The Moon Cries

🌙El fantasma de una sonrisa🌙 (Tanabata parte 2)

- ¡Siguen siendo personas! ¡Aun no estan enfermas! ¡Ellas...- Gritaba Shin hasta que Liu puso una mano sobre su cuello, haciendo que se quedara perplejo ante aquella accion, ¿Que deberia de hacer?

- Escuchame bien Luo, podras ser para ellos un heroe y un principe, pero para mi, eres solo mi perro- apreto su mano haciendo que Shin se ahogara un poco - Incluso podria matarte ahora mismo, tengo todo el control de tu vida, no olvides quien te encontro en esas ruinas arrastrandote, ¿Ya olvidaste quien te dio la espada por la que te llaman "Heroe"? Eres un maldito principe sin corona... pero eso queda entre nos, ¿Verdad? - apreto un poco mas, esta vez incluso lo habia levantado del suelo quedando algunos centimetros arriba y intentando inutilmente de safarse de aquel mortifero agarre que le estaba asfixiando demaciado. Tenia que hacer algo, lo que sea... pero
¿Porque tenia miedo?

- ¿¡Verdad!? -Exclamo Liu

- S... ¡Si! - articulo Shin provocando que Liu lo soltara dejandolo caer en el piso, a duras penas tomaba grandes bocanadas de aire para recuperarse a si mismo, Liu se dio media vuelta y recogio las piezas del ajedrez que habian caido, pero solo las suficientes para colocarlas de manera especifica.

La torre en el centro, peones rodeandola, dos alfiles negros y uno blanco en un extremo y por ultimo...

La reina acompañada de aquellos alfiles.

- Les perdonare la vida esta vez con una condicion - dijo Liu acercandose a Shin que aun estaba en el piso, incandose para poner un dedo en los labios de el pelimorado, dibujando su contorno, acariciandolos suavemente - Vas a desacerte de Kenji Sora, mañana mismo - me exalte - De otra manera, incluso mas inocentes que no estan en cuarentena van a ser carnada para vampiros... la decision esta en tus manos, Wo qin ai de Shin - dicho esto dio un suave beso en aquellos labios y se levanto, Shin intento levantarse tratando de equilibrarse con su espada como baston pero por lo visto estaba mas debil de lo normal.

- Ya vete, es tu cumpleaños despues de todo - dijo Liu sarcasticamente

Recordatorio, golpear a ese maldito algun dia

Shin se dirijio a la puerta recuperando la compostura, caminando ya sin la espada como soporte, salio, y yo me escondi detras de un matorral, era muy estupido porque era obvio que me veia, pero no, simplemente el paso de largo de mi. Que extraño.

Asi que corri a alcanzarlo hasta llegar con el, pero..

Paso lo de siempre.

Antes de que pudiera llegar y abrazarlo como era mi intension, el me apunto con su espada casi como si fuera uno de sus reflejos naturales.

- ¡ahh! Tr... ¡tranquilo! Soy yo - dije a lo que el dudo en bajar la espada, aun diciendole aquello.

Aunque al final la bajo y enfundo, no se veia feliz como siempre, era obvio, sin decir una palabra se dio media vuelta y siguio caminando hacia su dormitorio, ignorandome.

Talvez Liu te jodio el dia, pero yo no

Camine mas hasta quedar a su lado, y tome su mano el se detuvo, pero no para mirarme.

- Sueltame - susurro

- Ni loco, tu y yo, vamos a ver las estrellas - asi que lo lleve, apesar de sus reclamos, y de sus "es una orden" directo a donde las luces que grace y yo hicimos, parecian faros en la obscuridad.

Aunque apesar de estar frente a ellos Shin no reacciono. Solo abrio mucho los ojos una vez que estuvimos muy cerca.

Las risas de los niños, las sonrisas de los mayores... aquello parecia utopico en medio de un mundo en guerra, destruido con sangre inocente derramada.