Los Poetas De Verdad Mueren Con Una Pluma En La Mano.

Tu Silueta En Mi Alma...

Oh que bello el suspiro que me provocan estos sentimientos que tenía escondidos en mi ser, por qué por años los oculte de los malos amores por temor que uno de ellos se hiciera con mis más sinceros deseos por querer con locura...
Y es que tú, hermosa musa, has creado sobre mi alma un cálido sentimiento que arriesga a desbordar mi cariño sobre tus labios cada vez que te veo, creyendo que tú eres la indicada para querer con la locura que encierra un amor que quiere ser libre después de ser prisionero de un olvido caprichoso que como fiel cobarde lo quise ocultar de esas personas que solo querían desaprovecharlo con sus falsas intenciones.
Oh dioses divinos, que día mágico me han regalado, que hermoso lunes bajo el techo de mi hogar... benditos serán estos días de la semana, pues siempre me harán recordar el dulce aroma de su perfume y lo suave que son sus labios, así como su imponente belleza que inundan mis sentidos a cada recuerdo que tengo de ella.
Sin embargo a veces me pregunto, que tan bueno habré sido en esta vida, que me han premiado con el dichoso placer de conocerte, pues tu plasmas en mi alma la silueta de lo que puede ser un cariño más sincero que el que pude haber sentido jamás en alguna parte de mi vivir.
Como no caer rendido ante ti, si tu risa me estremece y con solo verte sonreír curas mis días de tristeza, mientras que tú hermosa voz hace que mis penas se ahoguen en un mar de dulzura...
Y es que así fue como veía y sentía, que en mi alma se formaba una silueta que anunciaba la aurora de un nuevo renacer, de un nuevo sentir, de un nuevo vivir...
Mientras pasen los días y pueda verte, besarte, abrazarte y poder acariciar con las yemas de mis dedos cada parte de tu silueta de Venus que enloquecería al escultor más prodigioso por no poder esculpir semejante belleza en una de sus obras, yo podría morir gustoso de haberte conocido, pues mi alma me dice que serás alguien que marcará un antes y un después en mi vida... y es que a veces quisiera ser eterno para disfrutar estos momentos para siempre y llevarlos como medallas en mi alma, medallas que formen tu silueta para llevarte conmigo, a cada paso que doy.