capitulo dose

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-“Aún no entiendo porque kagome no le ha dicho nada a él idiota de inuyasha” -Pensaba sesshomaru mientras se encontraba recostado en su cama.

-kagome... mi pequeña kagome..- decía su nombre con deseo, -"si no fuera porque mis padres y sango estaban en la misma casa se hubiera encargado de decirle todo al idiota de inuyasha y dejarle en claro que ella habia sido suya primero "-, lo que dijera o hiciera inuyasha lo tenía sin ningun cuidado, solo queria joderlo, aunque el saber que era el, quien ahora tenía el cuerpo de kagome a su antojo, lo asia detestarlo mas, nunca la había olvidado, pero su orgullo nunca le permitió buscarla, ahora que la veía de nuevo un poco más madura, la deseaba,  anelabha hacerla suya.

-"esa mujer..  pero está vez no caeré en sus juegos” penso con molestia.

Había amanecido , sesshomaru no había podido conciliar el sueño y se debía acierta mujer de cabello azabache, escucho ruidos, se levantó de su cama y abrió un poco la puerta, pudo ver a Inuyasha salir de la habitación de kagome y entrar ala propia....,formo puñoz con sus manos y los apreto con tal fuerza que sus nudillos se blanquearon,

- imbécil - cerro la puerta, y se recostó de nuevo en su cama con sus brazos flexionados debajo de su cabeza, tenia que idear la forma de estar con kagome sin que  su hermano lo molestara, almenos ya se había percatado que ella aún sentía deseo por el, ya que había callado lo de anoche.

Despues de un rato se escuchó como los demás se levantaban, me decidí a bajar minutos despues, llevaba solo la parte inferior de mi pijama, baje las escaleras y entre ala cosina

- buenos días hermanito - dijo sango dándome un beso en la mejilla

- buenos dias y los demás?- pregunte

-tu padre y los demás se fueron al pueblo -dijo izayo con amabilidad-desayunaras?-

- después de ducharme- respondi, subi de nuevo por las escaleras camino a mi recamara, pero justo al pasar por la recamara de kagome, una sonrisa se marco en mi rostro, se escuchaba la regadera, deduje que estaba sola, asi es que decidi entrar, cerre la puerta con seguro tras de mi y camine hasta el baño.
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sesshomaru entro al baño y camino asta la ducha, su sonrIsa se agrandó cuando vio su espalda desnuda, ella no se habia percatado de su precencia, sesshomaru se desnudo y se acerco a ella por la espalda, la abrazo y kagome se estremecio

- que gusto encontrarte asi- susurro a su oido, la apego más a su cuerpo cuando ella intento girarse.

-Sesshomaru sueltame... xfavor- musito nerviosa, podia sentir el miembro de sesshomaru pegado a su cuerpo.

-pequeña no te are daño.. -beso su hombro izquierdo y su cuello- solo recordaremos viejos tiempos- musito con con voz ronca

Ella estaba inmóvil, su cuerpo no reaccionaba, tenerlo de esa forma la paralizo - xfavor.. sueltame- suplico, la giro, quería ver su cara, besar sus labios, sonrio cuando la vio sonrojada, nerviosa entre sus brazos, ella tenía sus manos contra el pecho de sesshomaru, tratando de apartarlo, pero su esfuerzo era nulo comparado con el agarre de aquel hombre imponente.

-.. pequeña- murmuro serca de su rostro y despues la beso apasionadamente, con sus brazos ejercia fuerza en su nuca y por su espalda, no desaprovecharia esa oportunidad de poseerla, ella forcejeaba, intentaba quitárselo de encima pero sesshomaru no sedia.

su mente no formulaba una idea coherente, se sentia melancolica, kagome habia intentado olvidar a esa persona que tanto la hirió, que tanto daño le había echo, pero sabía muy en el fondo que nunca lo hizo, si, queria a inuyasha, no tenía duda, pero al ver a sesshomaru otravez, desperto algo en ella que intento ignorar, pero ahora que era besada nuevamente por la primera persona que tanto amo, ya no pudo pelear contra sus sentimientos y le correspondió, lo abrazo por el cuello profundizando su beso, había extrañado tanto a ese hombre, que esto parecía un recuerdo de su mente traicionera, sesshomaru acaricio el cuerpo de kagome, de los muslos la levanto con facilidad, apricionandola entre su cuerpo y la pared del baño, mientras ella rodeaba la cadera masculina con sus largas piernas, los dos soltaron un gemido cuando este movimiento izo que sus intimidades rozaran, sesshomaru decendio sus besos a el cuello de la azabache y llego asta uno de sus pechos, lo lamió y succiono suavemente,

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