HISTORIA DE UN VENGADOR

Capitulo III - Los Bening

El reloj en la mesita de noche marca las dos de la madrugada, Need lleva horas dando vueltas en su cama intentando dormir, finalmente se decide salir de esa habitación poniéndose una chaqueta y pensar un rato en el aire fresco que se supone que hay afuera. Un pasillo que se ubica a su izquierda, fuera de su habitación, lo dirige a un balcón que tiene una vista hermosa del inmenso lago que está a las lejanías de la casa de Francisco, hay un cielo muy estrellado y brillante con una luna muy iluminada.

- Es una vista muy hermosa ¿no? –Era Francisco, quien se le acerca

- Lo es. –Responde Need –Creo que ni se acerca a la que hay en Spera –Dice recordando la vista del cielo nocturno que él veía con su madre en el césped del patio trasero de su casa esas noches cuando era muy pequeño. Hubo un breve silencio entre ellos mientras ambos contemplaban aquella vista.

- ¿Cómo te encuentras? –Pregunta Francisco -¿Por qué no puedes dormir?

- Creo que… creo que. Por alguna razón mi mente no quiere descansar –Responde el chico, pues no paraba de pensar en que por algún motivo él no debería de estar allí con ellos, no lo merecía. -¿Por qué no duermes tu?

- Aún no supero que en pocos meses seré padre –Le Responde

- ¿Por eso? –Exclama Need –Yo no pudiera dormir si un hombre psicópata en estos momentos está tramando algo para matarnos

- ¡Ah! ¿Es por eso que tú no puedes dormir? –Dice –No te des mala vida, ese no es más que un malcriado niño –Dice quitándole importancia a la excusa

- Ese tipo dijo que te verás en la obligación de aceptar su oferta. Se ve que tiene muy malas intenciones –Dice Need lamentándose –Y por alguna razón. Es mi culpa, por haberme entrometido ese día en sus asuntos

- Si no te hubieras entrometido, –Le responde Francisco mirando a lo lejos el hermoso lago iluminado por las estrellas y la luna que hacia reflejar cristales inalcanzables y preciosos sobre el –Mi esposa quizás no estuviera viva, y yo no estuviera feliz en estos momentos por la llegada de mi hijo. Sabes. Lo hemos estado esperando por durante mucho tiempo, ya creíamos que no podríamos ser padres.–Se voltea para mirarle los ojos a Need -Te lo debemos a ti Need lo mira fijamente a sus ojos que hablaban más de lo que Francisco era, que le ofrecían amistad, confianza, seguridad, protección, pero. Por alguna razón su generosidad inmensa que él ofrecía era… extraña.

- ¿Por qué esos tipos te tienen amenazado? –Le pregunta

- Quieren mi empresa –Le responde - ¿Eres el dueño? -Exclama - Si.

Need queda sorprendido, creyó que Francisco tenía un cargo muy importante en ella y por ello tenía una hermosa casa y un estupendo auto, pero. ¡Es el dueño! Para el dueño de tal empresa gigante esas cosas sólo serian baratijas, ¿Por qué si es el dueño? ¿Por qué no se contrata unos guardaespaldas para que lo protejan de los planes de Harry? ¿Por qué no usa carros blindados y vive en una mansión? Tal casa era hermosa y espaciosa, pero era más… una quinta. ¿Porque es tan humilde?

- ¡Entonces eres un multimillonario! –Exclama Need. Francisco suelta unas carcajadas y afirma

- Si, tal vez si

- Entonces, ¿porque eres así? –Dice con naturalidad –Digo, si yo lo fuera, lo no recogería a vagos de la calle ni aunque me fueran salvado la vida, es más, no estuviera por ahí yo sólo tuviera escoltas y eso… Francisco sólo se ríe

- Para que veas. No todos los multimillonarios somos así. –Le responde –Algún día lo fui, -Dice recordando –El típico niño hijo de papi y mami. Egoísta, malhumorado…