Policías por acá, personas muertas por otro lado, enfermeros con sus ambulancias, no había más que dolor en la gente que estaba e iba llegando ahí. Los cuerpos eran casi imposibles de identificar, algunos ni siquiera tenían todas su partes, heridos, cortados incluso quemados.
"No te rindas, no dejes que el mundo te diga que no puedes hacer algo porque yo sé que puedes, yo creo en ti ángel. Quizás no nos veamos por un tiempo, un largo tiempo pero no olvides que te quiero y que siempre estaré protegiéndote. No tengas miedo de las nuevas cosas que vienen, no pierdas las esperanzas y por favor, no dejes de sonreír y ser tu misma..." Fue un como flash, sus palabras y las imágenes de mi abuelo vinieron a mí como relámpagos mientras estaba tirada en el piso con todo mi cuerpo lleno de sangre. Me levanté como pude pero algo me interrumpió, tenía un pedazo de aleta de avión sobre mi estómago, todo estaba tan mal. "¡AYUDA POR FAVOR!" grité entre sollozos, me dolía todo el jodido cuerpo. Alcanzé a visualizar un policía a unos metros de distancia, "AYUDA, POR AQUI" le grité con mis mayores fuerzas y alcanzó a escucharme.
Han pasado 3 horas desde que pedí ayuda, ahora estoy en un jodido hospital con ganas de morirme. Se suponía que debía estar abrazándolo, oliendo su olor a coco en su camisa, debería estar diciéndole que él es mi salva vidas, es él el único que puede hacerme sonreír en cualquier situación. El que me pego su "me cago en todo, ostras julián, soy socorrista" nunca sentí cosas fuertes con alguien pero él, simplemente él, Guillermo me hace sentir tan feliz, tan segura a pesar de que no sepa quién soy o de donde vengo, siempre quise...
¿Cómo se siente señorita Goméz? -dijo revisando el suero con sangre.
Bien aunque mi suero me duele. ¿Puedo preguntarle algo? -asintó- ¿Samuel Goméz está acá?
Que yo sepa no, pero trataré de buscar información para ti. En un rato viene Sarah, la enfermera, ella cuidará de ti. -dijo cerrando la puerta detrás de él.
Bien. Ahora tendré que aguantarme a una enfermera histérica que solo me tratará mal, venga tío ¿más mala suerte no podré tener? Sé que debo tener esperanzas, poder salir de esto pero no puedo, ni siquiera sé donde estoy, donde esta mi hermano, si mis padres están bien o no. ¿Cómo se supone que tenga fe?
Permisoooo. -golpeó tres toques y se adentro a la habitación, era la enfermera.
Adelante. -le dije apenas mirándola, me sentía tan destrozada que ni ganas de hablar tenía.
¿Por qué esa carita reina? -me miró y se sentó al lado mío con una aguja y suero nuevo.
Solo me siento mal, no es más que eso.
Venga hermosa, ya sanarás, quizás mañana te den el alta. -sonrió, y clavó la aguja.
Que bien. -fue lo único que dije en toda la noche, solo asentía cuando me preguntaba algo y ya.
Todas las cosas que pasaron no dejan de molestar en mi cabeza, ¿qué se supone que tenga que hacer?¿perderme en España con caminantes por las calles?¿ir nadando hasta Argentina? Ni siquiera sé nadar, vaya mierda.
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Como puse en un aviso en mi otra novela Martes, Jueves y Sábados subiré Apocalipsis Willy. En un horario de 20:00 a 22:30 pm, horario de Argentina. Cualquier duda o sugerencia en mi twitter @biebasfvck. Gracias por leer <3.
