HISTORIA DE UN VENGADOR

Capitulo IV - Guerra Oscura

Ya se cumple una semana desde el trato de Need con Francisco y Greta, ahora es el nuevo mensajero personal de Francisco, lleva paquetes a todas partes del edificio y la fabrica, cartas e información supuestamente importantes, sin embargo, no es tan agotador ese trabajo, aunque si aburrido, Francisco se la pasa muy ocupado en conferencias y reuniones en las que algunas él no puedes estar. En sus tiempos libres, por las tardes, practica algunos ejercicios de matemáticas y mejora su ortografía con la ayuda de Greta, ha mejorado mucho, ella sí que tiene paciencia con él. Ha tratado de tener un perfil bajo, sin embargo ha sido algo difícil porque los empleados le conocen como el claudicante de Francisco. Por alguna razón esas personas son muy cordiales con él, cada vez que lo ven le saludan y algunos tratan de buscarle conversación lo cual le parece fastidioso a Need, no le gusta hablar mucho con personas tan hipócritas como esas, así le parecen, cree que algunos le tienen miedo por lo sucedido aquella vez con Harry al salir de la compañía, por eso que él dijo: <<Él niño es peligroso>> y que por eso intentan ganarse su confianza, para que no les haga daño.

Por haber mencionado que se aburría en el trabajo Greta le dio unas novelas para que se entretuviera en su tiempos de “vagancia”, <<Así mejoras tu lectura y tu habla>> le dijo, desgraciadamente le pregunta siempre que leyó así que no puede inventar mucho.

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El libro que leía ya estaba aburrido, la vista se le estaba cansando y por poco se queda dormido si no es por Francisco que sale de su oficina para una nuevo mandato.

- Need llévale esto a Paúl, el jefe de seguridad. Debe de estar en su oficina, en la parte inferior de la empresa

Need asiente y con el paquete en sus manos parte al lugar. Dejando su libro en el sillón donde estaba sentado fuera de la oficina de su jefe mientras que él estaba en un importante conversatorio. Las oficinas de comercio están en un enorme edificio de más de treinta pisos en la misma fábrica, aparte de lo alto que es ese edificio (pues en Spera no se encuentran torres así) también es gigantesco, la oficina de Francisco estaba en el último piso, el 32, es prácticamente todo el piso para él, es como un pent-house, las paredes son de vidrios, y tiene una mesa de billar, una pantalla enorme, es toda una casa, porque hasta cocina tiene. Pero Francisco se la pasa más es en otra oficina que también nombró suya, en el piso 23, una muy pequeña en comparación con la otra, pero tal parece que a él le gustan las cosas sencillas, <<Además aquí estoy más pendiente de mis empleados, porque trabajo con ellos, y no me entretengo con la mesa de billar>> eso le dijo a Need ese día que él le pregunto el motivo de su extraño cambio. En fin. Ese lugar es toda una ciudad dentro de otra.

La parte inferior es en el sótano, se fue por las escaleras ya que el ascensor no llegaba y él quería salir de eso rápido. A pesar de que iba bajando, ya cuando iba por el décimo piso ya estaba mareado de tantas escaleras, allí fue donde mágicamente aparece el ascensor que lo lleva hasta el fondo. Había un pasillo largo y oscuro con una bombilla de luz amarilla que fallaba, finalmente llega a la puerta y toca escuchando eco en el interior, cuando va a volver a hacerlo ésta de repente se abre lentamente. Need se asoma y como ve que no hay nadie dentro pasa para confirmarlo, Lo único que había eran estantes y los monitores de las cámaras de seguridad que vigilan cada sector del edificio.

- ¡Este viejo no está aquí! –Exclama enojado por decepción de haber hecho tanto por nada Apenas termina de decir esa frase cuando alguien le pone una mano grande con nudillos muy peludos en su hombro derecho.

- ¿Qué viejo no está aquí? –Reclama un hombre con una voz muy gruesa Need traga un poco de saliva y voltea lenta y suspensivamente cuando ve a Paúl, un hombre enorme, Need apenas le llegaba a la boca del estomago, velludo, con barba de días sin rasurar y una extraña cicatriz en su ojo izquierdo. Supuso que era el porqué traía el uniforme de vigilante. Sí que espantaría a ladrones él sólo.