Los Poetas De Verdad Mueren Con Una Pluma En La Mano.

Venus De Mi Alma

Que hermosa la naturaleza del alma, que pide a gritos saciar el inminente deseo de tener en sus brazos un cuerpo que la cubra como el manto más cálido y preciado que el mundo pudiese dar... un cuerpo que extasiado por el deseo, derrame amor y lujuria mientras el alma vuelta loca se va fundiendo en los poros de la piel de aquel cuerpo que sin cesar un instante, retiembla en los sentidos del entorno en el que han decido hacer válidos sus deseos.

Mira como mi alma se vuelve loca por tus besos, mira cómo la haces temblar cuando con un susurro me pides que te haga mía sin dejar a dudas, tus más profundos deseos provenientes de todo tu cuerpo...

Y es ahí cuando mi alma decide juguetear con tus labios, besándolos una y otra vez, hasta dejarte sin aliento, mientras con un movimiento sutil, recorro el contorno de tu espina dorsal que derrama una gota de sudor que baja cómplice de mis caricias por toda tu espalda hasta llegar a chocar con la yema de mis dedos.

Oh bello cuerpo de venus, a caso fui merecedor de tener entre mis manos semejante figura, con esos hermosos hoyuelos que se forman en tus caderas y esa hermosa cintura que denotan tu arduo trabajo esculpiendo semejante obra de arte qué haces llamar cuerpo...

¿Acaso lo puedes sentir? ¿Puedes sentir como mi alma se ha vuelto rehén de tu cuerpo? Con esos carnosos labios carmesí y esa lengua que parece fiera enjaulada queriendo salir cada que un beso de mi alma llega a tu boca... y no es que la lujuria nos invada, solo son esos deseos de estar uno con el otro, y que mejor para mi alma mientras nos recostamos, mirar esos ojos de color miel que se encienden con cada rose de nuestros cuerpos.

Y así es como tu cuerpo y mi alma se funden en un hermoso cuadro de Van Gogh, plasmando nuestros sentimientos y deseos más puros y sinceros, anunciando al alba que estaremos juntos hasta que el amor nos dure.