Love Me Harder (Niall Horan) [En Revisión]

78

Llego a la casa de Liam, apago el motor y me bajo del auto, camino hasta la entrada y dudo si llamar a la puerta, siento que debería irme a casa y llamar a Niall y decirle que todo está bien y que podremos con esto, que lo seguiría hasta el final del mundo porque lo amo, pero mi mano ya está tocando el timbre y segundo después Brittany aparece al otro lado de la puerta.

Me sonríe tiernamente, estoy segura que sabe perfectamente lo que paso, sabe que fui yo quien arruino todo pero es tan buena amiga que jamás me diría eso.

Se hace a un lado para que pase, caminamos hasta la piscina, ya abra tiempo para hablar de lo que sea.

Llegamos hasta donde están los demás, todos están empapados jugando con pistolas de agua como unos niños, apenas nos ven salir nos bombardean de agua, comienzo a correr como una niña de cinco años por todo el patio, sin importarme que no llevo más ropa o que pueda agarrar una gripe.

Ya más tarde Brittany se desvuelve conmigo a la cas

a, pero antes nos vamos por un café, me siento pésimo de hacer que mi amiga deje a su novio por irse conmigo, ella dice que está todo bien y que Liam entiende pero no puedo evitar sentirme mal por ellos.

Retiramos nuestros cafés y caminamos afuera de la cafetería, llegamos a una escalera y nos sentamos en el penúltimo escalón.

Quedamos en silencio por unos segundos, Brittany quiere darme mi espacio y que sea yo quien le cuente lo que paso, no me presionara si no quiero decírselo, pero estoy segura que ya sabe, después de todo Niall y Liam son mejores amigos y Liam con Brittany tiene mucha confianza.

-Lo arruine todo -Le digo mirando el vaso de papel que esta entre mis manos.

-No creo que allá sido así, solo deben hablarlo, superaran esto.

-Creo que ya no podremos. -Le cuento todo nuevamente, aunque ella lo sepa todo, necesito contarle mi versión y la sorpresa que fue para mí el enterarme de esa forma.

-Bueno, primeramente, Niall cometió un erro en no haberte contado, Liam me lo dijo hoy, justo después de que tú me llamaste Niall llamo a Liam.

-Lo sé, pero yo exagere las cosas, no sé, buscaba una excusa para pelear esta vez.

-Ambos se aman -Se gira y pone una de sus manos sobre las mías. -Podrán con esto, ya verás cómo al final terminaran juntos, siempre es así.

- ¿y si no estamos hechos para estar juntos? -Si hace un año me hubieran dicho que estaría hablando de esa forma del amor y de perder a alguien me hubiera reído en su cara, pero aquí estoy, apunto de botar todas mis lágrimas nuevamente por Niall.

-Yo pensaba lo mismo de lo mío con Liam y mírame ahora, estoy enamorada como una loca de él. -Se ríe por su comentario, pero sé que habla enserio, mi amiga no es la misma que antes desde que conoció a Liam ha cambiado demasiado.

- ¿Crees que deba irme con él?

-Yo sería la que más te extrañaría pero si así te puedo ver feliz, vete con el amiga y se feliz.

- ¿Entonces me dejaras libre?

-Si bueno, puedo arrepentirme y encerrarte en una habitación sin contacto con el mundo y muchos menos contactos de cualquier tipo con Niall -Golpeo su hombro de forma amistosa y ella sonríe, la extrañare tanto.

Llega el día Lunes y parto mi día en el hospital con la Esposa de Cris, no puedo negar que me incomoda el estar tan bien con ella, sonríe tanto que no puedo creer todo lo que se comenta de ella, todos dicen lo bruja que es, pero conmigo es un amor, siempre está dispuesta a ayudarme en todo, me dejar participar en todo lo que ella hace, me he mantenido lo más alejada posible de Cris, no quiero que alguien nos vea o peor aún que su propia esposa nos vea juntos, me gusta mucho mi carrera que no la quiero perder por los celos de la bruja.

Después de dos partos, muchos gritos y bebes hermosos la Dra. Reyes me dio un descanso, es tan linda que me siento mal de no decirle la verdad, camino hasta la sala de descanso y en el camino me encuentro con Cris, lo ignoro y camino más rápido.

- ¿Podemos hablar? -Me dice Cris siguiéndome a la sala de descanso.

-No podemos -Me preparo un poco de café.

-Serán solo unos minutos.

-No -Me siento en un sillón individual, pero él se sienta en el más grande. -Además tú y yo no tenemos nada de qué hablar.

-Solo quiero saber porque solo desapareciste sin decir nada. -Giro los ojos, no quiero hablar de eso, creí que todo había quedado claro, bebo un sorbo de café para demorar mi respuesta.

-Por lo que veo no te importo mucho el que me alejara. -no debí decir eso, pero igual me importa un poco el que allá vuelto con su esposa.

-si me importo, pero creí que sería lo mejor.

-Lo fue -Me levanto del sofá dispuesta a salir pero él también se levanta y obstruye mi huida.

- ¿Estas segura? -me arte, dejo mi tan agradable taza de café sobre la mesa y camino hasta la salida, pero él se para frente a mí.

-Déjame salir -Digo seria, lo que menos quiero es caer con esos lindos ojos y esa hermosa sonrisa.

-Está bien -Se aleja -Pero antes -me toma de la cintura y me pega a la pared.

-Cris, puede entrar alguien -lo empujo pero no se mueve.

-No... -y como una señal divina comienza a sonar su teléfono salvándome, se separa de mí y revisa su celular.

-Debo irme, pero tenemos algo pendiente -Me apunta.

-No tenemos nada pendiente -le digo y salgo rápidamente de la sala, no había nadie cerca, por suerte.

Me devuelvo hasta la sala de neonatal y por suerte la Dra. Reyes no se ve por ninguna parte, solo está la otra enfermera.

-La Dra. Reyes se tuvo que ir, dijo que quedabas a cargo el resto de la tarde -Me regala una sonrisa y sigue chequeando a los bebes.

Yo la imito y paso una tarde tranquila, no llegan mujeres a punto de tener a sus bebes, solo chequear que los bebes tengan una temperatura adecuada y llevárselos a sus madres para que los alimenten.

Termino mi turno y me voy a descansar a mi casa.