Ep 4/ 3312

150 13 5
                                    

Abrí los ojos y veo el techo de mi habitación. Parpadeo un par de veces para acostumbrarme a la luz y me giro a ver a Zen.
Este estaba durmiendo como un bebé. Me reí bajito y empecé a zarandear su brazo.
-Zen, despierta- Este abrió un sólo ojo y me miró, luego abrió los dos. Este chico si que es raro. Bueno, es un vampiro, que esperabas Wendy.
El se sentó en el colchón, y talló sus ojos, sonreí y me senté en la cama.
-Hoy es tu primer día de clases- Dije alegre, el se dio vuelte y me sonrió. Se me hace tierno verlo tan adormilado.
-Bueno, arriba que hay que aprontarnos- Me baje de un salto de la cama y empiezo a buscar mi uniforme. El se levanto y se puso a hacer el pino en el suelo. Fruncí el ceño.
-¿Que haces?- Sonreí divertida.
El se levanto y se encogió de hombros. Negué con la cabeza y fui al baño a vestirme. Me cepillé y empecé a hacer todas esas cosas aburridas que se hacen en la mañana.
Salí y me acordé.
-Necesitas cuadernolas y útiles. Yo te puedo prestar una mochila.
El me sonrió mostrando sus filosos dientes.
-Gracias- Se sonrojo y yo le revolvi el pelo. El bufo.
-Me había peinado- Se quejó.
-No necesitas peinarte- El se encogió de hombros.
-Bien, necesitamos ir a comprar eso antes de ir al instituto, así que andando.
-Pero..no tengo dinero- Bajo la mirada. Rodee los ojos.
-Yo pago, ahora si no muves ese trasero, vamos a llegar tarde a clase.- El soltó una carcajada y fuimos a un supermercado.
Compramos 6 cuadernolas, algunos lápices, goma, saca puntas, bueno, lo esencial.
Llegamos al instituto y todas las chicas posaban su mirada en Zen.
-Al parecer tienes admiradoras, Zen.- El fruncio el ceño y yo reí.
Entramos al instituto y nos fijamos en los horarios, coincidiamos en casi todo, menos en Biología.
-Bien, ¿quieres que te enseñe el instituto?- Pregunté, el tenia la vista clavada en la laptop que yo tenía en mi brazo.
-¿Que es esto?- Preguntó.
-Es una computadora, es como el celular, pero podes tener mas juegos y eso, después te enseño a usarla.
Entramos a nuestra primera clase, matemáticas.
Todos nos fuimos acomodando poco a poco.
La clase empezó y Zen no hacia mas que fruncir el ceño.
-No entiendo eso- Susurró.
-Mira, es muy sencillo, solo tienes que calcular..- La maestra me interrumpió.
-Señorita, quiere pasar a explicarlo?- Preguntó.
-Oh.. Y-yo no.. Estaba explicándole algo que no entendía
-Si tiene alguna duda tiene que venir y plantearmela a mi.
-Ella estaba mas cerca, y usted estaba dando la clase.
-Estoy aquí para enseñarle, señor Zen, no soy un vampiro, no muerdo- Zen cerró los puños de golpe. Oh oh.. Punto débil.
Zen alzó la manl hasta la profesora y esta voló hasta el techo y calló.
Mierda, tenemos un 3312
-¡Zen!- Lo agarre del brazo y salimos corriendo de allí.
Llegamos a la salida y aflojamos el paso, yo paré en seco.
-Estas loco Zen?! ¡Ahora te buscaran por todos lados! ¿Por qué diablos lo hiciste?- El apretó su mandíbula y bajo su mirada, yo seguía muy enojada.
-¡Pudiste haberla matado!- Grité, el cerró los ojos de golpe.
-Solo.. Callate- Dijo y empezó a caminar. Lo tome del hombro y lo giré para que me miré.
-Escuchame, estamos en la tierra, no se si allí en tu mundo sea normal lanzar personas por los aires, pero aquí no, nadie cree que los vampiros son reales y esa maldita escuela tiene cámaras, ahora seguramente te están buscando para hacerte quien sabe que, pero estoy segura de que bueno no es, así que deja de comportarte como un niñito y ayudame a pensar que diablos haremos, no puedes ir por la calle como si nada, te reconocerán.- Y solté todo, el me miraba sin ninguna expresión en su cara, eso me molestaba tanto de el, no se si esta triste, enojado, alegré.
-Es fácil, volveré a mi urna hasta que todo se olvide.
-No puedes hacer eso...
-¿Por que no? No quiero que me atrapen- Se cruzó de brazos.
Baje la mirada y lo tomé de la mano, este de tenso.
-Porqué... Porque eres mi amigo, se que nos conocemos hace unos días, pero no quiero perderte, esto jamás se olvidará hasta unos años.. Mira, podemos hacer lo siguiente, tu vas a tu urna, y yo te llevaré comida y todo lo necesario, ¿Si?- Dije y lo solté.
-Muchas gracias...- Y de un momento a otro estaba en sus brazos.

Dulces Colmillos ^.^Donde viven las historias. Descúbrelo ahora