Siempre Estaras En Mi Corazon

capitulo 5

Llegamos a una casa hermosa. Era muy grande cuando la vi quede como 'woooou' era ENORME, tenia un enorme patio, y una piscina en el. Una casa de dos pisos, con balcones y puertas de vidrio, una casa que debio haber costado un millón de dolares.

-enserio vives aquí? No juegues! - dije algo exaltada...

- te gusta?- pregunto sonriendo, saliendo de su auto, haciéndome una seña de 'vamos' para que baje con el.

- es hermoso dylan, yo... Nunca había entrado a una casa así.

- tu primera vez?- dijo riendo

- supongo - me encogi de hombros

Por dentro todo era hermoso, tenia sillones lindos, una vista ala playa, y unas escaleras que me hacían sentir como una princesa.

- te daré algo de ropa- me dijo, interrumpiendo mis pensamientos - hay un baño al fondo, y uno arriba, dime cual prefieres

- el de arriba- dije riendo - así si nos asaltan te atacan primero ati

- buena escusa -dijo- pero preferiría a que me maten a que te hagan algo.

Nuevamente el rubor subió a mis  mejillas, me dio algo de ropa seca, una polera grande, y un pantalón de buso que seguramente era de el. Me indico hacia donde tenía que ir y fui. Cuando salí de la ducha, que por cierto, era enorme, fui a vestirme, pero note que había dejado la ropa abajo. Traté de escuchar algo, tratando de ver si es que dylan estaba allí o se seguía bañando, y así poder iniciar una súper misión secreta corriendo por las escalera en busca de mi ropa sin que el se enterara o me viera solo con una toalla. Hice un enorme esfuerzo por descifrar si el seguía ahí, al parecer no, así que baje cautelosamente, mire para ambos lados como si estuviera cruzando una calle, y en cunclillas fui por mi ropa. Cuando por fin la tuve en mis manos, y pensé que mi misión había concluido con total éxito, me di vuelta y la puerta del baño en la que dylan estaba se abrió, salio con una toalla que sólo le tapaba de la cintura para abajo, me quedo mirando, pensando en si debía darse vuelta o no.

- olvide la ropa- dije finalmente- rompiendo el silencio, para que el dejara de mirarme

- esta bien- dijo sacudiendo la cabeza. Lo mire mejor, su abdomen, era perfecto, y el era sexy, era perfecto, quería acercarme a el y preguntarle si podría tocar sus abdominales, pero pensaría que soy una psicópata.

- yo... Me iré a vestir

- no quieres vestirte en mi cuarto? Esta con aire caliente, no tendrás frío

- claro- asenti, caminando hasta su cuarto, que quedaba en una de las puertas del pasillo en la que el estaba. Cuando pase al lado de el, lo mire mejor aun, y me quede atónita, parada allí escuchando su respiración, me estaba acercando a el, pero se abre la puerta, y la voz de una chica se escucho. Cuando finalmente la vi, ella me miro, se quedo anonadada, al igual que yo

- robert - pregunto confusa la chica...

- maldicion- susurro dylan, y yo aun sin entender.