Cap. 10

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- Nova... - escuchaba que me llamaban pero no veía nada o a nadie.

- ¿Hola? ¿Dónde estás? - pregunté pero esos susurros seguían.

- ...No hay mucho tiempo... - ¿Tiempo? - ...Tú puedes salvar a Equestria... -

- ¿Salvarla? ¿De qué? - estaba bastante confundida.

- De quién, querrás decir - de la nada apareció una luz.

Me fui acercando hasta que pude ver un poco borrosa la imagen de mis padres junto a mí pero una sombra arrastró la imagen y la convirtió en algo que no puedo explicar de lo fuerte que es.

- Si no haces algo...¡Todos morirán por tu culpa! - la voz se volvió a una más macabra que me dejó inmóvil al momento de escucharla junto a mi oído.

- ¡No! - me levanté de golpe en la habitación del hospital.

Me toqué la cabeza con una mano. ¿Todo había sido un sueño? Parecía tan real que hasta mi corazón latía a mil. Miré a los lados y mi papá seguía durmiendo. Saqué mi celular de la mochila y miré la hora.

Dos de la mañana.

Suspiré y me tiré de nuevo al sillón. Van tres días que no duermo bien por esas pesadillas. ¿Qué querrán decirme?
Lo bueno es que tendré tiempo de averiguarlo cuando mi padre salga del hospital. Tardé un rato pero pude volver a cerrar mis ojos para dormir.

(...)

- ¡Nova! - escuché a una voz chillona gritar y un peso extra en mi vientre a lo cual me desperté de nuevo.

Era Sprinkles.

- ¡Mira lo que me compraron! - me gritó ahora Tanzanite mostrándome un juguete que apenas podía ver por el cansancio.

- ¡A mí también! - exclamó AppleBuck.

- ¡Pero el mío es el mejor! - ahora me aplastaba Rainboom.

- ¿Crees que el mío es lindo? - la pequeña Snowflake apareció detrás de Tanzanite.

- ¡Agh! - me quejé tapándome la cara con la almohada.

- ¡Niños! ¡No deben estar aquí, salgan! - esa era Charity y los escuché obedecer - ¿Nova? A tu papá lo llevaron a revisión para darlo de alta...¿Estás bien? -

Me fui quitando la almohada y mi figura dejó sorprendida a las gemelas.

- ¡Pero querida! ¿De nuevo esos sueños? - obviamente dejé preocupada a Clarity.

- Sí...sólo quiero saber que quieren decir y que me dejen en paz - tomé la almohada y hundí mi cara en ella.

- No te preocupes, todos te ayudaremos...pero debes decirnos de que tratan - insistió Charity.

- Es que...es muy...horrible... - dudé - ...¡Ok, está bien! Eso creo - me miraron con aprobación.

(...)

Se los conté y al final me ayudaron pensando que tal vez tratara de seguir viendo lo que hay para ver si cambia o que trate de ver a la dueña de la voz.

Yo simplemente asentí y cuando se fueron, me cambié. Me puse un par de shorts, tenis y una blusa de tirantes de color gris que decía "The Beatles".

Flashlight: War Zone // Book 2 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora