8. El qué quiera entender, que entienda (Una cita erótica)

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En frente de un edificio se encontraba un castaño claro, esperaba apoyado en su moto negra a su Majo, algo le decía que esa cita sería inigualable y por eso, se sentía tan emocionado. Mientras las chicas que pasaban se le quedaban viendo como si de una estrella se tratara, un peli-negro se le acercaba, molesto por las miradas que le regalaban las chicas sin duda alguna lo marcaria esa noche sí o sí.

—Shouta-san que alegría verte, vamos así podrás ver mis pinturas – sonreía con brillitos a su alrededor mientras acercaba para besarlo

— Ho-hola – decía con un sonrojo el peli-negro, al oír susurros de algunas chicas sobre lo guapo que era Kou, decidió romper la distancia y darle un beso dulce aunque corto, eso sería suficiente para acallar todos los murmullos

—Vamos – sonreía mientras se subía a la moto

»ohh es gay que mal... que asco son gays... no pueden guardarse su acto de horror para cuando estén solos... se irán al infierno por cometer tal acto...«

Sin duda palabras que atacaban la moral del Majo, se subió a la moto abrazando fuertemente al castaño, este se extrañó por el comportamiento del peli-negro hasta que escucho »Son fenómenos por tener sexo con personas del mismo género« sin dudar acelero llevándose de ahí a su amado para que no sufriera por tales palabras, era difícil puesto que en esta época que no era bien vista una relación homosexual te hacía sentir discriminado y eso era lo que menos quería que sintiera el peli-negro.

En poco tiempo llegaron a la galería donde Kou exponía sus obras junto a otros artistas que, si bien no eran tan famosos, aun así tenían su fama entre las personas de clase acomodada, entraron e inmediatamente el joven universitario le dio un tour privado al Majo mostrándole diferentes obras de arte, explicándole, compartiéndole un poco sobre lo que era su pasión. Sin duda el peli-negro quedaba fascinado por la manera de ser del castaño, era tan dulce y apasionado que solo lo hacía suspirar.

En todo el recorrido no se habían soltado de la mano, a decir verdad aún oían algunos comentarios homofóbicos, pero ya no eran tantos como cuando estaban frente al edificio donde vivía Shouta y con la mano del castaño claro se tranquilizaba.

Cuando llegaron al lugar donde se exponían las obras del oji-miel, este por un momento soltó su mano, comunicándole que debía hacer algo antes de mostrarle la obra que con tanto afán guardaba, se le notaba el nerviosismo y la euforia, sin duda era divertido estar con el castaño.

—Buenas noches señoras y señores, esta noche estamos presentando las obras de dos artistas que con tanto esfuerzo han logrado hacer oír su nombre, además también tenemos la participación de un joven estudiante que con gran talento nos ha logrado impresionar para que el día de hoy dejemos que este aquí presentando una hermosísima obra, sin más que decir le dejo el micrófono al joven artista – con una seña llamo al oji-miel para que se acercara al micrófono para hablar

—Buenas noches a todos, el día de hoy me complace el presentarles la obra que hice con tanto esfuerzo pensando en la persona que amo – al hacer una seña descubrieron una pintura en la que se encontraba Shouta mirando al cielo mientras tocaba el piano, una pieza llena de sentimiento, hermosa por lo que refleja, incluso el peli-negro estaba sorprendido, realmente era él cuando recordaba sus problemas o los de sus amigos

—Pe-pero es un hombre, ¿qué es esto? ¿Un circo donde exhiben obras de fenómenos? – decía una mujer indignada

—No puedo creerlo que falta de respeto, y así se dignan a invitarnos – el hombre que acompañaba a la mujer hablaba cruelmente, sin importarle los sentimientos del joven artista

Love Majutsu (Junjou Romantica&Sekaiichi Hatsukoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora