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Hasta la raíz. (Lo que nunca te dije)

¿Cómo podría alguien como tú, querer a alguien como yo?

Me duele, me duele físicamente, saber que estas pero no estas... aquí, que yo estoy, pero no estoy allá.

Me gustas. Todo me gustas tú. Tu forma de reir, tu forma de fingir. Eres bueno ignorando, eres bueno aceptando. Yo no lo puedo aceptar, duele disimular que estoy bien así. Te quiero, te quiero muchísimo. Quererte duele, hasta la raíz. Un kilómetro, mil kilómetros, ¿Qué más da nuestra distancia si igualmente nada cambia? Todo es cruel y despiadado cuando se trata de ti, no se si es mi mala suerte o simplemente no se da, pero ya no soy la misma que deseaba regresar.

Tu me quieres yo lo se, pero no estamos igual, mientras yo al leerte sufro a ti obvio te da igual, ¿Por qué te quiero? Ni idea. ¿Desde cuándo? No lo se, sé que ya no dejare que mi mundo este al revés. Lo intentaría, corazón, lo intentaría, porque un amor así es difícil de encontrar, el problema es que eres terco y yo lo soy aún más.

Dejarte ir me duele, me rompe, me vacía, pero se que es por mi bien esto que tengo que hacer, nunca quise a alguien así, esta vez si me perdí. Se que me tienes, y se que te tengo, es tan solo que aceptarlo sería nuestra perdición, tienes sueños, tengo sueños, hay que cumplirlos primero. El problema es que hoy en día creo que podrías ser mi sueño.

Me gustan tus tatuajes. Me gusta tu actitud. Me gusta tu idiotez. Me gusta tu libertad. Yo no sé si sea posible que se crucen los caminos, pero juro que en mis sueños siempre estas al lado mío. Te quiero. Te sueño. Te extraño. Es ilógico que aunque te hable siga extrañándote. Es ilógico que sin verte siga amándote. Es ilógico pensar en un nosotros. Es ilógico y aun asi lo hago. Supongo que soy de las soñadoras, las que no son tu tipo...porque yo soy diferente, muchas veces me lo has dicho.

¿Diferente bien, o diferente mal? ¿Me quieres, o no me quieres? Te agobian las preguntas, pero no lo se evitar, es como si mi cerebro no parara de pensar. Me gusta que me quieras y me encanta yo quererte, el problema fue el momento en que el querer se hizo más fuerte.

Dueles mucho, dueles poco, dueles tanto a ciertos ratos, me congelas, me derrites, me haces sentir asustada. Sabes que el querer no es fácil, mucho menos para mí, es por eso que no explico que te quiero solo a ti. Me calas, me mueves, excavas, y llegas hasta la raíz.