"Chiste caro."

"Resulta que se avergüenza..."

Después de una larga tarde con sus padres por fin, pudo huir donde su amado anormal lo esperaba con besos, comida mexicana y peluches de Hello Kitty que podía usar de arma para mantenerlo lejos si se portaba mal.

-Wade. - entró el joven castaño al departamento que curiosamente encontró menos desordenado de lo habitual. -Uh, ¿alguien pidió tacos?

Ni con su pequeña broma de comida rápida apareció su chico al momento. Extrañado entró a la habitación que compartían y ahí, justo en su cama lo encontró tirado con la cubierta de una de las almohadas que Steve les había regalado en Navidad, en su rostro.

Habían también botellas de gaseosas y papeles de comida que fue sin dudar, mucha.

-Petey, no te acerques. - le gimoteo infantil el mayor. -He hecho algo terrible.

-¿Tú? - rió quedo el de gafas, para luego tirarse a su lado en la cama. -¿Tú cuando no haces algo terrible? - suspiro apoyándose en el brazo del antihéroe. -Pero vale, ¿que hiciste ahora?

-Que cruel arañita. - bueno, ni tanto que eso significa que te conoce bien. -Tsk. - la funda de almohada viviente y sexy, se agitó un poco para callar la voz metiche de su cabeza.

-Quise sorprenderte por pasar un mes aburridos, digo sin que mate gente y te enojes.

-¿Y eso es terrible? - trató de quitarle la improvisada máscara, quería su beso aunque no pudiera reconocerlo abiertamente. -¡Wade, quítate eso!

-¡Me comí todo Petey! - se apachurro así mismo en los brazos del más joven. -Nunca me había comido tantas chimichangas sólo por aburrimiento, sólo te pude dejar una.

-Oh tanto drama por eso. - busco su cena sin querer, aún apresado por su novio. -¿Donde esta mi comida?

-¡También me la comí! - dramatizo. -No es educado como dijo Capi suegro, dejar sólo una porción.

Entonces la risa del castaño se dejó escuchar por todo el lugar.

-Sin duda un sonido que tranquiliza. - cuchicheo de nuevo la voz. -Se está riendo de nuestro sufrir esa arañita sinvergüenza. -murmuro otra pero, Wade a ninguna presto atención.

-Me sorprende que se te quedara algo que Papá dijo. - le sonrió mientras le quitaba por fin la cubierta blanca. -Aunque quedes gordo te estas portando bien y eso me alegra.

Lo beso calmo pero eso en la mente de Deadpool no tenía registro, así que cuando este serpenteo su mano por su muslo lo aparto malicioso.

-Me voy a preparar a un sándwich ya que nadie me dejó comida. - se incorporo veloz y ágil del colchón para pegarse al techo.

-Peteeey. - estiró sus brazos para que este volviera y más al ver ese rostro querido mejor optó por pedir otro aperitivo. -También hazme un sándwichito, ¿siii?

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Bueno, después de mucho tiempo surgió esto raro y tierno, con un Wade en abstinencia de sangre tratando de entretenerse con comida y Peter. xD

¡Espero les guste! ❤