1. Michelle y Karla

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Era una oscura noche a las afueras de Miami cuando Lauren decidió conducir con nada más que veinte dolares, su celular y una navaja de bolsillo regalo de navidad de su recién reclutado hermano.

Lauren manejaba con una sonrisa de serenidad sintiendo como el aire se colaba por su ventana sacudiendo su cabello de una manera tan relajante que era tentador el quedarse dormida.

De pronto con la poca luz de los reflectores del auto pudo ver a una muchacha de cabello marrón oscuro, ella era bastante hermosa, con el cabello recogido en una cola y un bolso en el antebrazo; la pobre muchacha tenia una preocupada mirada casi persida asi que Lauren siguio su instinto y paro el auto justo al lado de ella.

Lauren bajo la ventana y sonrio a la muchacha la cual estaba conmocionada que alguien finalmente se haya detenido.

"Hola soy Michelle, ¿Te encuentras bien? Ya es muy noche ¿Estas perdida?" -pregunto la ojiverde con serenidad dandole confianza a la pequeña latina aunque haya mentido en su nombre.

"Yo...wow esto sonara muy patetico pero sali con este chico pensando que esta era una cita pero creo que el penso que hoy algo más iba a pasar, le dije que no y el solo me dejo aqui" -dijo la castaña algo avergonzada mirando hacia otro lado.

"Un completo idiota, ¿eh?" -dijo la mayor soltando un suspiro no podiendo creer como alguien habria sido tan imbecil para tentar su suerte - "Bueno, ¿Porque sigues ahi parada?" -dijo la ojiverde haciendo que la menor la mirase extrañada- "Vamos sube, te llevare a casa que esta de más decir que tuviste una mala noche" -dijo Lauren estirandose y abriendo asi la puerta de copiloto.

La pequeña latina dudo por unos segundos, mirando a ambos lados no creyendo la situación pero finalmente subiendo al auto, cerrando la puerta detras de ella.

"Tranquila no muerdo, ¿Cual es tu nombre?" -dijo Lauren sonriendo de lado, poniendo en movimiento el auto.

Ella dudo, miro la ventana y sujeto su bolso más fuerte antes de hablar.

"Karla, soy Karla" -dijo ella poniendo un mechon de su pelo tras su oreja sumamente nerviosa.

"Bueno Karla, ¿Dime a donde te llevo?" -dijo la ojiverde manejando aun de frente casi por entrar a una playa privada, su favorita.

"Solo sigue adelante, no esta muy lejos" -dijo Karla abriendo su bolso y metiendo su mano en este manteniendola ahi discretamente.

"De acuerdo" -dijo Lauren tomando el timón con su mano derecha dejando la izquierda debajo de su asiento.

"¿Dime Michelle, tienes hermanos o familia?" -pregunto Karla de la nada con serenidad.

"No, ellos murieron hace ya mucho" -dijo Lauren aun mirando la carretera- "¿Que hay de ti?" -dijo ella sonriendole un segundo.

"Misma situación, solo que era muy bebé para recordarlo" -dijo Karla soltando un suspiro- "Han de ser las 12, ¿Que hacias conduciendo tan tarde?" -pregunto la latina con intriga evidente en la voz.

"Tuve un dia muy pesado, soy arquitecta y justo estuve trabajando en los planos del nuevo centro comercial" -dijo Lauren mirando los espejos con cuidado, revisando que no hubiera nadie a su alrededor.

"Vaya eso a de ser muy cansado, quizas necesitas un largo descanzo" -dijo Karla con una sonrisa de lado.

"Si es por eso que para relajarme hago cosas como esta" -dijo Lauren deteniendo de a pocos el auto.

"¿A que te refieres?" -dijo Karla apretando el agarre en el objeto dentro su cartera.

"Eres una chica muy hermosa Karla, es una lastima que tenga que hacer esto" -dijo Lauren abriendo la navaja por debajo de su asiento dejando a ver la hoja.

"Lo siento Michelle pero aqui termina el viaje" -dijo Karla en un susurro dispuesta a sacar el abrecartas que tenia por el mango apretado en su mano no escuchando lo que acababa de decir la ojiverde.

Las dos sacaron los objetos cortantes parando en seco ambas sorprendidas al verse entre si apuntando al corazon y cuello.

"Pero que caraj- ¡¿Itentas matarme?!" -dijo Lauren sorprendida con los ojos como platos.

"¿Y esa navaja? ¡Tu tambien intentabas matarme!" -dijo Karla bajando el abre cartas y viendo la extraña situación.

"Espera un minuto, ese abre cartas y ese bolso rojo... ¡Oh por dios! ¡Eres la asesina de la carretera! Esa que aparece en los periodicos que sube a autos de personas y los acuchilla en el corazón, de la que solo una persona sobrevivio" -dijo Lauren asombrada viendo a la muchacha con algo de admiración.

"Si esa soy yo..." -dijo Karla no muy segura si debia aceptar su identidad- "Esta playa, ¿No es esta la playa donde aparecen personas degolladas en luna llena? ¡No lo puedo creer! ¡Eras tu no es asi!" -dijo Karla con una sonrisa ya mas relajada.

Lauren asintio, ambas muchachas se miraron por unos segundos y empezaron a reirse de si mismas.

"Dios mio no puedo creer que me encontre con uno de mis idolos" -dijo Lauren tapandose el rostro con una mano riendose en ella y mirando a Karla por la division de sus dedos.

"¿Idolo? Yo adoro tu trabajo, la muerte del drogadicto al crack fue mi favorita, sigo sin entender como pudiste sacar su corazon via oral sin romper su traquea, lo intente una vez pero acabe perforandolo con las uñas" -dijo Karla fascinada con todo como una pequeña niña en dia de navidad.

"Lo aspire hasta la garganta con un sopla hojas es realmente facil" -dijo Lauren guardando la navaja en su bolsillo importandole ya nada el haberse quedado sin victima.

"Asombroso. ¿Pero que se supone que hagamos ahora? Barrio no mata barrio, nos quedamos sin victimas Michelle" -dijo Karla sonriendo de lado tambien guardando su arma pero en su bolso.

"Lauren, mi nombre es Lauren Jauregui" -dijo la pelinegra acomodandose el cabello con una mano y sonriendole coquetamente.

"Un gusto, yo soy Camila Cabello" -dijo la ojimarron mordiendose el labio y mirando enfrente evitando asi que viera sus mejillas sonrojadas.

"Perdere la racha con 26 lunas seguidas, bueno me alegra que sea contigo" -dijo Lauren mirandola de reojo timidamente, Camila le parecia la mujer ideal y no podia evitar sentirse algo nerviosa.

Camila se giro y vio el perfil de la ojiverde a la luz de la luna quedando fascinada y teniendo una idea distinta que esperaba que ella acepte.

"Aun tenemos tiempo, vayamos por una victima despues de todo el 27 es mi numero favorito" -dijo Camila tomando la mano de la mas palida con un brillo tentador en los ojos.

"¿Que hay de ti? No tendras a quien matar" -dijo la mayor dudando.

"Ver a una chica tan hermosa matar me parece mucho mejor" -dijo Camila en voz ronca logrando a Lauren sentir cosquillas en la columna lumbar- "Vamos Jauregui, muestrame lo que tienes" -dijo Cabello y sin pensarlo dos veces el auto arranco marchandose de ahi a toda velocidad entre risas y un nuevo lazo que duraria mucho tiempo.

Después de todo nada une mas a dos mujeres que un pasatiempo aun si este implica ensuciarse las manos.

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Alv escribi esto bc estaba aburrida y idk diganme que piensan y eso re bai

-Valexandra

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