Se busca novia para papá

01.- El deseo de Rin

Rin se sonrió una vez más al espejo luego de volverse a su padre. A sus cuatro años Rin era una niña muy divertida y sobre todo tenía algo en mente, quería una novia para su papá. Su papá siempre le había contado sobre su madre, como ellas eran tan iguales y como murió poco después de que ella naciera. No es que ella echara de menos a una madre, pero había oido a su tío Inuyasha hablar con las abuelas Izayoi e Irasue que Sesshomaru echaba de menos tener una mujer a su lado...

Y ella estaba decidida.

Aquellas Navidades había ido al centro comercial con el tio Inuyasha, y había pedido a Santa una novia para su papá. Ella le repitió a Santa por varias veces que quería una novia para papá y parece que Santa pensó que su tío era su papá. El día después de Navidad Inuyasha presentó a su familia a la chica con la que llevaba tiempo saliendo, Kikyo.

Rin habia decidido que su siguiente paso tenía que ser San Valentín. Pero para eso quedaban muchos días aún por lo que luego de que su padre la peinara, vistiera y diera de desayunar dió gracias por tomar camino del colegio. Después de las vacaciones de Navidad solo quería ver a sus amigos, tal vez Kohaku o Shippou tuvieran una idea. Rin tomó su mochila y miró arriba a los ojos dorados y la hermosa cabellera platino de su padre, Sesshomaru además de ser un buen padre era un hombre extraordinariamente guapo. Su papá le contaba cuentos todas las noches, dormía con ella cuando había tormenta y encima le hacía cosas ricas para cenar... Era un buen "portido" había oido decir a su profesora, la señorita Kagura. Ella le caía bien pero lo cierto es que cuando veía a su papá la señorita parecía distinta, se pegaba a su papá olvidándose de ella y eso no le gustaba.

Cuando bajó del coche tomó la mano de Sesshomaru y este se quedó mirándola fijamente, su hija estaba demasiado rara. Se agachó y miró su cara colocandole con mimo la bufanda que llevaba puesta, con los personajes de Miraculous Ladybug bordados a todo lo largo.

- ¿Te pasa algo Rin?

- No papá... de verdad – Sesshomaru suspiró levemente y miró su reloj, tenía tiempo para llevarla dentro del colegio, su padre y hermano no le dirían nada y más cuando era algo por Rin.

Alzó a la pequeña y la colocó sobre sus hombros haciendo reír a ésta mientras caminaban dentro del recinto escolar. Varias madres no evitaron parar a mirar a aquel hombre y otras tantas suspiraron. Si ya ver un hombre como aquel solo levantaba pasiones, verlo aún ejerciendo de padre amoroso y atento con su hija era aún más.

Llegaron a la puerta de la clase de preescolar donde una chica morena estaba de espaldas a ellos, la niña se volvió a ella y la chica, aún a espaldas de Sesshomaru, se bajó a su altura posando una mano en la cabeza de la pequeña Rin.

- Hola

- Hola pequeña, ¿cuál es tu nombre?

- Rin Taisho, señorita.

- Oh vaya, eres alumna mía -comentó la chica con cariño a la menor quien sonrió ampliamente cuando la mayor tomó su mano para entrar dentro del aula. La pequeña miró a un lado sonriéndole a su padre.

- ¡¡Hasta después papá!!

La chica se volteó y quedó boquiabierta al verle. Sesshomaru igual se quedó estático. Él conocía a aquella chica y lo sabía, podría tener apenas dos o tres años menos; la edad de Inuyasha. Intentó hacer memoria hasta que un flash le vino a la mente; el día que se comprometió con Aileene ella estaba allí. Era del curso de su hermano, del mismo año de echo la había visto alguna que otra vez en su casa ayudando a su hermano con alguna cosa de la universidad.

- ¿Higurashi?

- Si - sonrió ella, algo apenada –Por el apellido de la pequeña debí descubrirlo... ¿qué tal,Sesshomaru?

Se había quedado sin habla,totalmente.

Y Rin, mirando alternativamente a ambos, supo por donde podría comenzar su plan.