Te Voy A Matar Cupido

Capítulo 41

Siento unos brazos alrededor de mi cintura, su respiración en mi nuca y en parte de mi cuello. Comienzo a abrir mis párpados, acostumbrándome a la poca luz de la habitación que entra por el gigantesco ventanal. Despierto en una habitación que no es la mía, me hubiera desorientado de no ser porque recordé lo de ayer.

Entre su agarre, me doy medía vuelta quedando frente a un Sheridan con los párpados cerrados, su respiración tranquila, la boca entreabierta y su cabello ligeramente despeinado pero atractivo. Lo contemple por un rato, viéndolo tan hermoso cuando duerme. No medí la noción del tiempo.

Estaba empezando a extrañar su ronca y varonil voz. Me quite de su agarre y me coloque encima suyo. Enseguida, comencé a dejar pequeños besos en su rostro. Hizo muecas divertidas y se dio vuelta quedando boca hacia arriba. Acune su rostro en mis manos y seguí repartiendo besos, él siguió haciendo muecas; cuando ví que estaba por despertar, bese sus labios. Despertó y me correspondió sin haber abierto los ojos.

- buenos días, guapo - junte su frente con la mía

- me encanta cuando me despiertes así - dijo con esa voz ronca que extrañaba

Levantó un poco la cabeza para volver a besarme. Le seguí por el simple hecho de que amaba sus labios. Sencillo pero cierto. Colocó sus manos en mi cintura y me tumbe sobre su cuerpo, paso sus manos a mi espalda donde comenzó a acariciar lentamente.

Tome su cabello entre mis dedos, enredando y estirando levemente provocando pequeños gruñidos roncos de su parte. Sé que dije que me gustaba todo de él, y no miento al decirlo, pero si algo amo es su cabello suave. Es largo pero no tanto. Antes de separarse, me mordió el labio inferior suavemente.

- me encantas - dejo otro beso corto en mis labios

- ya lo sabia - reí - te quiero - acariciamos nuestras narices, la una con la otra

- yo también -

- ¿que haremos hoy? - le pregunté, continuando con el tema de ayer

- ¿crees poder hacer el viaje astral? - asenti

Tal vez este herida pero, mientras nadie manipule el hechizo, puedo hacerlo sin ningún problema. No es difícil, ni complicado porque ya lo tengo dominado; solo que no debo perder el control y eso solo pasa cuando alguien interviene.

Sin embargo, estando Sheridan sé que eso no pasara.

- no es difícil, solo es evitar que lo manipulen - asintió y comenzó a besar mi cuello - pero... ¿que pasara si no logramos nada? - me miró

- no creo que eso suceda porque ahora sabes donde esta - justificó

- pero siempre hay una posibilidad -

No es que sepa donde esta exactamente Cupido. Sakfer tuvo esa idea por lo sucedido y sonaba lógico todos los argumentos relacionados. No obstante, puede que Cupido sintió el viaje astral y allá desaparecido.

Por otro lado, debemos recordar que estamos en Los Ángeles. La ciudad donde mas ángeles habitan. Tener que buscar un código entre tantos sera bastante difícil puesto que hay muchos, tal vez son inconfundibles pero son parecidos y no puedes guiarte por tus sentidos.

Cuando haces una búsqueda en cualquier otro lado, cualquier sentimiento de energía mágica o poder te guiara hacia tu objetivo porque sabes que ahí solo habita tu objetivo y no hay con que confundirse. Pero todo es diferente cuando estas en Los Ángeles porque sientes magia y poder por todos lados y no sabes cual es la que buscas.

- en ese caso - le puse atención - podemos investigar otros hechizos e intentarlos para ver si conseguimos algo - se encogió de hombros y asenti

Me parecía buena idea.