Capitulo 1

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Aquí estoy de nuevo, sufriendo por el maldito dinero; debo tres meses de renta en la pocilga de 3x3 donde me hospedo además de un semestre en la universidad; el casero lleva molestándome toda la maldita semana amenazando que me echara si no le pago por lo menos la mitad antes de que la semana termine, y para colmo en mi estúpido empleo de medio tiempo me explotan cual esclavo por 2 dólares con 50 por hora.
Me repito a mi misma cada día lo estúpida que fui al irme de casa a los 19 años con el supuesto amor de mi vida, un idiota que desaprecio a los 6 meses después de vaciar mis cuentas bancarias y llevarse cada centavo de mis ahorros, me duele la cabeza el tan solo recordar su asqueroso rostro.

-maldito seas Hansol...-

-Deja de maldecir y sigue trabajando muñeca.-

-Si,si como diga jefe.-estúpido como lo odio, debería pagarme mas por hacer este asqueroso trabajo- me dije a mi misma.

Continúe limpiando aquella enorme barra de mármol que yacía cubierta de sangre, pues hace unos minutos hubo una pelea, al parecer un hombre de unos 45 años siguió a su mujer hasta este lugar donde la encontró con su mejor amigo en una situación no muy decente, y creo que lo que paso después ya lo saben, el hombre lo golpeo contra la barra de mármol haciendo que esta se cubriera de sangre, después de esto llego la policía y se los llevo detenidos, que acaso no puedo tener un día normal?
Lo único bueno que me ha dejado este lugar es un amplio conocimiento sobre los hombres, llegan desde artistas famosos, empresarios, padres de familia, hasta hombres en busca de "acción" he pasado por muchas situación con los últimos, creen que al ver a una joven mesera de bar tienen el sexo asegurado, el ultimo hombre que intento algo se llevo su buena golpisa y uno que otro hueso roto, malditos hombres.

Termine de limpiar antes de que mi querido jefe me llamara.

-Hey muñeca ven aquí!.-

-Ya voy.-

-Necesito que te quedes a trabajar esta noche y antes de que me interrumpas quiero decirte que te pagaré al doble las horas extra.- No suena como una mala idea, pense.

-tsk...esta bien, pero porque no se lo pidió a Edna.-

-Porque Edna es una zorra y esta noche viene gente decente primor.-guiñando el ojo

-Y eso que tiene ver.-lo mire mal

-Porque se que tu no intentaras seducir al señor Choi muñeca.-

-Señor Choi?.-

-Si, el señor Choi, es el dueño de grupo SVT, la compañía inmobiliaria mas grande del país.- interrumpió mientras le dio un trago a su vaso de vodka.- Y el vendrá esta noche para hacer unos negocios, por eso quiero que te quedes.-

-Y ese tal Choi porque querría hacer venir a este bar de mala muerte?.-

-Auch eso dolió muñeca.-pero por esa misma razón necesito hacer negocios con el, así que portate bien.-guiñando el ojo.

Que mas da, tendré que trabajar horas extra, me dirigi a los baños de damas, me mire al espejo, lucia comí un maldito zombie, tenía ojeras bajo los ojos y mi cabello totalmente desordenado, me lave la cara y me hice una coleta, tenia que verme lo mejor posible, o por lo menos no tan horrible. Salí de los baños para después ser llamada por mi jefe, camine entre las mesas y pude ver algunos hombres de traje junto a la barra, un hombre canoso de aproximadamente unos 45 años, seguro él es el tal Choi, se veía como todo un anciano verde, el otro tenia unos 27 máximo 30, era bastante apuesto, parecía ser el secretario, y el último hombre era mi querido jefe Hoshi.

-Sirvenos algo de tomar.- dijo mi jefe.- para el señor Choi que sea lo mas caro de la casa.-

Solo asenti con un simple "Sí" y me posicione detrás de la barra, tome la botella de vodka y servi dos vasos, tome el vino mas caro y añejo que teníamos, lo serví delicadamente en una copa y se lo entregue al hombre canoso.

-Oye muñeca te dije que al el señor Choi.-

Los hombres se rieron mientras yo los veía confundida.

El joven de cabellera negra sonrió, tomo la copa y la bebió de un solo trago

Así que él es el tal señor Choi, es bastante guapo.

Me quede tras la barra sin hacer nada, tan solo atendiendo los pedidos de aquellos hombres, el tan Choi me miraba de vez en cuando y me sonreía, mierda tiene una sonrisa bellísima; después de charlar por horas los hombres se retiraron.

-Fue un gusto hacer negocios con usted.-dijo el pelinegro, para después darme una sonrisa y salir del lugar.

-Fue una larga noche muñeca, porque no tomamos unos tragos eh?.-

-No, ya estas muy ebrio.- me acerque a el y tome su brazo para posicionarlo tras mi cuello, y llevarlo hacia el sofá que se encontraba en su oficina.

Me quite el maldil, y después de asegurarme de que la puerta estaba totalmente cerrada me dirigí a casa, camine por las oscuras calles de Los Angeles, eran aproximadamente las 3:30 am y yo seguía sin poner mucha atención, cuando escuche pasos detrás mio, mierda alguien me sigue, comencé a caminar rápido y los pasos se aceleraban, mierda, tengo que correr.

-hey! Porque caminas tan rápido?.-

Tome mi bolso de defensa personal, soy lista y le había puesto dentro una roca, me di la vuelta rápidamente y con todas mis fuerzas arroje mi bolso. Te lo mereces acosador dije victoriosa, cuando me acerque...

Oh no...

Mierda, acabó de noquear al señor Choi.

OH MY DADDY! S.CoupsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora