Max

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Cap.2

28 Agosto del 2013

Hoy era mi primer día de en la universidad al fin había salido de la preparatoria era un infierno y creo que también lo seria la universidad, en fin, era el primer día me vestí como siempre mi pantalón de mezclilla azul preferido, mi camisa azul y mis converse azules, no parecía un ñoño y tampoco querría aparentar serlo , ya tenia suficiente con que me dijeran matado, marica, homo y mas personas ignorantes que no valían la pena en la preparatoria, tampoco es que me importara mucho, sacaba las mejores calificaciones, terminaba antes que todos, claro, era el favorito de uno que otro profesor en la escuela y eso era lo mejor "el consentido" por decirlo de alguna manera, cuando me dijeron que nos mudariamos para estar cerca de la universidad era la mejor noticia que me habían dado, estaría cerca que la universidad, conocía a 2 chicas y a mi hermano de internet que vivían a unas casas de donde viviríamos, agregando que eran de lo mejor, por así decirlo mis mejores amigos, que no me tachaban por ser matado al contrario me aceptaban tal y como era, cierto mis mejores amigas se llaman:
•Maryan 
•Yuliza

Y mi mejor amigo, mi hermano del alma y de otra madre:
• Alexi
Todos ellos me apoyaban en todo cuando mis padres no lo hacían o simplemente estaban muy ocupados con mis hermanos, no es que no me quisieran yo era lo suficientemente grande como para estar a mi cuenta. El primer día Alexi paso por mi, ya que aun no conocía bien la cuidad como para irme en mi Ferrari a la universidad. No, no tranquilos no es cierto, era un carro común para un chico normal. Cuando llegamos el me dejo en la entrada y camino a su clase ya que teníamos diferente horario pero nos apasionaba la literatura eso era lo que nos mantenía unidos nos gustaban las mismas cosas eramos como gemelos aunque claro, no con el mismo parecido, algunos nos tachaban por "maricas" o homosexuales solo por que nos gustaba la literatura, ser sensibles y por que eramos demasiado unidos, a mi no me molestaba, pero lo que si me molestaba eran ellos, lo homofóbicos que eran mis compañeros, eran demasiado tiplosos¹ pero que esperabas de personas que han estado en escuelas privadas toda su vida. No me digan que ustedes creían que yo siempre estuve estudiando en escuelas privadas, no, se equivocan, si estuve en algunas fueron por mis becas, tampoco era que mis padres no pudieran pagarlas, pero preferían que aprendiera a convivir con cualquier tipo de persona, no, no estoy etiquetando me refiero a distinguir entre un tipo de persona como mis compañeros de la preparatoria privada y los de la preparatoria publica, ambas tienen sus defectos pero yo estaba bien en cualquier lugar, donde pudiera conocer personas de mi edad y convivir mejor, como me gustaba. Caminaba por el pasillo algunos me volteaban a ver, y yo a ellos, aunque me arrepiento y a la vez lo agradezco, ya que había chocado con una chica de pelo castaño con ojos de un color esmeralda, era hermosa, tanto que pensé que era un ángel como cuando alguien te golpea la cabeza tan fuerte, para convencerte que estas en las puertas de el cielo y te recibió un ángel. Trate de ayudarla con sus cosas pero antes de darme cuenta ella ya había terminado de recogerlas, me quede plasmado en su hermosura, no podía dejar de mirarla, esa chica de test blanca me tenia totalmente perdido, creo, que, nos quedamos mirando unos 15 segundos antes que tocara la campana y avisara que teníamos que entrar a los salones, adquirí un tono rojo, lo sabia por que sentía como la sangre recorría mis mejillas, trate de no perderle la vista pero creó que ya me había avergonzado demasiado, al no ayudarla, y ni siquiera en pedirle una disculpa por ser tan distraído, si Yuliza estuviera aquí me daría un zape, preguntándome, por que lo hacia, que no debía de verla, si no ayudarla, para luego mandarme tras ella y pedirle su numero siquiera, Maryan me hubiera dado un consejo, para dejar a Yuliza después, obligándome a actuar ante la situación y Alexi la hubiera detenido para echarme de cabeza y decirle:
—Aquel chico que ves ahí esta loco y embobado por ti, dice que eres hermosa—lose por que eso hacían en la preparatoria, cuando llegaban de visita. Pero cuando llegue a mi clase, la sangre fue disminuyendo de mi cara, a la siguiente clase también estaba ahí, y a la siguiente, hasta percatarme que teníamos el mismo horario, a la 4 hora me tope con Alexi que al verme voltear al frente como perro persiguiendo a una ardilla me dijo: 
—Max—al ver que no respondía siguió—Max, ¡Hey!, Maximus, ¡Maximiliano!
—¿Mande?—desperté de el trance que causaba en mi, la sonrisa de aquella chica tan hermosa.
—¿Que te pasa he?—dijo ya que mi forma de actuar no era tan normal.
—Nada ¿por qué lo dices?— pregunte aun mirando a Estefany si esa chica, de piel blanca, cabellera castaña y unos ojos parecidos a esmeraldas se llamaba Estefany casi babeo  cuando paso al frente a presentarse, agregando claro esta que se veía tan preciosa. Sin darme cuenta él siguió mi mirada y sonrió como si hubiera ganado un premio.
—Ya entendí— dijo mirándome y moviendo la cabeza para verla a ella.
—¿Entender, que ?—pregunté, sabía a que se refería pero preferí no darme cuenta por decirlo de alguna forma.
—Que te gusta Fany, ¿no?— dijo mirándome.
—Es Estefany y no es una chica interesante— dije corrigiéndolo con un ligero tono desinteresado para que no me echara de cabeza.
—Como si no te conociera— sonrió tratando de no reírse de mi cara.
—Y que, es una chica normal y ya no tiene nada de interesante hablar del tema—dije y sentía como la sangre subía a mi cara, era lindo pero en ciertos momentos, no ahora que estaría por delatarme.
—Siempre es interesante hablar de mi futura cuñada, y mas cuando la mención de la misma hace que mi hermano se sonroje en segundos— dijo pero esta vez si se burló, a un grado en el que llamo la atención de el profesor.
—Joven Alexi puede leerme lo que ha escrito— ordenó mirándolo con una cara seria.
—Por supuesto que si profesor— dijo felizmente. Alexi era muy orgulloso y sobre todo era muy feliz o demasiado, siempre nos hace reír.
—Preparado profesor que esto se merece un premio— sonrió para luego empezar—
"Cuando todos se van"
"He estado solo, todos se han ido y me han dicho lo que a ellos les dijeron antes de abandonarlos, y que fue lo que me dijeron se preguntaran, me dijeron: Deja atrás lo que te ata y se libre no te quedes en un solo lugar, si lo haces, seras normal, en ese momento entendí que me abandonaban por su felicidad no por que, me odiaran si no por que preferían hacer lo que no pudieron y eso era deshacerse de las cadenas que los ataban a la normalidad en la tierra de los cuerdos que solo daban miedo, cuándo los locos eran la felicidad malvada de cada humano que no pudo encajar en la normalidad que el ser humano le hacia pagar" 
El profesor estaba sorprendido y a la vez enojado, pero, lo único que dijo fue —Esta bien, señor Alexi tome su lugar y guarde silencio para que sus compañeros puedan terminar—.
No me sorprendía Alexi siempre adelantaba la tarea, si no era eso las inventaba, así de rápido, como lo hizo hace un momento, tenia una inspiración que envidiaba ya que la mía llegaba cuando quería, Sin embargo cuando me choque con Estefany fue diferente llego a mi algo tan nose, parecido a una inspiración increíble por eso hice un trabajo parecido a el de Alexi pero el mejor fue el de Estefany y como no serlo si era, lista como preciosa, perfecta para mi, para mi perfección era ser original claro con un poco de pasión a la literatura, lo que era ella.
Cuando terminaron las clases decidí irme caminando, tampoco estaba tan lejos la universidad, de mi casa. Cuando me di cuenta que Estefany iba caminando a unos metros de mi trate de alejarme para que no se diera cuenta y se hiciera la idea de que la estaba siguiendo, cosa que no quería, se imaginan estar siguiendo a la persona que te gusta, cuando en realidad solo vas camino a tu nueva casa. Y fue ahí, en ese momento, ella pasaba la calle, las hojas de los arboles  cayeron, por alguna sonrió de la nada, casi dejaba que se me saliera la baba al verla cruzar la calle con esa sonrisa, y con esa sonrisa llego una inspiración enorme a mi, tenia que escribir, escribir sobre Estefany, sobre lo que me hacia sentir al sonreír, sobre lo linda que se veía en ese momento con un pantalón de mezclilla negro, su camisa negra con cuadros rojos y los tenis negros, altos que tenia puestos. Al llegar a casa con cara de cabrito a punto de morir me recargue sobre la puerta con mi mochila en manos decidí seguirla observando, hasta que cerro la puerta, parecía feliz muy feliz, yo también lo estaba y sobre todo enamorado, Jazmín mi hermana menor que tenia 13 años se me acerco diciendo:
—Me huele a una chica bonita— sonrió para luego mirar a la ventana y averiguar de quien se trataba, a lo que yo me moví para cubrirle la vista.
—Vecina, que tal— dijo sonriendo nerviosa, a lo que yo voltee desesperado por encontrarla, cuando me percate que ella no estaba en la puerta, logre oír la risa de mi hermanita riéndose y otra vez ese color rojo se apoderaba de mi cara mientras daba la vuelta.
—Hermanito, te gusta la vecina— no lo dijo solo preguntando dijo afirmándolo— Y espera a que se entere Yuliza y Maryan, o mejor ¡Alexi! — decía mientras tecleaba el teléfono inteligente negro que tenia en las manos.
—Para tu información Alexi ya lo sabe y no creo que — el sonido del timbre me había dejado sin palabras, que suerte la mía Yuliza y Maryan ya estaban en mi puerta, enseguida Jazmín les abrió.
—Chicas, ¿que hacen aquí?, que inesperada visita— dije tomando mi cuello, nervioso, mientras me preguntaba ¿Cómo rayos habían llegado tan rápido? Si, vivían a unas cuantas casa pero el mensaje ¿Se podía enviar tan rápido?.
—Ya lo sabemos Max— dijo Maryan al entrar.
—Nos dijo Alexi, ¡cuentanos ya de la chica!, ¿dónde vive?, ¿cómo es?, y ¡¿Por qué no la seguiste y le pediste su numero al menos?!— dijo Yuliza tras ella, se los dije, ambas me shippeaban con cualquier chica que les pareciera linda, no me molestaba, pero hacían que mi rostro adquiriera ese tono rojizo aun mas.
—Se llama Estefany, altura promedio, castaña, test blanca, ojos color verdes, que aparentan esmeraldas, buen sentido en ropa, le gusta la literatura por eso choco con Max, y estudian en la en la misma universidad— Respondió Jazmín por mi .
—¡¿De dónde sacaste esa información?!— preguntamos los 3 al unísono.
—Alexi me la envió— respondió Jazmín mostrando la conversación de WhatsApp.
—Hola chicas pasen saben que están en su casa— dijo mi mamá a Yuliza y Maryan, caminando con una caja hacia las escaleras.
—Gracias señora, pero ya nos íbamos— dijo Yuliza.
—Tan pronto, no, quedense a comer tomen asiento— insistió mi mamá— Jaz, cariño puedes llevar esto a mi habitación, por favor, dejarlo sobre la cama— ordenó a mi hermana ofreciéndole la caja.
—Si, mamá — dijo Jazmín mientras tomaba la caja y subía las escaleras.
—No se preocupe y gracias— respondió Maryan.
—Hola buenas tardes, señora déjeme decirle que esta radiante hoy, y que alcance a escuchar que usted aria algo y eso me abrió el apetito — Dijo Alexi, entrando halagando a mi madre para que le diera de comer, aun me cuesta explicar como mi madre se lleva tan bien con mis amigos de internet, lo entiendo de Jazmín por que tenia teléfono y sobre todo vida social, pero mi madre, era mi madre.
—Gracias Alexi— sonrió mi madre —¿Que quieren que les prepare chicos?—.
—Hamburguesa— respondió Alexi demasiado rápido, lo que daba indicios que si tenia hambre.
—Esta bien en un rato les hablo para almorzar, mientras pueden tomar las natillas que gusten de la nevera—.
Tomamos unas cuantas natillas y al cabo de unas horas mamá nos llamo para comer, me quede de pie unos cuantos minutos observándolos, como mi papa saludaba al las chicas, a mis hermanos y a Alexi, esa era mi familia, no podría cambiarla por nada, me senté junto a ellos, mientras hacíamos bromas y almorzabamos hamburguesas, sin dudas era uno de los mejores almuerzos con mi familia y mas con mis amigos, uno de loa mejores días en lo que conocí a Estefany.

1-.Personas molestas.

Dos letras pérdidas... ❤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora