Bad romance { Gerard Way } Terminada

Oscuridad

Había pasado la noche con Odri, Gerard se declaró, la suit presidencial era un cuarto de ratas...estaba confundida a más no poder.

Había huido después de que Gerard me besará, era domingo por la noche y mañana tendría que volver a verle.

Me dormí pensando en todo lo que había pasado ese fin de semana.
La señora canosa vino como de costumbre y me hizo levantar para ir a verle.
No me arreglé, por lo que tenía pelos de loca extrema, me los recogí como buenamente pude en un moño y fui a la consulta.
Allí estaba Gerard, se notaba nervioso y un poco avergonzado.- Buenos días Ane¿ Cómo te encuentras hoy?.- dijo con una tímida sonrisa.
Bien.- Me limité a decir, este suspiró y se sentó frente a mi.- Ane...- No le deje acabar ya que hablé yo primero.- Gerard...¿De verdad solo yo puedo ver a Odri?.- dije triste.
Gerard no respondió.- Yo sentí todo lo que paso esa noche, lo sentí muy bien.- dije algo ruborizada al recordar como las manos y labios de Odri viajaban de una parte a otra de mi cuerpo.
Ane, allí no había nadie...¿Has visto a Odri alguna vez por las mañanas?.- dijo con el ceño fruncido.
Negué.- No...siempre aparece a la puesta de sol casi de noche.- dije mirandole a los ojos.
Esta bien hoy iras a verle, pero yo iré contigo.- Dijo firmemente.
No.- Negué rotundamente.- A Odri no le gusta la gente, solo le gusto yo, solo me quiere ver a mi.
Me importa muy poco lo que piense o quiera.- dijo molesto.- Es más necesito ver que tan parecido es a mi.
Aunque me opuse Gerard insistió. Eran como las siete de la tarde y alli estábamos Gerard y yo en el jardín.
Este estaba escondido tras otros árboles. Yo estaba en el sauce cuando de repente notó una mano huesuda agarrándome de la cintura, era el.

Este me atrajo hacia si hundiendo su rostro en el hueco de mi cuello.- Oh Ane querida...extrañé tu olor.- dijo respirando fuerte.
Me giró y pude ver sus ojos verde olivo como los de Gerard y su pelo grasoso. Tenía ojeras como si no hubiera dormido en años.- Yo también te extrañé.- dije besando sus finos labios.

¿Tuviste problemas el sábado?- Dijo agarrando mis manos.- Bueno...nada grave.- Mentí.- Ayer te fui a buscar...y no estabas ¿Dónde estabas?.- dije tímida.

¿Fuiste a la suit?- dijo confuso.
Si, quería verte...pero no estabas tu suit no existe, es un cuarto de ratas Odri.- dije soltándome de su abrazo.
¿Qué estás diciendo? Tu estuviste alli conmigo.- dijo acercandose a mi.
Si no voy contigo no existe...-dije alzando mi voz.
Odri se quedó triste, torció su sonrisa, yo miré hacia atras pero no pude ver a Gerard.

¿ Crees que solo soy producto de tu imaginación?.- dijo acercándose más a mi.
Yo ya no creo en nada ni en nadie.- suspiré.
¿Crees que si no fuera real podría haberte hecho mía, besarte...crees que si no fuera real podría sangrar?.- dijo al tiempo que recogía una piedra afilada y se hacia un corte.

¿Ves esto? Soy real Ane.- dijo aprentando para cortar el sangrado.
Mis ojos empezaron a llenarse de agua, no quería que Odri sufriera más.- Basta, basta.- dije rompiendo mi bata y poniendole un trozo en su mano para hacer presión.
Lo abracé contra mi pecho, pasando mi mano por su grasoso pelo. Abrí los ojos y vi a Gerard parado frente a nosotros. Este se encontraba perplejo.
Gee...Gerard.- dije asustada vi como su mano también estaba ensangrentada como la de Odri.
Me solté y agarré la mano de Gerard rompiendo otra vez mi bata para hacerle un torniquete.
Odri se dio la vuelta y se encontró cara a cara con Gerard. Eran idénticos.

Gerard me puso tras.- Ane...siento mucho haberte dicho tales cosas.- dijo,con ello entendi que Gerard estaba viendo lo mismo que yo a Odri.

Este torno su rostro oscuro.- Vaya el famoso Gerard.
Vaya el famoso Odri.- dijo Gerard molesto.

No interrumpas mi velada romántica con mi Ane.- dijo enfadado.- Tu Ane?.- rió Gerard.
Si querido hermanito, suelta a Ane ella me prefiere a mi.

Hermanito?.- Dije en voz alta.- Odri tu me dijiste que...

No pude recordar nada mas pues una oscuridad se ciño sobre mi y ya no podía ver ni a Gerard y a Odri.