You

1.9K 390 88
                                    

Sino fuera por Jimin seguiría bajo esa palmera perdido sin algún rumbo. Tampoco hubiera vuelto a ese lugar donde se encontraban mis falsos amigos y el tipo que ahora besa mis babas.

Me dan asco, los tres.

No le di mucho detalle de cómo y con quién estaba aquí. Si le decía que estaba aquí con Jungkook, él me iba a llevar al lugar en dónde me alojaría con esas mierdas que se hacen llamar amigos solo para verlo aunque haya dicho todo lo que dijo que era.

Cuándo me tratan de "hijo de puta" es en serio. Soy un maldito bastardo desgraciado, al menos soy honesto y lo admito ¿Eso tiene puntos extra, no? Siendo honesto igual llego al cielo.

Jungkook y Jimin hubieran tenido una historia de amor que contar sino hubiera sido por su viejo lindo y sexy amigo que les está relatando. Cuándo antes asistía a la universidad era lo bastante popular como para tener amigos de distintas facultades, primero fui amigo de Jimin y luego de Jungkook. Se me dio por hacer una fiesta e invitarlos a ambos, hubo una chispa entre ellos desde el primer momento.

Pero soy celoso y cuando estábamos los tres juntos el que quedaba sobrando siempre era yo. Le inventé a Jungkook que Jimin tenía una reputación por tratar mal a los chicos con los que salía, tan así que el último terminó con moretones y la nariz rota. Fue gracioso ver a Jungkook llorando por él, lo peor es que ni siquiera habían empezado algo.

-Jimin tiene problemas de alcohol -le dije mientras aguantaba la risa- es mejor que te alejes de él, puede ser muy peligroso.

-pero yo lo quiero -lloraba en mi hombro- no parece ser ese chico que me dices.

-no lo parece pero lo es... aparte recién lo venías conociendo, si quieres yo le digo que se aleje. Esto ha de ser difícil para ti ¿verdad?

Convencer a Jimin fue más difícil, como lo conocía desde antes él sabía lo mentiroso que podía llegar a ser. Tuve que inventar que Jungkook tenía novio y para él solo era una aventura, solo quería celar a su novio.

-quiero escucharlo de sus labios -insistió.

-no te quiere ver más -bufé- no quiere más problemas con su novio por ti, dijo que eras aburrido y que estás bien gordo. Jungkook odia la gente gorda.

Suspiró y se quedó unos minutos allí en silencio. ¿Se lo habrá creído?

-No quiero verlo más... ni a ti, ni a Jungkook -dijo al fin.

-Espera Romeo, ¿Qué tengo que ver yo aquí?

-Ambos son tan mierda que de seguro harán buena dupla de mejores amigos -golpeó mi brazo- cuídate Tae.

No lo veía desde aquel entonces. Ha cambiado bastante. Ya no es el tipo de cabello negro con mejillas regordetas, ahora parecía un Ken anoréxico, pero bueno, el papel no le queda mal.

Me llevó a su hostería. Le dije que no me acordaba en qué lugar se situaba en dónde yo me quedaba, rápidamente se ofreció a que me quedara un rato, luego él me acompañaría a buscar el lugar.

Al parecer había venido con más gente. Vi más mochilas y bolsos tirados por el suelo y el sofá. No quise preguntar porque 1) no me importa y 2) no me incumbe.

-¿Y cómo has estado? -me preguntó mientras me ofrecía un vaso con jugo el cuál acepté de inmediato.

-Como siempre -sonreí- ¿acaso no se nota?

-¿En serio? Cuándo te encontré bajo esa palmera llorando no parecía que has estado "como siempre" o sea, en todo el tiempo que te conocí nunca te vi llorar.

Somebody Else | VhopeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora