Operación: Rescate de Hermanas

El Inicio - Parte 3

-Wow, ese si que fue un largo viaje, espero poder encontrar a mis hermanas aquí...
Estaba sorprendido con el chico que había llegado, pero Dipper no tanto y dijo:

-Te estábamos esperando...
El chico los vio confundido y dijo:

-¿Y ustedes quienes son?

Logramos ver a un chico con cabello blanco, lo cuál me sorprendió, vestía una playera naranja, pantalones de mezclilla azules, tenis blancos con franjas rojas a los costados, y se notaba que tenía un collar plateado en el cuello, con un dije de espada de póker.

-Mi nombre es Dipper Pines.
-Y yo soy Eddie Luna, mucho gusto en conocerte.

El chico, al vernos, cambió su expresión a una más tranquila, y se presentó:

-Hola, me llamo Lincoln Loud, mucho gusto.

-Supongo que él viene de la tercera dimensión ¿verdad?; le dije a Dipper.

-Creo que si.

Lincoln, al escucharnos, preguntó:

-Disculpen pero, ¿a qué se refieren con "la tercera dimensión"? ¿Dónde estoy y por qué terminé en este lugar?

Dipper y yo cruzamos miradas, porque no sabíamos si era el momento de decirle lo que estaba pasando, pero al no tener otra opción, tuvimos que contarle...

-¡¡¡¿QUEEEEEEEÉ?!!!!,  grito Lincoln, -¡¿Mis hermanas fueron raptadas por un ser interdimensional?!

-Básicamente si, pero no sé cómo Bill llegó a tu dimensión, él necesitaba ser invocado...

Lincoln al oir esto, dijo:

-Ahora lo entiendo... Ya sé porqué Lisa encontró eso...

-¿De qué hablas?, preguntó Dipper...

-Bueno, necesito contar todo lo que pasó...

Estuvimos de acuerdo y Lincoln empezó con su historia:

-Bueno, vengo de una ciudad llamada Royal Woods; mi familia está compuesta por mis padres y 11 hijos, de los cuáles soy yo y mis 10 hermanas, 5 mayores, Lori, Leni, Luna, Luan y Lynn, y 5 menores, Lucy, Lana, Lola, Lisa y Lily.

Hemos tenido muchos problemas, la mayoría son por mi culpa, desde apagones en la casa hasta un vídeo escolar que no debí subir y una discusión que no debí intervenir, pero siempre lo solucionábamos y seguíamos juntos como si nada hubiera pasado, bueno, eso creía...

Dipper y yo no supimos a qué se refería con eso, así que preguntamos el por qué de eso, y Lincoln nos dijo:

-Bueno, es un poco vergonzoso de hablar, pero como todo esto se generó de ahí, tengo que decirlo.

Verán, hace como varios años, llegó una chica nueva a mi salón de clases, la recuerdo muy bien: es de piel clara con el pelo castaño y rizado, sujetado por una diadema amarilla, vistiendo un hermoso vestido de color azul y zapatos del mismo color, se llama Cristina, y desde la primera vez que la ví, me había quedado perdidamente enamorado de ella, siempre la veía escondido ya sea detrás de un bote de basura o hasta atrás del salón; nunca la perdía de vista...

Lincoln se había sonrojado por eso y nos vio con temor diciendo:

-Disculpen eso...

Pero le dijimos que no había problema, hasta Dipper agregó:

-Sé lo que sientes Lincoln, enserio, lo sé...

Al escuchar eso, Lincoln se sintió más tranquilo y pudo continuar con su historia:
-Muy bien, gracias, continuando, fueron pasando los años y tanto Cristina, yo y mi amor por ella iban creciendo mucho, pero como en un principio, nunca tuve el valor para decirle lo que sentía, pero ya estaba harto de guardarme ese sentir, así que decidí hacer algo al respecto.