La carne es débil

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Acabo la jornada de clases decidí ir a biblioteca pero me tuve que encontrar con un viejo amigo llamado Leonardo.

-hola Aldo ¿es cierto lo que me han dicho?

-No lo se que te han dicho

-de lo que paso entre Sahian y tu

-si hemos terminado

-y... por lo menos

-de que hablas

-ya sabes Aldo de tener algo mas

-No la respeto que crees que soy

-mmm... era de esperarse

-y tu que tal con Sofia

- pues no me quejo, Samanta sigue interesada en ti Aldo

-no me interesa

-como no te puede interesar es bonita y no esta nada mal

-pero es presumida y solo piensa en ella

-pues si no te vas a casar con ella jaja

-pues no pero jamas me fijaría en una chica como ella

-si solo vas a pasar un rato con ella no va hacer tu novia

-Leonardo no se en que te has convertido, mejor luego nos vemos.

-claro pero alguien te espera afuera.


cuando salí estaba Samanta estaba afuera se veía muy bien no lo podía negar , poco a poco se fue acercando, no entendí porque me quede inmóvil tal vez fue porque se veía muy hermosa

-Hola Aldo

-Hola Samanta ¿Que haces por aquí?

-pues te esperaba

-¿a mi?

-si pensaba que si podrías llevarme a mi casa

-amm no lo se

-vamos por favor ¿si?

-esta bien

La lleve en mi coche, cuando llegamos a su casa me pidió que me quedara un rato con ella, por mas que le insistí que no podía, me convenció

-Adelante Aldo... Confía no te haré daño, al fin nunca están mis padres

- Gracias

Creo que no fue buena idea que me quedara, despumes que me senté en la sala, me dejo completamente solo, lo mejor era que le dijera que tenia un compromiso y me tenia que ir

-Aldo??

En el momento que escuche mi nombre Samanta estaba a lado mio, no podía creerlo traía un short corto una playera muy escotada, que era ese sentimiento que salia de mi

-Samanta te... te vez muy...

- hermosa, linda, sensual, lo se

-bueno...

-Aldo,¿ tu y Sahian ya no son novios?

-no ella ya no es mi novia

- veo que sigues triste sabes...

-que

- yo se como puedes dejar de estar triste

-¿como?

Sin pensarlo ella me beso, no lo podía creer, yo también la bese, la abrase, ella se recostó en el sillón, yo estaba arriba de ella, veía como poco a poco se quitaba esa delgada playera, me emocione tanto que le ayude, pero... vino a mi mente sahian, no podía dejarla de pensar, lo que hacia no era correcto, inmediatamente me separe de Samanta.

-Aldo que te pasa

-perdón no puedo

-¿que dices?

-Samanta te conozco desde tiempo atrás, no puedo hacerlo, siempre hemos sido amigos

-Aja y que dices de esto que paso

- me deje llevar lo siento

-ya se lo que te pasa, sigues pensando en la tonta de Sahian

-discúlpame no volverá a pasar esto tengo que irme

-Aldo no me dejes así

-discúlpame

-Aldo no me quedare cursada de brazos algún día tu seras mio y no de Sahian


Cariño cuídame hasta encontrar el amor de mi vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora