prólogo

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El grupo de amigos estaba conformado de todo. Criss era el chico más guapo de todos nosotros, era considerado así por todas las chicas de nuestro grupo o puede que todas las de la escuela. Era alto, cabello lacio, negro y largo, ojos color miel y una sonrisa hermosa. Aunque tenía un problema como todos nosotros, Criss era pansexual.

Nuestro grupo estaba formado por nueve personas incluidas yo, donde la mayoría éramos mujeres, siete para ser exacta y dos chicos, entre ellos Criss. Aveces me preguntaba si las chicas que estaban ahí sólo estaban por él o es que en verdad les agradamos los demás.

Criss era inteligente, muy inteligente, el mejor en su clase y aunque era mayor no le molestaba pasar tiempo con nosotros. Aunque aveces pensaba que estaba tonto al no notar el montón de chicas que suspiraban por él. Pero, como cada uno de nosotros era molestado por algo, él por el simple hecho de que era tan delgado que daba miedo, además de que no notabas si era hombre o mujer a simple vista, así que era blanco de burlas aunque realmente no le molestaba en lo absoluto. Seguía siendo popular.

El siguiente en la lista era Ross, era atractivo. Igual que Criss un par de años más grande a mí. A diferencia de Criss, Ross era atleta y se rumoreaba que tenía citas con miles de chicas del Instituto, obviamente no con ninguna de nosotras. Era el rompecorazones del grupo y aunque Criss lo negaba, siempre pensé que se atraían mutuamente.

La mejor amiga de Criss era Jules, una chica delgada y que era popular por ser bonita, amante de los animales y plantas, una chica que no se metía absolutamente con nadie pero como siempre estaban juntos, digamos que cientos de chicas la odiaban o querían ser su amiga sólo por buscar acercarse a Criss, obviamente esto era inutil.

Emma era otra de nosotras, una chica baja, piel morena, ojos miel y un encanto natural. Su cabello era lo que me llamaba mucho la atención ya que ella al igual que Criss solía teñirlo de colores. Era amable con todo el mundo que le agradaba, pero cuidado con ella si es que le caias mal porque era igual de mala. Ella fue quien me trajo aquí. La mejor amiga de Emma era Susanne, que solíamos llamar Su.

Susanne era muy, muy guapa. Con una figura de envidia y alta. Ojos color gris y muy inteligente.

Katherine a difencia de las demás chicas no se mantenía en un perfil medio, era la chica más popular de la escuela. Sus ojos pardos y su carácter no pasaban desapercibidos por los pasillos, siempre estaba alegre y habladora. Aunque llegue a pensar que Katherine ocupaba el lugar de segunda mejor amiga de Criss esto no era del todo cierto. Era guapa, sí, pero ella al igual que las demás vivía enamorada de él y no trataba de ocultarlo para nada. Era dueña de su propio Blog en Internet donde yo la ayudaba.

Las otras chicas, incluyendome teníamos un perfil bajo. No éramos ni las más listas, ni las más guapas, tampoco destacabamos por tener un cuerpo lleno de curvas o algo en especial. Nuestro grupo constaba de Michelle quien era un año menor a mi, con el cabello corto y castaño. Elizabeth, quien era dos años más joven que yo aunque más alta, su cabello era rizado, negro y la piel clara que hacia juego con sus ojos miel. Y al último yo, Mia, con dieciséis años, piel pálida, cabello rubio, ojos color café. Digamos que lo único que tenía en común con Emma y Criss era que teñia mi cabello de vez en cuando con unos mechones color Rosa.

Para ser parte del grupo no debías tener algo en común con los demás, no, simplemente tenías que ser un rechazado o tener algún problema íntimo que sólo entre nosotros se conocía.

Como nuestro grupo estaba compuesto con todo tipo de chicos, atletas, populares, nerds, normales, etcétera. No solíamos reunirnos en público, es decir, compartía clase con varias de las chicas pero la única que solía hablarme o compartir un par de palabras conmigo era Emma y aveces Katherine cuando necesitaba que le ayudará a repartir volantes. Lo había olvidado, Katherine aparte de tener su propio blog, es presidenta de la organización de alumnos.

Criss también solía hablarme, aunque siempre estaba rodeado de miles de chicas así que era casi imposible que me hablará, simplemente me saludaba con la mano en los pasillos.

Después de las clases, todos los días solíamos reunirnos en la vieja oficina del conserje que se había dejado de ocupar hace varios años, como Katherine era la presidenta tenía las llaves de casi cualquier lugar en la escuela. Así que solíamos vernos todos ahí para platicar de tonterías o aveces simplemente para pasar el rato. Solía ir siempre a las juntas sin falta pero, después de unos meses me di cuenta que no era tan importante como algunos otros, es decir aunque nadie lo decía ni establecía había cierta jerarquía entre nosotros.

En el rango más alto estaba Criss, Jules y Ross. Quienes eran los que hablaban más o hacían las conversaciones más importantes

El segundo rango se componía de Emma, Su y Katherine. Aunque Katherine solía colarse al primer rango de vez en cuando no pertencia a este. Ellas siempre estaban presentes

Y por último, el tercer rango compuesto de Michelle, Elizabeth y yo. Que daba igual si estábamos o no, aunque a diferencia de mí, las otras chicas hablaban y opinaban más que yo. Además simpatizaban más que yo con los demás. Así que como daba igual si estaba o no, rara vez estaba presente.

Hasta ese día, ese día en que todo cambió. Siempre pensé que la llegaba de alguien no puede cambiar nada, que todo esta preescrito ya en el mundo y que si eres de una forma siempre vas a ser así, hasta que ella llegó. Aveces pienso que el negarme a ir a esa Junta de grupo hubiera sido mejor que estar presente y puede que me hubiera ahorrado muchos sentimientos y problemas.

Becca and Mía Donde viven las historias. Descúbrelo ahora