¿Quien se cree este para meterse conmigo ?
Bastantes problemas tengo para que venga este bueno para nada a joderme la puta existencia.
—¿Que paso guapa, te quedaste sin palabras?
Me levanto de el puesto y me voy del salon, se que es un acto inmaduro de mi parte, pero es mejor evitar una pelea el primer dia de clase y estoy de suerte ya que toco el timbre de cambio de hora.
Encuentro el baño , pero solo hay uno , y ¡es de hombres!
—Que bien este dia se pone cada vez mejor —digo en voz alta porque se que nadie me escucha o eso pensaba yo.
—Pero mira malcriada, que es de mala educación dejar hablando a las personas solas.
Otra vez esa voz grave ¿es que este chico no tiene nada mejor que hacer?
Estoy dispuesta a voltearme y huir cuando este gilipollas se me acerca y me agarra del brazo para voltearme.
—Te estoy hablando a ti estúpida , ¿tus padres no te han enseñado a responder a las personas cuando te hablan?
¿Enserio ? ¿Me viene hablar de valores un chico que roba?
—¿Y tus padres no te enseñaron a no robar imbécil? — respondo tan cabreada que mi voz hace eco por todo el baño?
—Mira bonita, que seas la hijita de el encargado de aqui no significa que puedes venir a hablarme como te da la gana —gruñe mirándome con los ojos entrecerrados.
A la final se gira y está a punto de abrir la puerta pero no lo dejaré ir hasta que yo tenga la última palabra.
—Tu no me das miedo, me das chiste queriendote hacer el grandecito cuando no eres más que un pequeño bebé enojado porque no le resultó hacer su travesura.
Se quedó serio y mirándome como que si me quisiera matar, lo esquivo y me voy de ahi antes de que diga algo más .
A la hora del almuerzo no sabía dónde rayos meterme o ir, de seguro la cafetería a de estar repleta de hombres. Todos aquí me han de odiar, de eso estoy mas que segura. Recojo mi bandeja de mi almuerzo y miro a mi alrededor, puros hombres, muchos de ellos me miran o me ignoran.
Alcanzó a ver una mesa vacía entre la multitud y me siento ahí.
—Hey, chica —dijo alguien llamando mi atención. Me voltee y pude ver a un chico de cabello castaño oscuro sentado en otra mesa, solo—. Yo de ti no me sentaría ahí —me señalo la mesa donde me encontraba.
—¿Que? ¿Por qué?
—Porque esa mesa le pertenece a Wyatt y a su pandilla.
—Me importa una mierda ese tal Wyatt.
—Conste que te advertí.
Lo ignore y seguí con mi almuerzo hasta que senti un jalon que casi me hace caer de la silla.
¿Pero que rayos?
—¡Pero que putas te has creído! —me gire y vi al chico del baño
—¿Tan guapo me vistes que ahora hasta me sigues? —vi al chico que que ignore anteriormente viendome.
—Hasta donde va el ego —susurre. Me gire nuevamente y lo ignore.
Escuche cómo se reía a mis espaldas y senti un jalon mucho más fuerte que el anterior que provocó mi caída, quedando de rodillas ante el . Todo quedó en silencio
—Y ahora hasta te tengo a mis pies —me pega con la punta de sus zapatos en mi mejilla izquierda haciendo que voltee mi cara. Maldito.
Va a repetir el acto anterior pero soy mas rapida que el y le cogo el zapato , lo jalo hacia adelante provocando que caiga de culo. Él gruñe cuando escucha la risa de todos en la cafetería junto con comentarios obscenos.
Me subo encima de él dejándolo sorprendido tanto que agarra mis caderas y me pegó contra él, aprovechó su momento de distracción para pegarle una cachetada en la mejilla derecha, tan fuerte que hace eco en todo el lugar, él me suelta y se soba la mejilla mirándome con una mezcla de confusión, enojo y ¿deseo? , cuando me suelta me levantó y corriendo salgo de ahí dejando a todos sorprendidos.
Corro los más rápido posible, sin rumbo, me doy cuenta que me he perdido.
Muy bien Juddieh.
Hago memoria lo que me acaba de pasar. Y entonces cuando me calmo, preguntas inundan mi cabeza
¿El será Wyatt?
¿El sera quien me robo? Y si es el, ¿cómo puede tener una pandilla si tiene solo un dia aqui? ¿asi de facil ya tiene una reputación?A de haber dado una muy buena impresión para que todos aquí ya le tengan respeto.
—Pero, qué te ha dejado en vergüenza frente a todos — dice alguien a mis espaldas, es una voz que no reconozco.
—¿Quien eres tu? —me doy la vuelta y veo que es el chico que ignore en la cafetería.
El quizás sepa algo de Wyatt o me confirme mis hipótesis.
—Me llamo Thasse, ¿tu debes ser la hija del dueño?
—Si, pero tengo nombre, soy Juddieh —le sonrió amablemente—. Una pregunta ¿el chico de la cafetería era Wyatt?
—Si, el es la cabeza de su pandilla. Desde que estoy aqui todos los hombres le tiene miedo.
—¿tu le tienes miedo? —me burlé.
—Prefiero mantener las peleas alejadas de mí —me devolvió una sonrisa.
—Pero tu no tienes pinta de malo , ¿que has hecho para estar aquí?
Me miró por unos segundos antes de que bajara la mirada y comenzó a contarme.
—Estuve en el momento y en el lugar equivocado.
—¿Como?
—Pensaron que estaba metido en el tráfico de drogas, mi madre se indignó y no quiso pagar mi fianza , y prefirió no creerme .Me imagino que está mejor sin mi .
—¿Hace cuanto que ya estás aquí?
—Dos largos y tortuosos años.
—Tenemos mucho en común, bueno solo con respecto a nuestras madres. Ella prefirió irse con su joven novio y a mi me dejó aquí.
—Parece que nuestros padres no nos quieren — sonrió y ahí fue que me di cuenta que estábamos muy cerca, levanto mi mirada y su mirada choca con la mía, sus ojos eran de un color verde profundo, eran adictivos.
Me separo de él rápidamente , el es lindo pero lo acabo de conocer y no podría besarlo ahora cuando tengo tantas cosas en mi cabeza .
—Creo que son muchos recuerdos por hoy — dice en susurro y da un paso atrás para marcar distancia
— Deberíamos volver — estoy dispuesta a darme la vuelta cuando el me agarra del codo para volverme hacia él y darme un abrazo
—No todo aquí es tan dificil, aveces las cosas se complican pero hay que aprender a levantarnos y no dejar que nadie nos aplaste o haga sentir inferiores —le sonrió.
Nos separamos nuevamente cuando escuchamos pasos cerca
—Los he encontrado —dice una voz rasposa. Me volteo y veo un chico alto pelirrojo. Frunzo el ceño, miró el aparato en su mano, era un comunicador. ¿Nos estaban buscando?
Thasse y yo, nos miramos confundidos y damos la vuelta dispuestos a irnos pero no hay salida.
Tendríamos que pasar al lado del pelirrojo para poder salir.
—Quédate aquí, voy a preguntarle que pasa.
Estoy a punto de decirle que él no puede mandarme como que si fuera un maldito perro , pero las palabras se quedan en mi boca cuando unos pasos interrumpe mis pensamientos.
Me volteo y veo a Wyatt caminando hacia nosotros con enojo.
— ¡Alejate de ella! —grita Wyatt mirando a Thasse.
Y yo solo me quede estática sin hacer ningún movimiento.
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Nothing is enough
Teen FictionNo existe amor en paz. Siempre viene acompañado de agonías, éxtasis, alegrías intensas y tristezas profundas. Cuando el amor no es suficiente entonces ¿Que lo es? Obra registrada en Safe Creative Código de registro: 1702140739992 Portada: @PhoenixB...