Capítulo #14

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Capítulo 14: Confusiones y familia.
-Ya llegamos.
-Nooo, o sea por algo se paró el avión ¿no crees?
-Cállate Fuutie.
-No empiecen acá.
-Pero mamá Fuutie...
-Por favor venimos por su hermano.
-Sí, mamá.
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-Acá es, bajen del auto.
-Wow. ¿Esta es la casa que le compraste a Shaoran madre?
-Fanren es un departamento.
-Ja, bueno sí, vengan pasen. Dejen sus cosas en el piso o en alguna de las demás habitaciones, iremos de inmediato, por cierto Shaoran no sabe que ustedes también vinieron.
-¡¿No lo sabe?!-dijeron las cuatro al unísono.
-Bueno es que quise darle una... sorpresa.-Dijo enfatizando la última palabra.-Algo me dice que mi hijo está bien, aun así no deja de preocuparme... uhm...
-¿Cómo dices mamá?
-Nada, no es nada, instálense, yo haré lo mismo.
-O-ok.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.
SAKURA POV
-Ehm..., espere, espere, sí lo traje.
-Señorita Kinomoto no tengo mucho tiempo.
-¡Acá está!
-Bien, gracias, siguiente...-¿Shaoran estará bien? Sí, sí está bien cálmate, qué bueno que traje el trabajo, juraría que últimamente he estado mucho más despistada, pero bueno... Lo visitaré después de clases. Ajá.
-Li.
-Faltó, profesor.
-¿Faltó?
-Eh... sí-respondí algo desencajada por la pregunta, sí era cierto que no faltaba, ¿pero que me lo diga así? No fue su intención, lo sé, pero ya saben cómo me hace sentir.
-Es extraño, digo, siempre lo he visto en clase, nunca falta y...
-Está en el hospital profesor.-Dije decaída, algunos al parecer se sorprendieron por lo que acababa de mencionar, y bien ¿quieren culparme? Cálmate Sakura, Shaoran dijo que no lo era.
-¿Hospital?-Di un leve suspiro.
-Sí, hospital, por favor no me gustaría hablar mucho del tema.
-... Está bien... Lo siento... Bueno continuando...
Sí de nuevo me sentía mal y lo peor de todo era que no podía dejar de pensar en él, ¿será por eso o es por otra cosa? De nuevo mis dudas, de nuevo mis inquietudes me atacaban, ¿qué pasaba por mi cabeza? ¿A qué punto había llegado a no entenderme ni a mí misma? ¿No puedes pensar eso después? Sigo confundida, sigo sin tener nada claro, ¿estar confundida significaba algo? ¿Ya hay probabilidades de que...? ¡No! Que ni se te ocurra pensar en eso... ¿Por qué? ¿Por qué estaría mal pensar en eso? Porque... porque... No se me ocurría nada, desconfiaba de mí misma nuevamente. Pensar en otra cosa, eso, hazlo; no podía, cuando ya empezaba a razonar sobre todo lo que me sucedía era imposible parar, solo hasta que ya me cansaba de dar tantas vueltas al asunto.
El timbre sonó, ¿en qué momento terminó la clase? Presentía que así no aprobaría ningún curso. Seguía sentada en mi carpeta, miré a mi costado donde se encontraba la ventana, intenté distraerme, fijarme en las nubes, en los pájaros, en cualquier cosa que no implicara nada de lo anterior, pero simplemente no podía, cualquier cosa me lo hacía recordar, sí el tacho donde botó mi prueba, él árbol donde se subió, ja era tan tonto pensar en eso , una voz me sacó de mis cavilaciones:
-Saku... ¡Sakura, te estoy hablando!
-¿Ah...?-Respondí aturdida.-¿Qué hora es?
-Salida, Sakura.
-Ah...-Procesé lo recién dicho-¡Salida!-Grité saliendo de mi ensoñación-¡¿No era hora del receso?! ¡Tengo que ir a ver a Shaoran!-Me levanté lo más rápido posible, cogí mis cosas y antes de atravesar totalmente la puerta en mi apuro, dije:
-¡Adiós!-Salí corriendo, ¿cuánto tiempo había pasado? Sea como sea, ya era tarde, debí de haber salido antes, hasta de eso me olvidaba, salí a la calle, para mi muy afortunada y grata suerte había demasiada gente que me hacía aminorar el paso (todo me tiene que suceder a mí ¿verdad?), doblé en una esquina y seguí corriendo hacia otro paradero, casi al instante pude divisar un taxi, no dude en tomarlo.
