho, Said-- diciendo esto último con una voz más tranquila y dulce.

Said se limitó a mirarla con ternura y un poco de asombro,por su rápido cambio de humor, pero terminó correspondiendo al abrazo, tratando de disfrutar ese momento de paz y armonía,el cual esperaba que durara mucho, mucho tiempo

--No tienes idea de cuánto necesitaba que estuvieras aquí, Reny. Aunque tal vez, eso haya sido lo peor ahora--dijo seriamente

--¿Estás ebrio? Me quieres de vuelta pero no me quieres de vuelta...No me digas que metiste a otra de tus "visitas" a mi habitación ¡Te mato!-- respondió, haciendo pinzas con los dedos a la hora de decir "visitas"

Mierda...allí iba toda su paz y armonía

-Es algo más serio-- su rostro se ensombreció al decir eso

--¿Y bien? Adivino ¿quemaste la cocina otra vez? Pfff..tenías que ser un puto niño rico-- se quejó Reny, imaginando todas las posibilidades al respecto

-- información Clasificada

--Ahh

Con lo de " Información Clasificada" Reny sabía que era algo que no podía hablarse en público y que involucraba asuntos muy serios que Said quería tratar, por lo que se abstuvo de preguntar más. Cosas de lidiar con policías... qué podía hacer

--Oye,me gusta el aeropuerto y ver la gente pasar,pero ¿y si nos vamos? Ya casi se acaba mi hora de estacionamiento-- el tono bromista de Said la sacó de sus pensamientos

--¿Quien lo diría? El joven e inteligente Said Al- Fayah, detective del Departamento de Policía de Rány, fiero con los criminales, pero asustado por pagar más en un estacionamiento...Patético-- ironizó Reny, antes de romper en risas ,mientras se dirigía con Said a la salida de la sala de espera

-¿Que quieres,casa o comida?-- preguntó Said, molesto-- Por cierto, ya dáme esa maleta,que no te la voy a robar

--Uno nunca sabe...y por cierto...quiero sexo-- respondió Reny con cierta picardía, mientras le dejaba su maleta al otro.

--Traigo unas esposas en el coche

--Lo siento, no lo hago ni en estacionamientos, ni con pasivas

--Bien que quisieras algo conmigo. ..y ya te dije que no soy una pasiva

Carcajadas de ambos

Llegaron al estacionamiento más rápido de lo que se imaginaron. En cuestión de minutos, hallaron el coche y Said procedió a desactivar la alarma y abrir la puerta del conductor para quitar el seguro de la puerta del copiloto. Abrió la puerta para que Reny entrara y entre respingos de que no era una niña rica como las que el conocía, logró hacerla sentar,cruzada de brazos. Después lanzó la maleta de Reny en los asientos de atrás y se sentó frente al volante, para luego insertar la llave y poner el auto en marcha.

--Y ya en serio ¿casa o comida?-- preguntó Said, atento a lo que veía adelante

--Muero de sueño, así que casa, pero también quiero comida-- respondió Reny antes de bostezar

-Puedes comer lo que yo preparé en estos días, si quieres

Reny lo miró horrorizada

--¿De ese ántrax culinario que llamas comida? No,gracias. Mis órganos aún están funcionando bien y así me gustaría seguir

--Es una broma,sabes bien que yo no puedo preparar un simple cereal. Kristina me estuvo preparando la comida, pero hoy justamente fue a visitar a sus padres,así que. ..

--De nuevo a ser la cocinera de un puto niño rico...pfff-- bufó Reny.

--Acuerdo de vivir juntos: yo pongo la mitad de la renta y hago trabajo manual, Kristina y Diego hacen el aseo y los recados y tú pones la comida-- comenzó a recitar Said como si se tratara de un contrato real-- No veo de que te quejas,te tocó lo más sencillo

--Cierto-- reconoció Reny. Por ser un poco orgullosa, reconocer le resultaba igual de humillante que salir desnuda a la calle --Por cierto ¿y Diego qué, a decir verdad?

--Cuando te dije que Kristina iba a ver a sus padres, Diego también fue con ella...a ver a sus suegros-- respondió Said.,guiñando un ojo

--Pobre de él...se lo van a comer vivo, y si está ese mastodonte que llaman hermano de Kristina, peor-- suspiró

--Lo sé

El resto del trayecto siguió igual de animado, con Reny platicando lo genial que era España y su cultura y Said contando sus "duras" experiencias como amo de casa por un mes y cómo la Pareja Feliz lo había desterrado de la cocina y el cuarto de lavado. Lo normal,por lo visto.

Luego de veinte minutos de trayecto, llegaron al edificio donde vivían,la Torre Andrómeda. Un lugar bastante céntrico, pero caro, el cual habían logrado pagar fingiendo ser una familia de cuatro y repartiendo los gastos y las tareas. Eran más los beneficios que los sacrificios, así que por ello estaban bien.

Dejaron el coche en el estacionamiento y se dirigieron a la recepción. Una joven de cabello rubio amarrado en una trenza atendía detrás del mostrador.

--Hola,Maddie ¿alguna noveda...-- preguntaba Said antes de ser interrumpido por el gritito de emoción de la chica al ver a Reny,mientras dejaba su puesto para darle un abrazo

--¡Reny! ¡Estás de vuelta! Pensé que estarías otro mes más en Portugal,pero me alegra ver que te fue bien ¿Como estuvo todo? ¿Conociste chicos guapos?Suéltalo todo

--Calma,calma,nena...tengo mucho que contarte. Sube cuando tengas tiempo, que también te traje algo

--¿En verdad?

Pero antes de que la conversación se hiciera larga e interminable,Said reparó en el bouquet que estaba sobre el mostrador

--Lindas flores-- dijo

--¿Verdad que si? Llegaron esta mañana y son para Reny...No sabía que tenías un enamorado, loquilla

--¿Huh?-- Reny y Said exclamaron sorprendidos. La mirada de Maddie se fijó en ellos, por lo visto, algo no marchaba bIen allí

--Esto debe de ser un error...