Angeles y demonios

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"Queen of Disaster"

Trato de tomar una bocanada grande de aire reprimiendo mi dolor y jadeos tosiendo, cubro mi boca con mi mano y después la miro, mi palma está cubierta de sangre.

Trago saliva lentamente, hago un par de sellos y seguido una luz verde aparece en mi mano ensangrentada, llevo temblorosa mi mano a mi herida, rezo para que él jutsu médico detenga un poco la hemorragia y no siga saliendo la sangre.

De lo contrario, ya se el destino que tendrá mi historia y como va a culminar sin nadie como espectador.

Detengo él jutsu médico y pensativa pienso en la última alternativa que me queda. Puedo conseguir curarme con el poco chackra que aún me queda, rogándole a Kamisama que sea suficiente para hacerme cicatrizar un poco la herida.

O puedo guardar el chackra para realizar un último jutsu que me lleve a otra dimensión, esperando no encontrarme en el mismo sitio de donde huí para ser asesinada.

Temblorosa apretó los puños débilmente, tratando de tomar la decisión más racional, el sacrificio de muchas personas no podía ser en vano y ese sacrificio estaba colgando en hilos invisibles sobre mis dedos.

Decidida haciendo un esfuerzo logre sentarme en una posición más o menos cómoda para mi herida y comencé a tratar de juntar todo el chackra que me quedada concentrándolo en mi interior.

No había garantía de que me alcanzara el poder para lograr mi objetivo, a mitad de la ejecución de este todo podía derrumbarse como un pedacito frágil de cristal. Más sin embargo ya no se trataba de si me convenía o no la decisión, siendo sincera la mitad de mi cuerpo está agonizante por un descanso de todo, llegar al climax de el descanso eterno no me parecía una mala idea, más sin embargo siendo esta la salida más fácil y por lo tanto cobarde no me la podía permitir.

Tanta sangre derramada no podía simplemente dejarse pasar por simple capricho mío, si había una posibilidad de vengar lo sucedido ahí tengo que estar, aún cuando la misma vida me estaba dando la espalda era yo la que tenía que levantarse sin ayuda de nadie.

Aún cuando ya no había amigos y familiares, el amor que hubo una vez era lo único que podía impulsarme...

Mis manos ardían y sentía como las lágrimas resbalan por mi rostro quemándolo, un as de luz iluminó mi rostro y sabía que ya se me había esfumado el tiempo de pensar, el jutsu estaba consumiendo mi cuerpo para llevarse a cabo, dentro de milésimas de segundos sabría si mi alocada idea había resultado o si iba a despedirme de una vez por todas no volviendo a despertar...

Makoto bajo Sanae siendo asesinado...

Sanae mirándome con expresión vacía...

Recuerdo haber sentido que el cuerpo me hormigueaba y el pánico se apoderaba de mi cuando la sentí acercarse, mi hermana había matado a la persona de la que hace poco me estaba diciendo estaba enamorada, apenas hace un rato el sé hallaba hablando con papá y al siguiente segundo había dejado de estar vivo.

Abrí los ojos lentamente y me lleve las manos al cabello apretándolas. Juraría que todo había sido una mala pesadilla de no ser por el dolor que sentía en la cabeza, si tan solo no escuchara todo el alboroto y las múltiples voces que se cruzaban afuera, yo misma me aseguraría de que todo había sido una ilusión.

Ahora mismo, mi padre estaba a mi lado, yo estaba acostada en la cama, apenas hace un rato cuando desperté me había soltado a llorar y mi padre había sostenido mi mano firmemente, al mismo tiempo que me acariciaba mis nudillos en un acto de reflejarme su apoyo.

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⏰ Última actualización: Jun 17, 2017 ⏰

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