Capitulo 5: La charla

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A partir del día que me visitaron los de QuePario, me empecé a sentir muy alegre, mis heridas comenzaron a sanar, y me habían dicho que de seguir así saldría del hospital mas o menos en una semana.

Yo ansiaba salir del hospital para poder marcarle a Reny, porque mi celular ya se había quedado sin pila, así que empecé a hacer planes para cuando saliera del hospital.

"En cuanto salga voy a ir casa, agregare a Reny a mis contactos, le marcare para ver si nos vemos, y como a ella le gusta la música le diré a Pedro que me enseñe la canción que le dije la otra vez... Pedro..."

En ese momento recordé que no había hablado con Pedro, le conteste el mensaje, pero no había visto si me contestó, y no podía revisar porque no tenía pila.

Pasaron unas horas desde la última vez que entró la enfermera al cuarto, por alguna razón no había ningún otro paciente en todo el cuarto, bueno, sin contar una cama a la izquierda de la mía que estaba rodeada con una cortina, yo tenía hambre y decidí usar el botón para llamarla, pero al presionarlo me dio un pequeño toque, iba a ir a afuera a buscar comida, pero me percate de que mi poste donde estaba el suero que tenía conectado estaba atorado en la cama, lo forcé, pero mi intento fue en vano.

-Que pasa chico, quieres salir?- Dijo una voz de chico

Escuche la voz y de inmediato levante la cabeza

-Si, tengo hambre y mi botón para llamar a la enfermera no funciona- Contesté mientras con la vista intentaba encontrar quien me hablaba

-En serio?-cotesto con un tono un poco burlesco
-Si, quiero buscar a la enfermera, pero mi suero esta atascado
-Parece que el destino quiere que estés aquí, no crees?
-Maldito destino, quiere que muera de hambre- conteste intentando ser gracioso y un poco sarcástico
-Jeje tal vez si, tal vez no, solo el destino sabe
-A que te refieres?
-Pues... Tu crees en el destino?

Me senté en la cama y comencé a pensar

-Yo creo que el destino si existe, pero... Porque la pregunta?
-Bueno, yo creo que el destino existe, pero no como todos lo piensan, ya que el destino no esta escrito, el destino se adapta a lo que decidamos
-Que quieres decir?-pregunté
-Si, el destino no te dice lo que vas a hacer, digamos que te da opciones, y cada quien decide que hacer, y a partir de esa decisión te da mas opciones
-Pues puede ser que si
-No solo puede, si no que lo es
-Como?
Mira, por ejemplo tú, llegaste hasta aquí porque fuiste arroyado al salvar a una chica, en ese momento el destino te dio dos opciones, quedarte observando como lo hicieron todos o correr a salvar a la chica

Me quede sorprendido al ver como ese chico sabía del accidente.

-Una vez que llegaste hasta donde estaba ella- continuó- te dio mas opciones, saltar para empujarla y salvarte a ti también o empujarla fuera del peligro y ser arroyado
-Como sabes todo eso, acaso leíste mi hoja de informe?- pregunté muy sorprendido
-Decidiste salvarla aunque pusiste tu propia vida en peligro- respondió ignorando mi pregunta
-Dime como es que sabes eso!- Dije con un tono mas alto
-Esa decisión y muchas otras te hicieron llegar aquí y hablar conmigo
-Quien eres!?- abrí la cortina que cubría su cama

Me quede perplejo al ver un hombre que estaba muy herido, tenia una gran cantidad de golpes, los dos brazos enyesados y había un bulto a la altura de su rodilla derecha.

-Soy la persona que manejaba el auto que te arroyo, yo vi todo ya que fui el causante

Me quede congelado al escuchar esas palabras, un trago de saliva paso por mi garganta, comencé a sudar frío, y se me hacía un hoyo en el estomago

-Estas pálido, deberías sentarte

Acepte y en seguida me senté, intentaba calmar mi respiración

-Estas bien?- preguntó
-Que si estoy bien?, estoy hablando con el hombre que me arroyó y que casi arroya a la chica que mas quiero, obvio que no estoy bien- dije enfadado
-Te entiendo
-No, no me entiendes!- interrumpí
-Si, te entiendo mas de lo que crees

Me quede callado

-Recuerdas lo que estaba diciéndote hace un momento de las decisiones?

Continúe sin responder

-Yo fui testigo de que es real, y mas importante de lo que creemos, yo nunca tomaba en serio las decisiones, tenía dos amigos, Jorge y Manuel, uno en realidad era mi amigo, el otro solo lo aparentaba, un día ellos y yo decidimos buscar una forma de conseguir dinero, pensamos en generar una pequeña empresa, pero no lográbamos ganar mucho, un día Jorge nos propuso intentar robar un banco, en ese momento yo necesitaba dinero, mi esposa estaba embarazada, así que acepté, Manuel me intento convencer que no lo hiciera, pero yo no lo escuche. Jorge y yo organizamos lo que en aquel momento pareció un buen plan, consiguió lo necesario y fuimos al banco, al llegar a un pequeño banco entramos, Jorge empujó al policía fuera, cerro las puertas y sacamos las armas para comenzar el atraco, entramos hasta donde estaban los que atendían, en ese momento unos de los empleados se lanzó sobre mi y forcejeo conmigo, el arma se disparó e hirió al empleado, el cual después de unas horas murió, Jorge huyó, me dejo ahí, corrí antes de que los policías llegaran, logre llegar a casa y tome una maleta, mi esposa se asustó al verme llegar tan estresado, me   preguntaba que pasaba, yo no le contestaba, lo único que quería era huir, al intentar sacar mi ropa algo se atasco, mi esposa se paró detrás de mi, me resbale y golpeé su vientre, empezó a sangrar, la tome, la subí al auto y fui muy rápido al hospital, después de unas horas estando internada mi esposa se me acerco un doctor para decirme que el bebe había muerto, salí y fui a un bar donde bebí demasiado, vi entrar a unos policías que me reconocieron, salí, subí a mi auto y aceleré al máximo para huir, unas calles mas adelante te arroye, después choque con un poste que hizo que un fierro atravesara mi rodilla, perdí la pierna, fui traído aquí, y ahora estoy platicando contigo, y solo quiero pedirte una disculpa, y te quiero decir que por favor, tu eres joven, cuida muy bien lo que decides, yo por una mala decisión lo perdí todo, mi hijo, mi amigo, mi dinero, mi salud y en cuanto salga de aquí iré a prisión por el resto de mi vida.

Quise hablar, pero tenía un nudo en la garganta, no pude evitar soltar un llanto que tenia un poco de lastima y otro poco de coraje.

Entró la enfermera

-Veo que  se conocieron- dijo mientras hacia revisión de las maquinas que tenia conectadas el hombre

De nuevo no pude hablar

-Ya veo- dijo la enfermera

Un silencio incómodo llenó la habitación

-Es hora de que lo llevé a su revisión- le dijo la enfermera al hombre
-De acuerdo

La enfermera ayudo al hombre a sentarse en una silla de ruedas, y comenzaron a salir de la habitación

-Recuerda- dijo el hombre mientras salian- cada decisión puede ser vital

-Por cierto, mañana se te retirará el yeso y seras dado de alta- dijo la enfermera antes de salir

Me quede solo en la habitación...

Una Historia Con RenyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora