Reason

227 37 22
                                    

Después de que derrotaran al Imperio Galra los paladines volvieron a la Tierra, Allura y Coran les habían dado ese "pequeño descanso" dado que habían pasado demasiado tiempo fuera de casa y los extraterrestres volverían igualmente a su planeta de origen.

Hunk y Lance habían comenzado a salir, era un poco peculiar porque el latino siempre había expresado su gusto por las féminas (de cualquier planeta) pero al mismo tiempo su latente homosexualidad.

Hunk no supo en que momento fue arrastrado por esos mismos sentimientos y tampoco es que lo haya pensado mucho, solo se dejo llevar.

Casi un año pasó y habían tenido pequeñas misiones de rescate, el volver al espacio les hacía sentirse útiles nuevamente(o eso decían Lance y Pidge); una noche antes de la última misión encargada había ocurrido algo casi inexplicable para el moreno de la cinta en la cabeza.

Como todos, habían tenido discusiones y problemas, como cualquier otra pareja pero eso no era de un solo momento, se remontaba a que Lance llevaba semanas comportandose extraño con su novio, era como si algo no estuviera bien y ninguno de los dos hacía algo para remediarlo. Hunk no sabía exactamente que podría ser. Usualmente el compañero del León Azul era efusivo, meloso, consentidor e incluso un poco molesto para el otro y los que les rodeaban, esta vez era todo lo contrario.

Cada vez salían menos, los mensajes de texto y llamadas disminuían notablemente, la disposición para verse, por parte de Lance, era casi nula. El moreno alto no quería pensar de más, era inteligente y por eso mismo sabía que su mente recrearía cualquier clase de escenario, todas las posibilidades que podrían dar pie al comportamiento de su pareja, ninguna debía ser descartada.

"Está engañandote" fue un pensamiento fugaz pero tan claro que quedó todo el día en su mente.

De nuevo, la posibilidad no podía ser descartada, ninguna podía. Día tras día pensando en que hacer, preguntarle directamente, investigarlo, esperar a que sólo pasara lo inevitable...

Y entonces volvía a aquella noche anterior, habían quedado dormir juntos y Hunk por fin se tranquilizó un poco, pensó en que tal vez era una de esas "fases" que le daban al otro y que por fin todo se restablecería.

Normalmente Lance llenaba de besos a Hunk antes de dormir, le decía miles de cosas que harían, que confiara en él y que tal vez algún día sería la cabeza de Voltron, Hunk reía y de nuevo se besaban pero nada de eso pasó. Un simple "Buenas Noches..." antes de que la luz de la lámpara se apagaara fue todo lo que recibió.

Se quedó helado, algo definitivamente no estaba bien y su inseguridad no le ayudaba mucho. Un cúmulo de emociones llenó su pecho, le dio la espalda y dejó salir algunas lágrimas que enseguida fueron cesadas gracias al sueño. Se sentía patético, tal vez había sido mala idea "seguirle el juego" a Lance.

Arrepentirse era algo que jamás haría, después de todo era su mejor amigo pero como tal también necesitaba que le dijera qué era lo que sucedía con ellos, con su relación.

De nuevo su mente no ayudó, tuvo pesadillas, una tras otra y peor que la anterior; mientras era parte de las jugadas de su mente pudo escuchar a lo lejos lo que parecía ser un sonido de un auto, la alarma contra robo. Poco a poco despertó pero no abrió los ojos ni se movió, sintió como algo cálido se posaba sobre sus labios y su mejilla.

"Así debe ser..." escuchó mientras la sensación en su rostro se iba, sintió como Lance dejaba la cama, escuchó como se vistió y salió de la habitación. Dejó que pasaran algunos minutos y comenzó a llorar como nunca, aquel beso y el toque en su mejilla habían sido diferentes, le habían transmitido todo lo que Lance en verdad quería decir.

Durante la misión el latino estuvo distante y Hunk sólo como si no supiera nada de lo que había pasado, todo salió bien excepto para el moreno más alto puesto que en el hangar vio como Lance besaba a Keith y este le correspondía.

Despues de todo, aquel día Lance si le había dado el beso del final.

InseguridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora