Todas las noches miraba por la ventana. Pensaba que volvería a verlo. Ya me dijeron que no existía, que lo olvidara. Me dijeron que estaba loca. Me dijeron tantas cosas... Me dijeron tantas mentiras... me dijeron que cuando creciera me sentiría mejor. Que lo superaría. Me dijeron que ellos siguen en mi corazón. Me prometieron que no se iría pero, como todo, era mentira. A veces sigo pensando en él. También pienso en ellos. Me acerco a los barrotes y miro fuera. Miro la estrella de donde venía y a donde fueron ellos. Ahora solo me queda eso. Eso y pintar las paredes de rojo. Me siento en la cama. Contemplo mi obra. Es él. Y ellos también están, a su lado. Y estoy yo de pequeña. Me abrazan y sonrío. Inconscientemente lloro. No se cuando llevo así. Llegan los guardas a traerme la comida que nunca pruebo. Me levanto y en un momento estan tirados en el suelo, adornando mi obra, teñida de otros rojos. Corro y subo, y sigo corriendo. Llego arriba. Me asomo a la barandilla. Miro hacia atrás una vez. Cierro los ojos. "Con fey polvo de hadas podrás volar" lo oigo decir. Sonrío y salto. Por fin descansaré. Iré con él y con ellos. Ya no habrá más mentiras ni nadie que dude de mi cordura. Estaré en la estrella, hasta pronto.
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Relatos cortos o Cuentos breves
FantasyAquí escribiré pequeñas historias que se me vayan ocurriendo. Serán sobre cualquier cosa según me venga la inspiración. Espero que os guste.