Hamor Proivido.||Kaisú

30-talves d regrezo?!?!

La reunión acabó, y ambos chicos salieron de la sala; caminando a sus habitaciones.

Kai tomó la mano del pelinegro y entrelazó sus dedos; con una sonrisa de lado.

Kyungsoo se limitó a apoyar la cabeza en el hombro del chico y caminar lentamente hasta la puerta de su habitación.

Pero lo que encontraron dentro los dejó boquiabiertos.

Todas sus pertenencias estaban en una maleta; ordenadas de tal manera que un fan de Tetris sería el primer sospechoso. 

Kyungsoo se separó del moreno y se dirigió a la cama, levemente confundido. 

—Kai, ¿tú hiciste esto?—preguntó con una mueca y lo miró; no del todo seguro.

—pero io hestaba kontigo we

—Oh, sí. Lo siento...

—Fui yo, Jongin.

La voz provino del baño, y un hombre enternado salió de dicha habitación.

—Señor Kim...—murmuró Kyungsoo, y Kai rió.

—Oh, pero miren a quién tenemos aquí. Al señor 'eres mi hijo y te quiero de vuelta'. —dijo el moreno, logrando captar la atención de Kyungsoo.

—Jongin; ya te lo he repetido varias veces. La vida con tu madre es miserable. Ella no tiene nada que darte; trabajas en un mercado de quinta y eres un chico de barrio. Encima, eres homosexual, hijo. Así no ganarás nada en la vida. —Lo miró a los ojos y se acercó a el, ignorando el gruñido de Kyungsoo. —En cambio aquí, en Londres; vivirás cómodamente, sin preocuparte por el dinero o por tu trabajo. Conseguirás una esposa Inglesa; o tal vez una chica que conozcas desde pequeño. No tendrás que lidiar con gente homofóbica porque poco a poco tú serás hétero. Te aseguro una calidad de vida excelente; y te daré mucho más de lo que tu madre pudo.

Jongin soltó una risa al final de su discurso; y se alejó negando con la cabeza.

—La vida con mi madre es lo mejor que me ha podido pasar. Es la persona más cariñosa, comprensiva y buena de este mundo. Es capaz de matar al que me hace sufrir; ella me protege y me enseña qué es lo bueno y qué es lo malo; sin necesidad de tener una mansión en el cerro más alto del mundo; y sin tener joyerías carísimas. Porque su cariño es mucho más valioso que todas tus huevadas costosas juntas; y déjame decirte que ser homosexual no me ha cerrado ninguna puerta. Es más; cuando dejaste de enviarme correos porque te enteraste de mi inclinación sexual, me sentí aliviado. ¡Aliviado de que un homofóbico se me hubiese alejado, maldita sea!, ¡¿Cómo quieres que me vaya contigo; cuando lo único que necesitaba en ese momento era un abrazo y un 'te apoyo hijo'?!, ¡¿Crees que dejar de ser homosexual es como cambiar mi comida favorita; que después de probar tantas veces la pizza, querré ir por una hamburguesa?!, ¡te equivocas!. ¡No me interesa si cada fin de semana me regalas un traje nuevo!; yo... yo solo quiero regresar con mi mamá; con mi hermoso Kyungsoo y ser feliz en Corea. ¡No necesito un idiota en mi vida!, ¿comprendes, o te lo digo en Inglés?— finalizó exaltado, separándose de él y viendo el rostro de Kyungsoo con sorpresa. —No tengo que demostrarte nada. No me iré contigo; no saldré con ninguna chica y hoy mismo me regreso a Corea con MI novio. ¿Entiendes?

Tras decir esto último, empujó a su padre, y cerró las maletas; bajándolas de la cama y tomando la mano de Kyungsoo.

Cerró la puerta tras de sí; y su papá seguía atónito, mirando el suelo completamente perdido.

Kai empujó a tantos chicos mientras intentaba salir; y Kyungsoo estaba tan asustado que lo siguió con la cabeza baja.

Sí señores. Kyungsoo asustado. 

—Al aeropuerto, señor—le dijo el moreno a un taxista; que lo miró mal.

—Soleishon ingleish...

—¡AEROPUERTO, MIERDA!—gritó Kai, y se subió al auto, jalando a Kyungsoo y tirando las maletas en el asiento adelante. 

El señor arrancó el auto; completamente asustado.

Kim Jongin estaba hecho una furia; y cualquiera que se le acercase estaba bajo peligro.

Una vez en el aeropuerto; Jongin fue directamente a comprar los boletos del avión, asustando a la señorita que trabajaba. 

Kyungsoo trató de relajarlo, pero la verdad es que no sabía cómo; ya que ni el mismo podía controlarse. 

—Osito, necesito que te calmes, ¿sí?. Regresaremos a Corea lo más pronto posible; pero necesito que estés bien.

Kai bufó, ignorando al mayor; y golpeó la encimera, apurando a la chica que hacía los papeles. 

—¿A C-Corea...no señor?—preguntó la chica nerviosa.

—Sí, Corea. Apresúrese; no tengo paciencia ni tiempo.

Kyungsoo suspiró. Ese Kai era uno desconocido.

Y el moreno sabía que en ese instante era el retrato de su padre. La misma postura; el mismo tono de voz; y lo malagracia. 

Sintió vergüenza de sí mismo.

Porque estaba haciendo lo que menos quería.

---------------------------------------------

zeriedah x dioz

ok

bolbi

xd

-Rafa