A la mañana siguiente me levanté muy temprano para ir a la casa del profesor Agasa, sin hacer mucho ruido como para despertar a Ran (si, solamente a Ran, el viejo está muy borracho y probablemente tenga resaca). En la mesa de centro dejé una nota para Ran diciéndole:
Ran-neechan:
Ayer Haibara me mandó un mensaje para invitarme a jugar con los chicos a la casa del profesor Agasa, porque me contó que él tenía un nuevo invento para nosotros, probablemente me quede a dormir ahí hoy, estaré bien Ran-neechan, no te preocupes por mi. Conan-kun.
Lo siento Ran...no creo que pueda verte en este estado, por ahora, necesito estar con Kid, saber que demonios es lo que quiere, es mi deber como detective averiguarlo.
Después de dejar todo cerrado, me dirigí a la casa del profesor Agasa en la patineta, lo más rápido posible. Tengo que averiguar los efectos que podría tener el experimento que me ha propuesto Haibara, sobre la cura a esta droga.
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Una vez llegué a la casa del profesor, me sentí más aliviado, pero nervioso...si esto funcionaba...podría ver a Kid...cumplir con lo que él quería...pero...yo sentiría dolor, como si mis huesos se derritiesen, pero debo dejar de dudar...esto lo hago por mi, por Haibara, para que podamos salir de esto...no por peticiones de ese estúpido ladrón...
- Te quedarás en la entrada por siempre?- Haibara con su forma de ser, me sacó de mis pensamientos.
-No...estaba pensando, lo siento.- Qué demonios...nunca le contesto de esa forma.
- Realmente te debió haber afectado hasta la cabeza, lo que sea que haya pasado con Kid. MIRA ESAS OJERAS!! No dormiste nada por penar en él- ella sin duda, también me conocía bastante bien.- Bien Kudo, vamos a mi despacho.- Me dirigió Haibara.
En la habitación donde ella trabajaba , era parecida a un consultorio, con una camilla y llena de frascos, anotaciones, la verdad estaba todo tirado, pero todos esos apuntes, seguramente tienen que ver con la cura y la droga y ella, por supuesto, traía puesto su delantal.
- Perdona el desorden- es como si hubiese leído mis pensamientos.- Siéntate ahí- señaló la camilla- y ahora, tómate esto.- extendió hacia mi una pastilla de color mitad blanca y roja- este es el prototipo de la cura para el APTX4869.
-Qué esperas?! Tómala.-Exigió
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