-Al hospital y rápido por favor-estaba apurada. ¿Por qué me importaba tanto? No empecemos de nuevo. Saqué mi celular 3:20pm al parecer no me había tardado demasiado, solo 20 minutos, pero ahora eso ya no importaba, seguía pensando, aun si sonase algo ilógico, en si pensar o no en todo lo anterior; intenté llamarlo 2 veces, pero no contestó así que le envié un mensaje de texto, por lo menos así no me sentiría culpable; antes de lo que esperaba llegué al hospital, le di mi paga al taxista y me bajé del auto.
SHAORAN POV
Desperté un a eso de las 9 de la mañana y una enfermera, como todas las mañanas, vino a traerme algo de comida (aunque no me gustaba mucho la comida del hospital, pero la acepto ja, ja), terminé de comer y me puse a ver televisión por un aproximado de dos horas, después de haber pasado un tiempo volvió y recogió mi plato y la taza en la que había tomado, salió de la habitación y no mucho después volvió avisándome que tenía visitas, ¿visitas? Se me hizo extraño, Sakura estaría, junto con Daidouji y Eriol en clases, y mamá, era solo una así que...
-¡Shaoran!-Cuatro chicas estuvieron a punto de asfixiarme.-¿Cómo estás hermanito?-Dijo una de ellas aún abrazada a mí.
-Con... po-co... oxí-geno en l-los pul-mones...-intenté decir.
-¡Lo sentimos!-Se disculparon las cuatro separándose de mí.
-Niñas...-escuché la clara voz de mi madre, miré hacia mi izquierda, ahí estaba ella apoyada sobre el marco de la puerta con una sonrisa en su rostro, se irguió y de paso en paso comenzó a acercarse a mí, se sentó a mi lado, en una caricia pasó una de sus manos por mi rostro y luego de un instante dijo:-¿Cómo ha estado mi pequeño?-Besó mi frente y me abrazó, le correspondí el abrazo y después de un rato se fue separando, me miró a los ojos y volvió a posar su mano en una de mis mejillas.-¿Cómo estás Xiaolang?
-Bien, madre-le sonreí sinceramente
-estoy mucho mejor, gracias.
-No hay por qué, después de todo yo fui quien te abandonó.-Lo último recién dicho lo dijo más bajo y ya sin poder mirarme.
-Ma...-traté de decir, pero me interrumpió:
-Has cambiado ¿no es así?
-¿Cómo?
-Lo digo para bien-volvió a sonreír-¿o me equivoco?-Miró de reojo a mis hermanas, que estaban algo ¿conmovidas? Por la situación.
-No entiendo bien tu pregunta-le confesé.
-No tienes qué, una madre conoce bien a sus propios hijos. Creo que aprendiste.
-¿Qué cosa?
-El valor de la vida.
-¿Eh?
-Veo que lo tienes, pero aún te falta comprenderlo. Hijo mío, ¿quieres regresar a Hong Kong?-La pregunta me cogió desprevenido. ¿Regresar a Hong Kong? ¿Esa sería una buena opción? Hace algunos meses mi respuesta habría sido un sí rotundo, sin dudas ni preguntas, pero ahora... ahora... ¿Qué había cambiado? Ahora no solo pensaba en mí mismo, ahora pensaba en alguien más, alguien quien realmente me importa, ¿podría vivir sin ese alguien? Tal vez sí, pero no sería una vida completamente feliz, la quiero demasiado, no, la amo.
-Yo...-quise dar una respuesta por lo menos algo coherente sin la necesidad de mencionar a nadie más que no fuera yo, pero me resultaba imposible.
-¿O deseas quedarte por un tiempo?-Iba contestar que sí, pero casi de inmediato continuó:-Claro que debes darme una respuesta contundente para volver a dejarte acá, ¿acaso no nos extrañaste?
-No es eso madre, sino...
-¿Sino qué?-¿Por qué no podía decirlo? ¿Vergüenza? No, nada que ver con ese tema; tal vez una pequeña y caprichosa parte de mí aún quería ser el Shaoran de antes, el que no se dejaba manipular por nadie, que pensaba como único requisito en su beneficio propio, sí mamá tenía razón (como siempre), había cambiado.
-Bueno...
-Mamá ¿será que nuestro Xiao está enamorado?-Sentí cómo los colores se me subían al rostro.
-¿Es así?-Preguntó mi madre. ¡Rayos! Fuutie siempre ha sido una fastidiosa, quería matarla en ese instante.-¿Eh?-Insistió. Estaba perdido, igual se lo tendría que decir, pero justo cuando me dispuse a dar mi extraordinaria, inigualable y magnífica confesión tocaron la puerta, ja, ja, qué suerte.
-¿Disculpe? Le traigo su almuerzo.
-Muchas gracias-le dije casi como si con su repentina intromisión hubiera evitado una tragedia.
-¿Ehhh...?-Noté una especie de confusión provocada por mi extraña forma de responderle
-¿De nada?-, respondió dudosa
-con su permiso-dijo retirándose del lugar. Se escuchó el sonar de la puerta al cerrarse y dije:
-Bueno lamentablemente habrá que postergar esta conversación madre, si me permites comeré... eh... ¿qué es esto?
-Es puré con...
-Shh Está bien Shaoran, pero yo sí sé lo que te pasa-me dijo con una sonrisa-. Creo que también iremos a almorzar por un momento, nos vemos amor-Me dio un beso en la mejilla seguido por el de mis hermanas y todas se retiraron.
-Te queremos-Dijeron las cuatro.
-Cuídate Xiaolang-agregó mi madre mientras mis hermanas ya salía, me dio una última sonrisa e igualmente salió.
-Nunca cambian-dije ya solo en la habitación-nunca cambien-añadí. No tenía mucha hambre en realidad, lo más que me interesaba en estos momentos eran esas 5 mujeres que acababan de salir por aquella puerta tan cercana de donde me encontraba, sonreí inconscientemente y di una leve risita que creo nadie habría oído de estar ahí; comencé a comer sin muchas ganas, aunque lo que tal vez sí me provocaba era esa gelatina que me habían dado, ja, ja.
Al terminar de almorzar nuevamente prendí la tele, y me eché a tomar una siesta.
Después de una hora más o menos desperté, no sé cómo se me ocurrió revisar mi celular, ¡tenía 2 llamadas perdidas de Sakura! ¡Sakura! Y yo no tenía saldo, ¡Vaya suerte! Revisé mis mensajes, alto. ¿Qué hora era ya? ¡3:30! Wow, ¿tan rápido?
"Perdón se me hizo algo tarde, ya voy :)" era lo único que decía el mensaje de Saku, pero solo eso bastaba para que una sonrisa se postre en mi rostro. Pronto la puerta se abrió y la verdad esperaba a otra persona.
-Hola.
-Hola Shaoran.
-¿Qué? ¿Vienen a verme en mi desgracia?-Les dije en forma de broma, aunque a Eriol ya lo había visto.
-¡Pero qué dices! Shaoran no te volveré a visitar.
-Mejor para mí-dije volteándome.
-Encima que uno viene a ver a su amigo y ahora ¿así lo tratan a uno?-Preguntó fingiendo estar ofendido.
-Yamazaki ya párala. ¿Tú se lo dijiste Eriol?
-En realidad... es que en clase...-¿Se puso algo nervioso? Achiné mis ojos en forma acusadora.
-¿Sí...?
-Lo que quiere decir es que S...-Eriol le tapó repentinamente la boca.
-¿Es que s...?
-S...-Alguien volvió a abrir la puerta.
-Shaoran...-Me saludó con una de sus bellas sonrisas, lo que me hizo responderle de igual manera.
-Sakura...
-¡Uuuuh!-Molestaron los chicos, Sakura los miró de reojo y se acercó a mí, se puso a mi altura, sin explicación alguna sostuvo mi rostro con sus delicadas manos y me besó. No entendí aquella acción, pero ¿quién en su sano juicio se pondría a pensar en eso mientras es besado por la chica que le gusta? Comencé a cerrar los ojos, que por la impresión aún no había cerrado, estaba rojo, lo sabía, era culpa de ella; sentí de nuevo sus labios, labios que jamás creí que corresponderían a los míos de esa manera, no podía pensar en otra cosa que no fuera ella, amé la sensación que produjo en mí en esos instantes, ¿tendría alguna oportunidad de estar con ella? Se fue separando de mí sin consentimiento mío, pero tendría que dejarla. Me miró a los ojos por un momento, un momento que se me hizo eterno, me perdía en ella...
-Así que en verdad era eso, ¿no es así?-Tragué en seco, ¡rayos! De igual manera tarde o temprano se tendría que enterar.

Continuará...

Sakura Card Captor: Te Amo,Te Odio Un Amor Peculiar y Normal a La VezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora