2."Por los viejos tiempos"

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-¿Eso es todo?-pregunto atonita.
-Se que es corta pero dice mucho de mi, lo importante, al menos.
-¿Que paso en su cumpleaños 16?.
-Bueno...-dije y empece a adentrarme en el pasado, narrandole el climax que fue mi vida.

.......

Mis ojos estaban clavados en Beth que hablaba animadamente con sus amigas al mismo tiempo que veía de cuando en cuando dentro de su casillero, yo me escondía dentro del mío para que ella no notara mi mirada, estaba sumamente concentrado hasta que alguien rompió mi concentración tocando mi hombro una, dos, tres veces, me voltee claramente molesto para encontrarme con una chica alta de lacios cabellos marrones y ojos azules verdosos como un mar debatiéndose entre la paz y la guerra, se notaba algo perdida pero desde su cabello suelto hasta sus botas de cuero negro desprendía alegría e independencia parecia una chica dura, difícil de roer.
-¿Te puedo ayudar en algo?- mi pregunta sonó grosera como si que me tocaran él hombro fuese un pecado capital y no ayudo en nada que pusiese los ojos en blanco
-Necesitó saber donde queda el salón a-b, pero si estas ocupado se lo pido a otro-
-Mm voy al mismo salón, sigueme-dije alejando mi mirada de Beth y encaminándome al aula.
Entramos al aula y él silencio se hizo presente, cuanto odiaba ese tipo de momentos en los que todos te dirigían su atencion.
La profesora Leila la miro con desden como si él hecho de tener que abrir la boca le disgustara y dirigiéndose a su clase dijo esta vez mas animada.
- Ella es Tessa Gordon, su nueva compañera de clases.
Su nombre le dio vida al lugar era un nombre bonito y expresaba la alegría que la muchacha derramaba, alegría que era contrariada por su atuendo al estilo chica mala.

Sus ojos como los ojos de cualquier chica nueva se dirigieron al tarado de Cristo0her que miraba mas allá de la ventana cubierta de gruesas gotas de lluvia, pensando en no se que cosa.

- Hola- Tessa le sonrió a la clase de forma resplandeciente y al escuchar su voz Cristopher se volteo como si hubiese notado su presencia por primera vez, el brillo que se le poso en los ojos hizo que me recorriera un escalofrío por toda la espina dorsal. La nueva le parecía guapa y aquello era como traicionar a Beth ya que ahora son novios.

Aunque al observar desde él rincón en él que aun estaba de pie a toda la clase pude notar que no solo Cristopher sino todos los chicos del salón estaban babiando por la Tessa como si fuese la ultima pecsicola del desierto.
Pasmado con él poco uso de razón de aquellos muchachos que solo pensaban con las hormonas me dirigí a mi pupitre que como siempre era él ultimo de la esquina derecha del salon.
-Solo queda un asiento libre a si que creo que te tendrás que sentarte ahí, con Marcus-un murmullo grupal recorrió él salón y yo me limite a subirme la capucha del suéter con él logo del colegio y encogerme de hombros.
-Bienvenida a nuestra desastrosa escuela-sonrei con malicia antes de continuar-aqui conocerás a las pirañas que tienes como compañeras y a los ineptos sin cerebro que tienes como compañeros-termine de decir cuando ella ya se hallaba a mi lado soltando unas risitas disimuladas.

-¡¡Desde ahora estudiaremos juntos!!- después de decir eso me extiende su mano, en su dedo anular se encontraba un hermoso anillo verde azulado como sus ojos.

Estrecho su mano.

.....

Las semanas que siguieron al primer día de clases fueron tranquilas, con tarea que me he negado a hacer, trabajo que realizar en las tardes y cuentas que ayudar a pagar, exactamente lo mismo que he hecho desde mis 7 años.

Después de casi esperar un mes al fin llego el día en que Beth repartirá las invitaciones para su cumpleaños, siempre las reparte con una semana de anticipación, obviamente no recibiré una pero aún así me arreglo lo mejor que puedo y me encaminó a la escuela.

Llego al salón desierto y me siento en mi pupitre, al cabo de unos minutos el salón ya esta repleto de adolescentes éxitados y ansiosos a la espera de la reina del instituto y sus deseadas invitaciones.

Al cabo de unos minutos llega el esperado momento Beth entra por la puerta y con una cara de felicidad que no cabia en ella fue hasta Tessa y le dio la primera invitacion, la que normalmente llamamos "la invitacion de oro", las caras de todos dentro del salon fueron epicas eso traeria mucho de que hablar.
-Tessa, sería un gusto que vayas a mi fiesta de cumpleaños -la nueva toma la invitacion y la sonrisa de Beth se ensacha-Gracias.
Ella siguio repartiendo las invitaciones por orden primero su novio, sus amigos mas allegados y todas las personas que le agradan mientras todos los demas se iban calmando, yo la segui mirando disimuladamente hasta que llego al puesto que esta justo a mi lado, se voltea y dice:
-Por los viejos tiempos Maclogan-sonrie y me tiende la pequeña tarjeta rosa llena de arabescos en dorado-no faltes.

Despues de tener que aguantar casi todas las clases con las miradas puestas en mi y escuchando los molestos ruidos que hacian mis compañeros al susurrar un poco mas alto de lo normal sobre como Beth me dio una invitacion, al fin llego la hora de salida justo cuando iba a pasar el arco de la entrada de la escuela una mano se poso en mi hombro.

-Marcus, ¿no?- sus ojos verdes me miraban curiosos, a pesar de ser del mismo color los de ella eran mucho mas hermosos que los de Beth-me preguntaba si ya tenias pareja para el cumpleaños de Beth-.

-Dudo que alguien quiera ir conmigo-sonrei con amargura-.

-Bueno a mi me gustaria que fueses conmigo-dijo con voz segura-.

-¿Ir con la protegida de Beth?-.

-No soy su protegida, ni siquiera hemos intercambiado palabra pero igual me gustaria ir y quiero que vayas conmigo.

-Si no hay mas remedio, aunque no soy la mejor pareja, ¿porque no vas Steve? O ¿con Jonh?, ire al punto, no se bailar y tu no me agradas.

El desconcierto se poso en la cara de Tessa que no lo supo disimular, miro a los lados y luego me miro con discresion.

-Tu me agradas y ademas no te he hecho nada para no agradarte, es injusto, asi que para pagar que seas tan cruel iras conmigo, ah y toma-me extendio un pequeño papel que parecia arrancado de una libreta-mi direccion y mi numero, me buscas ese dia a las 5.

Termino de decir y sin dejarme refutar me beso con rapidez la mejilla y desaparecio, sentia un ligero rubor pero preferi descartar esa idea, doblar el papel y guardarlo en mi bolsillo.

-De todas maneras no pretendo ir-dije y segui mi camino.

........

...Por los viejos tiempos...

Esa frase no dejaba de surcar mi mente, era en lo unico que podia pensar mientras arreglaba el motor de el viejo automovil del vecino, un Toyota.

Me levante despues de haber terminado mi trabajo y fui a que me pagasen.

-Listo como nuevo-sonrei.
-Toma, aqui tienes-dijo extendiendo un pequeño fajo de billetes.
-Es mucho, no lo puedo aceptar.
-Llevas 3 años arreglando mi cacharro, aceptalo por favor.
-Muchas gracias señor.

Dije y salí corriendo a la casita de al lado, mi casa.

-Padre, el señor Forgus me ha dado todo un fajo hoy-grite al entrar en la casa.

Mi padre un hombre alto, musculoso y de rostro similar al mio me miro sonriente por encima de sus lentes.

-Bien hecho marcus dejame ver cuanto tienes ahi-tomo el fajo que le ofreci y comenzo a contar-veinte, veintidos, venticinco billetes de alta denominacion-me miro orgulloso- ¿como los usaras?.

-Son para ti padre.

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Y aqui les dejo el segundo cap de Hipofrenia para que puedan seguir mas de cerca la vida de Marcus....xoxo.
Scarlett.

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