Inició de clases, una época en la que muchos se sienten emocionados, otros fastidiados, pero yo, yo no sabía lo que sentía, no es fácil ser la chica nueva, no me causaba miedo conocer gente, tampoco me alegraba, simplemente me daba igual.Fui a recoger mi horario de clases a la secretaría, eran las 7:00 am y realmente creí que el día se haría eterno, iniciando porque no podía encontrar mi salón. Fui al baño a refrescarme la cara, estaba muy estresada , al entrar encontré a una chica llorando, mi primer instinto fue ignorarla, pero jamás vi a alguien llorar con tanto dolor, así que decidí hablar.
-Hola, ¿te puedo ayudar en algo?- la chica tenía la respiración agitada y no dejaba de llorar, era realmente hermosa, tenía el cabello largo, ondulado, castaño claro, piel morena, ojos verdes, labios delgados y un cuerpo muy trabajado, la chica al darse cuenta de como la observaba me dijo, -¿Algún dólar en mi cara?- me puse nerviosa ante su reacción -Yo... no, solo quería ayudarte - al terminar de hablar cogí mi maleta y salí corriendo de ahí, seguí en busca del salón sin dejar de pensar en aquella chica, se veía realmente destrozada.
-¡Al fin! - grité cuando encontré el salón, no me percaté de la gente que me miraba como si fuese un bicho raro, golpee la puerta y entre, -Buenos días, soy Chloe Dobrev- me presenté ante el profesor que se encontraba sentado en su escritorio, -Señorita Dobrev adelante, soy Alex Maxwell, tu profesor de Biología, la clase es a las 7:15 no a las 7:50- Me dijo señalando el reloj - que no vuelva a ocurrir por favor y bienvenida- mis mejillas se sonrojaron, realmente estaba muy apenada por la tardanza.
Al entrar al salón me quedé de pie ante los estudiantes, parecía una boba, aunque muy pocos parecían notarme, -Siéntate al lado del señor Gest - me dijo el profesor, pero... ¿Quién diablos es Gest? Un chico al darse cuenta de que no sabía a quién se refería alzó la mano así que me dirigí hacia el, me acomodé en la silla y le agradecí.
-Mucho Gusto soy Chloe Dobrev- el chico me sonrió de una manera muy tierna- Mucho gusto Chloe, soy Ian Gest- una pequeña risa salió de mi y el me miró extraño - ¿Pasa algo? - me dijo serio - No no, es que pensé que Gest era tu nombre, disculpa - Dije volteándome para ocultar mi risa -La mayoría de gente lo confunde, se que no es un apellido muy común- me dijo con una sonrisa lo cual me hizo tranquilizar.
Al terminar la clase me dirigí a la cafetería, estaba repleta, algo de no creer, fui a hacer la fila cuando sentí una mano por detrás, me volteé y era la chica del baño, -Discúlpame, no quería hablarte mal, se que tú intención solo fue ayudarme, ¿eres nueva verdad? - Sonreí ante su disculpa - No tienes que disculparte, creo que en esa parte nos parecemos mucho, también explotó cuando estoy mal- solté una pequeña risa a la cual ella se me pegó- Si, mucho gusto Chloe Dobrev - dije respondiendo a su segunda pregunta - Sophie Larson, un placer.
Mientras íbamos haciendo la fila me fue contando sobre cómo era estar en esta preparatoria, recogimos nuestras comidas y seguimos caminando sin rumbo fijo - ¿Tienes donde sentarte? - preguntó Sophie, - Creo que tendré que sentarme en el piso y compartir un poco de mi sándwich a los ratones que me encuentre- dije señalando toda la gente que se encontraba acá, a lo cual Sophie rió llamando la atención de los que estaban más cerca a nosotras, - Vamos Chloe, siéntate conmigo y mis amigos- caminamos hasta una mesa donde habían cinco chicos y tres chicas.
