(BORRADOR)

Capítulo 41.

Pensé que ya lo había subido, perdón D:

Narra Maddie:

Luke me hablaba, no lo oía, ya que no me interesaba en lo más mínimo, ¿Cómo interesarme en alguien que sólo habla de si mismo?

Si estaríamos con Ethan no sucedería eso...

No me importa, él quiere que me separe de Luke, y eso lo haré cuando yo quiera, no cuando me lo pida, maldita sea, no me lo nombres.

Él nos quiere, ¿Por qué hacerlo sufrir?, ambas sabemos que también lo queremos, no lo hagas tan complicado.

¡Es que sólo piensas en él!, no piensas en cómo me siento yo, maldita sea, sólo soy una adolescente, ¿No puedo tener una vida común?

¿Quién define lo que es común?

Yo, diciendo que no es común enamorarte del jodido amigo de tu padre.

¿Enamorarte?, oh, así que estás enamorada, ¡Joder!, ¡Lo sabía!

¿Qué?, no... es una forma de decir, pf, ¿yo?, ¿enamorarme?, jamás, quiero decir, cuando tenga a mi Mate sí, obviamente, ya que estaremos destinados a estar juntos, pero, como no lo conozco, no.

¿Y tú qué sabes?

Lo suficiente para saber que no conozco a mi Mate.

Cambiemos de tema.

Luke ya no estaba, y no me importó.

Bien.

Me encaminé a la cocina para hacerme un sándwich, tenía hambre.

Maldita sea.

Justo a la persona que menos quería ver.

Ethan bebiendo bebiendo agua.

-Ah, hola.-Dije tratando de parecer normal.

No eres normal, ¡Aceptalo de una vez!

Púdrete.

-H-Hola.-Dijo ¿evitándome?

¿Qué diablos le sucedía?

-¿Sucede algo?.-Pregunté frunciendo el ceño.

-No.-Dijo cortante.

¡Maldita sea!.

Eso siente él cuando tú lo evitas o lo tratas mal, siéntete bien.

-Joder, dime qué diablos te sucede, Ethan.-Dije enojada.

Me volvía loca.

-¿No querías que te deje "vivir"?.-Dijo nuevamente cortante.

¡Maldita sea!, esto no funciona así.

-¡Joder! ¿¡Qué diablos te sucede!?, te he preguntado algo, Ethan, responde.-Grité.

-Solamente me cansé de ser siempre el afectado en ésta relación.-Dijo simple.

¿Relación?

-¿Relación?, ¿Qué?, tú y yo no tenemos nada.-Dije.

Juro que vi dolor en su mirada, pero luego la cambió por una mirada que conocía bien.

¡La maldita mirada de la indiferencia!

Joder.

-Sí, me he confundido, no tenemos nada.-Dijo indiferente.

¡Maldita indiferencia!

-Maldita sea. -Dije enojada.

Los papeles se invierten.

No.

-¿Por qué te enojas?, eres tú la que hace eso siempre, ¿Por qué no lo puedo hacer yo?.-Dijo.

-Porque no, maldita sea, ¡Deja de tratar de ser indiferente!, los dos sabemos que te importa demasiado.-Dije frustrada.

-¡Eso mismo te digo yo a ti!, deja de comportarte así, te importo, yo lo se, ¿Por qué no lo admites?-Dijo acercándose.

Sabes que tiene razón.

No, yo...Yo, yo no puedo.

-No puedo.-Susurré.

-Maldita sea.-Dijo frustrado para abrazarme.

-Qué...-Dije.

-Sólo calla y abrazame.-Dijo.

Lo abracé, no entiendo por qué, pero lo hice.

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Holaa,

acá está el capítulo de hoy,

ya saben, si quieren que siga voten y comenten.