Capítulo 10: Arribo a París

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Narra Alois 

El viaje a París fue muy duro, tuvimos mucha turbulencia al despegar, a mitad de camino y al aterrizar el avión derrapó, es estas tres situaciones mi corazón iba a mil por hora y el de mi madre no se diga quien tuvo una ligera discusión con la aeromoza al bajar del avión

Después de recoger nuestras maletas nos dirigimos al punto de encuentro con el Sr. Agreste y su hijo, ¿nervioso? Ni se diga, mi madre por otro lado desbordaba de alegría, podría decir que un montón de brillos la rodeaban

Narra Adrien

Llegamos diez minutos después de la hora acordada, mi padre se enojaría y al darse cuenta que Nino y Alya venían conmigo me mataría. Cuando lo encontramos estaba con una dama y un niño como de mi edad.

-Em buenos días...tardes- dije a los tres

Mi padre solo se limitó a lanzarme una mirada asesina, el niño me observaba admirado y la dama me abrazó tan fuerte que pensé que iba a estallar

-mucho gusto de conocerte, después de tanto Adrien, cuanto has crecido eres mucho más lindo en persona

-me da mucho gusto de conocerla también señora *necesito aire*

-oh mira no me dijiste que tenías más hijos-dijo mientras corría a abrazar a Alya y Nino

-Ellos no son mis hijos, son compañeros de Adrien-dijo mi padre con la vena de la frente saltada, estaba súper enojado

-Mucho gusto de conocerlos, compañeritos de Adrien

-Mucho gusto-dijeron Alya y Nino quienes también empezaba a faltarles aire

Narra Alois 

-hijo ven a saludar no seas mal educado

-hola mucho gusto soy

-Alois Rowland!!!-dijo la chica que venía con el hijo del Sr. Agreste mientras corría a abrazarme

-Mucho gusto Alois, soy Adrien Agreste, él es Nino y ella es Alya son mis amigos

-no puedo creer que te conozca en persona, soy una de tus mayores fans-decía Alya sin soltarme del abrazo, el otro chico Nino si no mal recuerdo, parecía enojado al verla abrazándome

-Adrien hora de irnos la señora Rowland y su hijo deben estar exhaustos por el viaje

-si padre-dijo Adrien rápidamente-¿podemos pasar dejando a Alya y Nino a sus casas?

-no-respondió fríamente el Sr. Agreste, el chico solo se limitó a bajar la cabeza ni siquiera quiso ver a sus amigos mientras nos dirigíamos a la salida

-Tranquilo viejo, tomaremos un taxi-le gritó Nino

Por un lado me sentí mal por ellos, pero no podía opinar, una limusina negra aguardaba fuera del aeropuerto, luego de veinte minutos llegamos a la mansión la cual se veía grande

-Mi hijo les enseñara su habitación, la cena se servirá a las 6:00, por desgracia no podre acompañarlos tengo unas cosas pendientes del trabajo

-no se preocupe Sr. Agreste lo entiendo a la perfección-dijo mi madre.

-bien, síganme-dijo Adrien

Recuerdan que dije que la mansión se veía grande desde fuera, pues estaba en lo cierto es enorme, gigantesca, hay mucho espacio en cada habitación, luego de un rato el tour terminó era tiempo de ver dónde nos alojaríamos, mi madre dormiría en el cuarto de huéspedes y yo dormiría con Adrien (eso suena mal XD)

La Chica del CumpleañosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora