Frases De Libros

No soy un Serial Killer

Este libro lo compre hace tiempo porque me llamo mucho la atención, pero no lo pude leer porque me concentre en otros libros xD pero lo empecé ayer y ya lo terminé hoy.
Es el primer libro de la trilogía "John Cleaver" y debo admitir que me gusto mucho.
El libro tiene una buena trama, no te mantiene en tanto suspenso pero hay algo que en mi caso me atrapó.
Lo recomiendo mucho, me hizo llorar y gritar, pero no les diré el por qué; no les quiero arruinar nada :(
El punto es que esta interesante y lo recomiendo, es fácil de leer, entretenido y creo que a mi me gusto más porque toca el tema de los asesinos seriales y yo AMO todo lo relacionado con ellos.
Sin más aquí las frases:

*Soy tu único amigo en el mundo, no me matarías.

*¿Qué podía haberlo atacado tan brutalmente, y a la vez tan cuidadosamente, para que la evidencia apuntará al mismo tiempo a un hombre y a una bestia?

*Soy una buena persona –admití– porque sé cómo deben actuar las buenas personas, y las copio.

*Ser muy bueno en algo que no deberías estar haciendo, no lo hace mejor.

*Mantuve un tono de voz calmado y neutral; no podía dejar que me quitara eso, pero no podía mostrarle cuán importante era para mi.

*El fuego es breve y temporal, la definición misma de lo efímero. Llega pronto, cobrando vida con un rugido cuando el calor y el combustible se juntan hasta encenderse, y baila con avidez mientras todo a su alrededor se ennegrece y se enriza. Cuando ya no queda nada por consumir desaparece, sin dejar nada más que la ceniza del combustible que no usó; aquellos trozos de madera y hoja y papel que eran demasiado impuros para quemarse, demasido indignos para unírseles al fuego en su danza.

*Cualquiera creería que debe de ser espeluznante tener un monstruo real dentro de ti, pero créanme, es mucho, mucho peor cuando el monstruo está solo en tu mente.

*No hay forma más deshumanizante de morir que hacerlo expuesto a la intemperie, en el frío, el calor o el agua. La violencia es apasionada y real; en los últimos momentos mientras peleas por tu vida, disparando un arma o luchando con el asaltante o gritando en busca de ayuda, tu corazón late rápidamente y tú cuerpo vibra lleno de energía, estás alerta y despierto y, por un breve momento, más vivo y humano de lo que has estado nunca.

*Era como un reconocimiento abierto de que algo andaba mal: prefería dejar que las cosas se descompusieran en el silencio.

*Gracias, mamá. Gracias por creer en mis mentiras.

*Sólo pedaleé sin parar y vi cómo las líneas del camino desaparecían bajo mi rueda y esperé, en nombre del cielo, que un camión me atropellara y me dejara abandonado en el pavimento.

*Duele como el infierno –se quedó en silencio un momento–. Duele cada vez.

*No tiene nada para quedarse y tiene todo para irse, ¿por qué elige quedarse?

*Los héroes en las historias tiene que pelear con horribles demonios, que tienen ojos rojos como carbones encendidos; los ojos de mi demonio estaban rojos por las lágrimas. Lo maldije, no porque sus lágrimas fueran falsas, sino porque eran verdaderas.

* Por favor ayúdame -le suplique en silencio- pero solo dije: "Estoy bien".

*¿Qué demonios crees que estoy pensando? –grite–. Cómo crees que es vivir con una mamá que piensa que eres un robot? ¿O una gárgola? ¿Crees que puedes decir lo que quieras y que no pasa nada? "Jhon es un psicópata, apuñalalo en la cara, no va a sentir nada". ¿Crees que no puedo sentir nada? Siento todo, mamá, cada puñalada, cada grito, cada susurro detrás de mí, y estoy dispuesto a apuñalarlos a todos ustedes si es lo que se necesita para hacerlos entender.

*Simplemente hacemos lo que siempre hacemos y nos las arreglamos.

*Era como una pieza de arte, algo que había hecho con mis propias manos. Me embargó un poderoso sentimiento de orgullo, y entendí por qué tantos asesinos seriales dejaban los cuerpos para ser descubiertos: cuando creas algo tan bello, quieres que todos lo vean.

*Acuérdate de mí cuando ya me haya ido.

*Algo hizo clic muy dentro de mí, y me di cuenta de que había estado esperando escuchar esas palabras durante toda mi vida. Me aplastaron y me liberaron al mismo tiempo, encajando en mi alma como una pieza de rompecabezas perdida por largo tiempo. La tensión de la noche, el día entero, de los últimos cinco meses fluyó fuera de mí como sangre desde una vena abierta, y me vi a mi mismo por primera vez como mi madre me veía: no un psicópata, no un acosador, no un asesino, sino un chico triste y solo. Me dejé caer en sus brazos y me di cuenta, por primera vez en siete años, de que era capaz de llorar.

* Funcionó por un tiempo, pero tarde o temprano los tenía que dejar para irme a dormir, y entonces me quedaba ahí solo, en la oscuridad, y luchaba con mis pensamientos hasta que me mordía la lengua y golpeaba mi colchón y suplicaba clemencia.

*La verdad era más aterradora: el verdadero terror no venía de monstruos gigantes, sino de gente ordinaria, con aspecto inocente. Gente como el señor Crowley. Gente como yo. Nunca nos verías venir.