- Hola Chloe me dijo una voz que ya reconocía, era Ian, sonreí y lo salude con la mano - ¿Ya se conocían? -preguntó Sophie - Si, estamos en la clase de biología- le respondí e Ian sonrió - Bueno chicos, ella es Chloe, es una actriz porno y viene en busca de penes- Al oír risas mis mejillas se pusieron tan rojas que creí que iban a explotar - ¡Nada de eso es cierto! - dije mirando a Sophie y ella sonrió - Bienvenida al grupo- dijo una chica al lado mío, - Déjala, Sophie siempre hace eso con todos, por cierto soy Leslie, Leslie Diesel -
Solté una risa ante el comentario de Leslie, todos se presentaron excepto un chico, era muy guapo, alto, ojos miel, cabello castaño, con su cabello despeinadamente perfecto, un magnífico color trigueño, era acuerpado pero no todo musculoso, era muy callado, por lo cual físico y personalidad no combinan en este chico- sonreí en mi interior, terminamos de comer y salimos de la cafetería.
-¿Qué clase tienes?- preguntó Sophie al verme confundida, - lenguaje, pero no sé dónde son los salones- ella sonrió - tenemos la misma clase, vamos.
El día transcurrió muy rápido, no como pensé en un principio, hoy por ser el primer día nos iban a dejar salir más temprano, cuando se finalizó toda la jornada, Sophie me pregunto dónde vivía, lo sorprendente es que ella vive dos casas al lado de la mía.
Íbamos caminando y se me vino a la mente el verla llorar, así que hablé.
- Sophie no quiero ser impertinente, pero, ¿puedo saber porque estabas llorando? -
- Chloe a penas te conozco y jamás había sentido una conexión tan grande con una chica, me brindas confianza, te contaré pero, ¿puedo ir a tu casa? -
-Claro Sophie - 15 minutos después ya estábamos en mi casa.Eran las 4:00 pm, estábamos viendo una película pero de repente se fue la luz, así que subimos a mi cuarto y pusimos música desde el celular, Sophie estaba algo triste, pero sin yo decir nada, empezó a hablar - Abusaron de mi cuando tenía 10 años, mi mamá trabajaba y no podía cuidarme, así que la Señora Meyer, nuestra vecina le hacía el favor, ella vivía con sus cuatro hijos, dos pequeños, un adolescente y el mayor, que tenía 26 años, él, Brent, abusaba de mi, nadie lo sabía, el me decía que si le contaba a mi mamá, ella se pondría triste y ya no me querría, así que yo me quedé callada.
Cuando cumplí los 13 le dije a mi mamá que yo me podía cuidar sola, ella aceptó, así que ya sentía que no volvería a sufrir - su voz sonaba como si estuviese a punto de llorar y lo único que pensé en hacer fue abrazarla - eres la primera persona que lo sabe Chloe, jamás se lo había contado a nadie, júrame que será nuestro secreto - El saber esta parte de su vida me hizo ver que ella confiaba en mí, no llevamos un día de conocernos y aún así, ella me contó lo más fuerte de su vida- Te lo aseguro Sophie, pase lo que pase jamás le diré a nadie.-
- Igual aún no te termino de contar todo, ellos se fueron a vivir a otra ciudad, ese día que se fueron me sentí tan feliz, no volvería a verle la cara a ese desgraciado, hasta hace 2 días, estaba entrando a mi casa cuando alguien me cogió por detrás, me tapo la boca y abrió la puerta, yo intenté soltarme pero no pude, cuando cerró la puerta, me soltó y era Brent, me violó de nuevo Chloe, pero esta vez me drogo, no supe cuando se fue, solo me sentía la persona más desafortunada del mundo, ahora solo quiero morir, ¿por qué a la gente buena le pasan cosas malas? -
Esa pregunta...esa pregunta que me he hecho por mucho tiempo, ¿la diferencia? Las cosas malas que a mí me pasan no son nada comparado a lo de Sophie. No sabía qué decir, estaba anonadada- No lo sé Sophie, no lo sé. Solo debes sabes y tener presente que nada de lo qué pasó es tu culpa, te aseguro que ese imbécil algún día pagara todo lo que hizo.- En ese momento Sophie solo me abrazó y con todas sus fuerzas.
Termino de transcurrir el día, ya eran las 7:00 pm y acompañamos a Sophie a su casa con mi mamá, ella era la típica madre que se preocupa por todo y por todos, pero ahora, después de saber la historia de Sophie, agradezco eso.
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¡No confundas amor con sexo!
Teen FictionSoy Chloe, una chica británica de 16 años, una de las muy pocas que creen en el amor a lo antiguo, o al menos lo creía, ahora creo en el amor salvaje, el amor que hace despertar esa parte feroz de ti, todo gracias a Adam. No sé si en este punto de...