Han pasado casi 4 años después de aquello, aun así, lo recuerdo con mucha claridad. Conocí a ese desperdicio de vendajes en Yokohama, Japón. Me encontraba en uno de los bares más prestigiosos del lugar bebiendo Penfolds Grange tranquilo, el lugar estaba algo lleno pero era algo de esperarse ¿no? Mientras tomaba mí cuarta copa de vino aquel hombre se acercó a mi lado preguntando si podía sentarse, de veras que no quería que lo hiciera pero el lugar realmente se encontraba concurrido por lo que no me quedo más remedio que aceptar su compañía, ¿Qué más daba? Conque lo ignorara bastaba. Me agradeció, dedicándome una gran sonrisa mientras tomaba asiento y procedía a pedirle algo al bartender.
Él era alto, de cabellos castaños y ojos color almendra, llamaba mucho la atención debido a las vendas que se cargaba encima, le cubrían ambos brazos y cuello. Se mostró sociable y educado mientras pedía un café y trato de no molestarme al ver que me encontraba ocupado contestando un mensaje en el móvil , pero su cortesía no le duro mucho.
— Vaya clima más malo ¿no? — Comento tratando de entablar una conversación. Por mi parte, gire la vista para verle desconcertado debatiéndome si ser educado y dirigirle alguna palabra o ignorarlo, como lo había planeado desde un principio.
— Eh, eso creo, hace frío.
— ¿No eres Japonés, verdad? — Cuestiono mostrando cierto interés y sonriendo, tratando de que nuestra conversación sea más que solo preguntar sobre el clima. No estaba obligado a responder pero aun así no me pareció malo hacerlo.
— No. Solo he venido por cuestiones de trabajo. Mañana vuelvo a mi país. — me limite a decirle, aunque claramete era mentira, pues solo estaba en Yokohama por asuntos de la Port Mafia, claro está que no iba a decirle que era mafioso, no soy tonto.
—Oh, que lastima~
— ¿Disculpa? — inquirí al escucharlo, él soltó una risita para luego mirar hacia su taza y beber del contenido.
—¿Puedo saber tu nombre, pequeño? — ¿pequeño? Ese sujeto estaba ofendiéndome.
— ¡No soy pequeño! — reclamé gruñendo para después tomar de la copa de vino que había ignorado hasta el momento — Chūya, Nakahara Chūya.
— Mucho gusto Chūya, soy Dazai — se presentó sonriente tomándome de las manos para saludarme. Que tipo más confianzudo.
Aun no entiendo el por qué omitió su nombre, y creo que me quedaré con esa duda. Luego de las presentaciones, tuvimos una plática amena, de vez en cuando me molestaba ya sea por mi estatura o sombrero, decía ‹‹ Ese sombrero es horrible, me dejara ciego ››.
Por lo que me conto, supe que era un maestro de filosofía, aunque aún no me lo creo. Alguien con tal actitud no podría ser un profesor, menos si hablaba de cometer suicidio. Dios, quien sabe que cosas enseñara este tipo.
Ya pasada la tarde decidí que sería mejor volver al hotel para prepararme y esperar mi vuelo de regreso, sin embargo Dazai se ofreció darme un pequeño tur por la cuidad, dijo ‹‹Hey, ¿No crees que sería una pena no visitar algunos lugares de esta ciudad? Así podrás llevarte un buen recuerdo de mí, digo de aquí.››
Con pesar acepte, aunque ¿A quién engaño? Ese desperdicio de vendajes de verdad me agradaba.
Visitamos la galería de artes, así como también un parque de atracciones en el cual Dazai siguió con sus bromas sacándome de quicio en variadas ocasiones.
— Vamos Chūya, no te enojes. No sabía que no podrías subir a aquella atracción debido a tu estatura.
— ¡Eres un imbécil!
— Tranquilo. ¡Ya sé! — sujetó mi brazo para acto seguido jalar de mí y arrastrarme a un puesto de tiro. — Deme 3 tiros~
Le pidió al hombre a cargo, este le dio una escopeta, claro, no verdadera y Dazai procedió a dispararle a las botellas sin fallar en ningún tiro. Sonrió complacido por ello y se giró a mí.
— ¿Y bien? ¿Qué peluche se te antoja? — inquirió.
— ¿Eres idiota o qué? — respondí irritado. ¿Acaso no veía que no era una chica? Solo a las chicas de les regala peluches.
— ¿eh? Anda pide el que quieras, que he ganado por ti~ — ante eso no pude evitar sonrojarme un poco, este tonto provocaba en mi cosas extrañas, que molesto.
— E-ese de ahí... — apunte a un perro de peluche de tamaño mediano y color marrón. El hombre a cargo lo tomo y se lo dio a Dazai, este me lo coloco en mis brazos sonriente. Realmente no sabía que me pasaba, mi cara estaba roja por lo que solo pude ocultarla bajando el rostro para que así mi sombrero le tapara la vista al castaño.
— Chūya, sonrojado te vez realmente lindo~
— ¡Carajo, ya cállate! — gruñí dando le la espalda y comenzando a marcharme.
— ¡Espera, Chūya!
Él me siguió hasta que me alcanzo y camino a mi lado en silencio pero con una sonrisa juguetona en su rostro, odiaba su sonrisa.
— Dazai — le llame, él me miro esperando a que procediera, suspiré y continué — Ya lo había dicho, solo estoy aquí por asuntos de trabajo ¿Lo recuerdas?
— Sip ¿A qué viene eso? — preguntó inocente.
— Dazai, creo que aquí me despido — me detuve y el también, su rostro alegre paso a uno mas serio.
— Entiendo, ¿Sabes? Creo que me he e... — no termino de hablar debido a que su celular sonó, y tuvo que atender la llamada — permíteme.
Camino unos pasos hacia atrás con rostro serio, y contesto, parecía algo realmente importante, pero también lo era mi vuelo, el cual estaba a punto de partir en 40 minutos apenas y me alcanzaba el tiempo para ir al hotel donde me alojaba y correr al aeropuerto. No me quedo de otra mas que alejarme del lugar, de verdad me hubiese gustado saber lo que Dazai quería decirme pero debía tomar mi vuelo, enserio me hubiese gustado quedarme un poco más, lamentablemente tenía que partir ese mismo día. Me hubiera gustado conocer mejor a ese tipo raro, era interesante aunque irritante.... Talvez podremos vernos de nuevo.... O eso pensé.
Ya pasaron cuatro años, en los cuales no lo volví a ver. Talvez ya me olvido y no lo culpo, eso sería lo mejor pues como miembro de la mafia no le haría ningún bien. Y yo sé que esto que siento no es correcto pero ese idiota tiene la culpa, por su culpa me enamore, soy un tonto por caer en su trampa, lo odio.
Te odio Dazai.
—— ❤ ——
Se suponía que esto lo iba a publicar el martes pero meh~
Espero que haya sido de su agrado y que alguien haya entendido la moraleja :v , este es Oficialmente el primer Soukoku que escribo :'3 Porque aún no termino Indigno de ser humano (por floja) :v
Gracias por leer~~
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Miento Luego Existo [SOUKOKU]
Storie breviMe hubiese gustado quedarme un poco más, lamentablemente tenia que partir ese mismo día. Me hubiera gustado conocer mejor a ese tipo raro, era interesante aunque irritante.... Talvez prodramos vernos de nuevo. ¨¨¨¨¨¨¨¨¨¨¨¨ Los personajes no me...