Una especial misión secreta. ✂ Narusasu one~shot ✂

✂ Una especial misión secreta ✂ ---

El sol estaba en lo más alto de un cielo completamente despejado. Hordas de pájaros volaban por éste en una formación de uve. Era un perfecto día para irse de picnic en familia, o salir a entrenar sin preocuparse por si lloverá o no. Tsunade observaba por la ventana de su oficina de Hokage a Naruto pasear por los alrededores, recién venido de una misión, silbando y con sus manos embolsadas en sus bolsillos. Fabricó una pequeña sonrisa al verlo tan sereno, le gustaba la paz que emanaba a sus alrededores. Un sol andante, quizá era. Rio y volvió a sentarse en su silla con los pies apoyados en el escritorio. Había terminado su papeleo y por fin podía tomar un descanso.

- Esta silla es horrible, voy a quedar con el trasero cuadrado, ¡Shizune! - Refunfuño.

La puerta se abrió a los segundos por una agitada pelinegra.

- ¿Me llamo lady Tsunade?

-Sí. Tráeme algo de beber.

- ¿Y su papeleo?

- Ya lo termine. -Dijo con su dedo moviéndose en cada silaba. - Oh, y algo más, un almohadón.

Shizune suspiro para luego asentir y retirarse.

Ni bien Shizune se retiró de la oficina, se escucharon suaves golpes provenientes de la puerta.

- ¡Pase! - Espeto acomodándose.

- Permiso, Tsunade-sama. - Dijo Kakashi entrando a la habitación. - Vengo a darle el reporte de la misión.

- Bien. ¿Todo salió bien? ¿Qué sucedió con Gaara?

- Le sacaron su bijuu, pero lo revivieron.

- Ya veo. Deme el informe y retírese.

Kakashi extendió el folio hacia la Senju, que lo agarro y lo dejo sobre su escritorio.

Pasaron unos segundos y Tsunade frunció el entrecejo al ver a Kakashi aún de pie frente a su escritorio, mirando por la ventana.

- Puedes retirarte. - Le repitió, una clara invitación para que se vaya de la oficina.

- ¿Ese no es... Naruto?

- ¿...? - Tsunade se paro de su asiento y enfoco su vista hacía donde Kakashi apuntaba y así era.

Naruto estaba aparentemente disfrazado para lo que suponían que era para pasar desapercibido, aunque, claramente, no lo logro. Tenía puesta una capa negra con dos lineas paralelas, rectas y gruesas, blancas en la parte baja, que le llegaba hasta los pies. En su cabeza tenía puesto un sombrero de aviador y unas gafas negras. Corría de poste a poste, ocultándose de todos.

- ¿Qué es lo que hace?

- Si estamos hablando de Naruto, sería imposible adivinar.- Suspiro resignado Kakashi. - Con permiso. - Y se esfumo en un abrir y cerrar de ojos.

Tsunade le echó una última mirada a Naruto para luego chasquear la lengua y correr la vista.

- Ya se le pasara.

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No fue así. Pasó una semana entera en la que la Senju observaba a Naruto completamente disfrazado dirigiéndose a quien sabe donde. La situación le estaba hartando, su papeleo se había acumulado a millones, todo por no poder concentrarse, todo por Naruto. No dejaba de preguntarse que tramaba, sus pensamientos no se corrían de Naruto y la frustraba. Shizune le había prohibido salir de su oficina hasta acabar con su papeleo y escapar le era imposible, pero de veras que quería saber qué pasaba.

- Permiso, Hokage-sama. - Dijo un joven de ojos perlados cruzando la puerta de la oficina.

- Neji. - Le saludo.