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MACKENZIE SMITH(multimedia):

- ¿es enserio otra vez? -pregunto furiosa y cansada- iré enseguida -aseguro cortando la llamada. Mi padre se ha metido de nuevo en un lio, siempre lo hace, estoy cansada de esto. Desde que mi madre murió en el accidente él se ha estado comportando rebelde, antes no era así, era un hombre ejemplar y trabajador, ahora es un ebrio y apostador que mantengo ya que es el unico familiar que me queda y es mi padre, él cuidó de mi un tiempo y yo también tengo que hacerlo con él pero no sé hasta que limite.
En fin, me levanto de la cama y veo que son las tres de la mañana. Ya estoy acostumbrada a esto. Me visto y me coloco una sudadera negra encima ya que afuera esta fresco, y por último tomo los dos mil dólares que he estado ahorrando para ir a estudiar a New York.
Camino por la acera fria hasta el bar donde mi padre siempre frecuenta ,lo encuentro sentado en una mesa de casino con hombres alrededor de él, voy hasta donde está y le entrego el dinero al tipo de siempre, Connor .

- cambiaron de rol, la hija es la heroina y el padre el rebelde, que estúpido -dice echándose a reír- espero que algún día aceptes mi propuesta de ir a cenar -me dice coquetamente mirándome a los ojos.

- te lo dije y te lo diré miles de veces ,no -digo cansada mientras mi padre se levanta. Siempre me pregunta esa mierda ,dice que esta locamente enamorado de mi, que estupidez.

- algún día serás mía Mackenzie -dice a los gritos mientras nos alejamos .

- sigue soñando -le grito mientras salimos del local. Furiosa camino a pasos largos y mi padre viene detrás de mi.

- lo siento nena, creí que ganaría -dice en un susurro provocándome un inmenso enfado.

- ya estoy cansada de esto, ya me cansé de gastar mi dinero en ti, piensas en ti mismo y ¿qué hay de mi? ¿a caso has olvidado que tengo un sueño? -digo furiosa con los ojos húmedos.

- es lo único en que pienso cariño intenté ganar dinero para ti... -

- DURANTE CINCO AÑOS LO INTENTASTE Y FRACASASTE ,ACASO NO PIENSAS EN QUE NUNCA GANARÁS, SI HUBIERAS DEJADO LAS APUESTAS YO AHORA ESTARÍA EN NEW YORK ESTUDIANDO COMO SIEMPRE HE QUERIDO! -exploto a gritos y lágrimas.

- es que no quiero que me dejes, no se como viviría, ya perdí a tu madre no quiero perderte a ti-dice con algunas lágrimas . No puedo, ya no puedo más . Comienzo a caminar sin decir nada, cuando llegamos a casa me fui a mi habitación y él duerme en el sofá de la sala, ya que dice que los recuerdos de su habitación que compartía con mi madre, lo torturan. Me tiro en la cama y al instante lágrimas caen mojando mi almohada, cierro los ojos y me quedo dormida.
Tres horas después la alarma suena indicando que son las seis de la mañana y que debo ir a trabajar, me levanto y voy al baño ,me tomo una ducha cálida y me alisto para ir al trabajo. Se preguntarán donde trabajo, pues en un restauran lujoso, fue una suerte entrar a trabajar allí asi que no quiero que me despidan, he trabajado en ese lugar desde que mi padre dejó su trabajo y se dedicó a la vagancia.


Tomo un taxi y voy en camino.

- buenos días -me recibe Tara con alegría al entrar al gran local, ella es mi mejor amiga, la conocí aquí.

- buenos días -digo algo cansada poniéndome el uniforme.

- ¿sucedió algo? -

- mi padre de nuevo -digo y ella rueda los ojos.

- deberías llevarlo a un acilo de ancianos -dice y la miro, ella me sonríe.

- no lo sé , él cuidó de mi y yo siento que se lo debo -digo mientras comenzamos a poner las mesas.

- claro, has dicho eso siempre y aún sigue apostando y apostando -dice algo molesta.

- oye, aprecio que te preocupes... -

- soy tu mejor amiga, siempre me preocupo por ti -me interrumpe.

- buenos días chicas -dice Alber, nuestro jefe, es tan bueno y amoroso.

- buenos días señor... -decimo ambas pero nos detenemos cuando él nos mira ofendido- Alber -nos corregimos al unísono. No le gusta que le digamos "señor" dice que se siente muy viejo y solo tiene 39 años.

- muy bien -dice y entra a la cocina.

Terminamos de poner la mesa y abrimos el local, de apoco se va llenando y eso que apenas son las 9 de la mañana.

La Bella Y El MafiosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora