Marvel One Shots

Clint Barton

Para CataBarton

Necesitaba un café. Con urgencia. Esos eran los pensamientos de Cata desde el momento en el que salió de su departamento. Lamentablemente en la mañana había estado tan apurada por salir que se le olvidó el tan añorado café en la mesa del comedor, y, como si eso no fuera suficiente también olvidó su abrigo en su oficina.
Así que ahora camina con desesperación por las frías calles en busca de una cafetería.

Casi llora de felicidad cuando vio un Starbucks, pero ese momento de felicidad se ve asesinado cuando vio que el cartel que se encontraba en la puerta, tenía la palabra que le causaría pesadillas a cualquier amante del café en tiempo de frío. Cerrado.
Conteniendo las ganas de gritar alguna grosería, decide caminar, con la esperanza de encotrar otra cafetería y no morir de hipotermia.
Después de casi 10 minutos, en los cuales su esperanza se redujo hasta el punto de casi no existir, logró divisar una pequeña cafetería a 2 metros de ella.

Minutos después cuando por fin tenía su café en mano y estaba sentada en una banca, disfrutó el calor que le proporcionaba el vaso mediano de plástico a sus manos , y el primer trago de café la llevó a su pequeño paraíso personal.

Ya saben lo que dicen; nada bueno dura. Y en este caso no pudo ser más acertado.

Al ver la hora se levantó de la banca con pereza y empezó el camino de vuelta a su trabajo, de vez en cuando le daba un pequeño trago a su café.

Pero claro, porque una persona no puede tener más mala suerte ese día, el café de Cata pasó en un segundo de estar en su mano a estar esparcido en el suelo despues de que un hombre chocara con ella. Con inmensa frustración vió a su preciado café caer casi en cámara lenta, y cuando este se estrelló contra el concreto y todo el líquido se esparcia por el suelo, se sintió morir. No le interesó tanto que ella hubiera caído al piso, ni que el tiempo de almuerzo casi se le hubiese acabado. Quería que aquella persona pagará por el café caído.
Las dos palabras perfectas para describir los sentimientos de Cata en ese momento son: Instinto asesino.

-- Lo lamento.-- Él dijo con un aparente culpa, su ceño fruncido y su mano extendida para ayudarla a levantarse. Mano a la cual ignoró y se paró sola.

-- Fíjate por donde caminas, idiota.-- Si, había sido grosera, pero en su defensa él lo fue más. Miró fulminante al guapo ojiazulado, a quien de no estar tan enojada le hubiera mirado por varios minutos como tonta-- Genial, ahora me has dejado sin café.

Cata bufó y sacudió su falda lápiz vino.

-- En serio lo lamento, ¿qué tal si para reponerlo te invito otro?

-- Que sean dos y una galleta.

-- Por cierto. Mi nombre es Clint Barton.

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-- ¡No lo puedo creer! ¡Tiraste mi café como una táctica de ligar!-- Repuso algo indignada Cata.-- Cariño, por tu bien físico te recomiendo que no lo vuelvas a hacer.

-- Oh, por favor. Sé que no fue la mejor idea pero funcionó. Ahora llevamos 3 maravillosos años como esposos, gracias a ello.

Cata se sintió derretir cuando el dijo " maravillosos". Se paró de su asiento para sentarse en el regazo de Clint.

-- Te amo, linda cafetera.-- Le dijo Clint después de besarla, haciendo a Cata sonreír con ternura.

-- Yo también, idiota.-- Lo abrazó lo más fuerte que pudo, escondiendo su cara en el cuello del arquero. Pasaron algunos segundos así hasta que Cata le susurró al oído.-- Cariño, por tu bien físico te recomiendo que no vuelvas a tirar mi café.

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Cata, linda y querida, lamento la espera. Sé que me tardé miles de años en tener tu shot, pero ya aquí esta.
Espero que te guste, aunque no soy muy buena escribiendo romance.

Avalon, cambio y fuera. 🐇