Parte 35

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Estaba ahí, frente a ella, no sabia que decir, ni como empezar—ese día cumplimos once meses—dije, luego suspiré—pasamos toda la tarde en un parque de diversiones, cuando ya era tarde fuimos a mi casa... estábamos juntos cuando su padre llamó, dijo que su tío estaba mal y... se fue—dije, no me di cuenta cuando fue que empecé a llorar.

  —Necesito detalles Ariadna— dijo poniéndose cómoda

—¿para qué? -pregunté

— Necesito saber como te has  tomado esto, desde tu perspectiva, esto es para ayudarte —

— No quiero recordarlo —

— Vivimos a base de recuerdos Ariadna —

— Pues ya no más —

— Ariadna, guardandote lo que sientes no se solucionará, tienes que sacar todo, es malo guardarse las cosas. Algun dia tendras que hablar de ello y te ayudaré para cuando ese dia llege tu ya no sientas dolor —

— Usted no puede ayudarme —

— ¿Te traen a la fuerza? —

— No —

— Deja que te ayudemos, tu madre tu abuela ellas te quieren. te quieren mucho, ellas sufren ¿Crees que a Joel le gustaria verte asi por el?

— Deje de nombrarlo —

— Nos vemos despues, el tiempo terminó ariadna, piensalo hazlo por las personas que te quieren —

Al llegar a mi casa seguía sin emitir una sola palabra, no podía dejar de pensar en él, y me dolía mucho, cada vez que pensaba en el, en los momentos fabulosos que pase con el me dolia, me dolia tanto no estar con el, me dolía no poder abrazarlo, me dolía mucho no poder besarlo, no poder decirle cuanto lo amo y cuanto lo he echado de menos, y odiaba eso.

Pasaba noches mirando nuestras fotos, nuestros mensajes, acariciando a Budy, cuando hacia eso me sentía muy bien , lo único que me sostenía a la realidad era el dolor que implicaba hacer eso.

Y así pasaron los días, mi rutina era bastante aburrida, pero en fin.

Ahora mismo tenía que pasear a Budy, y digo tengo porque mi madre me ha obligado a pasearlo todos los días, sin falta. Y la verdad es agotador.

— vamos Budy, detente, sólo un momento —dije casi asfixiada.

Pero a él pareció no importarle, ya que cada vez iba más recio. Sí, sé que no es lo suficientemente grande para que me jale por medio de la correa, pero es muy fuerte para la edad y tamaño que tiene.

Lo detuve justo enfrente de una banca, me senté en ella. Estaba viendo a todas las personas que pasaban, miraba sus caras, sus gestos, e imaginaba sus posibles problemas, y también sus reacciones, y trataba de comprender lo que sentían, aun sabiendo que cualquier persona diría que soy una loca buscando e imaginando problemas en do0nde no los hay, me cuestionaba sobre eso y me preguntaba si acerté en los problemas de esas personas, pero en quien más me convencía de que tenía problemas es en una mujer, tenía alrededor de treinta o cuarenta años, se miraba triste, por su atuendo supuse que vino a caminar un poco, pero había algo raro en ella, se me hacía familiar

Flashback

-¿Sólo llevará esto?-dijo una mujer delgada de edad media estatura promedio, muy sonriente por cierto.

-Sí-dije haciendo mi mejor sonrisa.

-Que tengas un buen día –dijo dándome el cambio.

Si estaba casi segura que se trataba de esa misma mujer pero obviamente no me iba dirigir hacia ella y decirle " hola, ¿me recuerda? me atendió el otro dia en la florería que trabaja" asi que no hice nada, solo me quede ahi un rato más, después me fui a mi casa y dormí.

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