●13●

27 1 1
                                    

Varias veces me van preguntando ¿como no puedes odiarlo después de todo? 

Y es que, cariño, nunca voy a poder odiarte, no se puede odiar a quien alguna vez quisiste, o quizás... algo más.

Me cuestionan: ¿Cómo no puedes olvidarlo?

Y es que, mi vida, nunca voy a poder olvidarte, porque me diste tantos momentos por recordar...

Me preguntan: ¿Cómo pudiste querer a eso?

¿eso? Perdón. El, esa persona tan maravillosa, esa persona con la que  no puedes pasar ni un momento sin  sonreír, esa persona que me cambio la vida aunque no quiera admitirlo. Cariño, gracias, por la breve historia y perdón... por ser yo quien la haya hecho así...

Mi señorito, no tan mío, bueno, para nada mío.

Nunca abandones tus sueños...
Nunca dejes de luchar...
Puedes caer... eso está permitido, pero prometeme una cosa ¿si? Vuelve a levantarte. Cueste lo que Cueste.
No me olvides por favor...

Dicen que cuando enamoras a una escritora nunca mueres, y cariño, a este punto, ya eres inmortal...

Dicen que las expectativas de una lectora son muy altas. Sinceramente, siendo una de ellas, si, a veces queremos que llegue un Tobías, Travis, Patch, Jev, Hardlin, Christian. Pero de repente llega ese chico que no es un Brad Pitt, es alguien como tú, a ti, que te escribo esto, llega alguien como tú y las expectativas se rompen.

No para enamorarse de alguien se necesita estar estudiando lo mismo, chocarse, levantar libros u hojas, y sentir algo.

A veces tener una amiga o un amigo en común basta lo suficiente para encontrar a tu mitad de limón salvaje

Se que nunca te diría esto, te quiero más de lo normal. Para siempre mi limón salvaje...

●Lo que nunca te dije●Donde viven las historias. Descúbrelo ahora