Capítulo 8. Su mirada.

596 41 3
                                    

Tuve que esperar unos minutos hasta que vi como una mata de pelo  rojizo salía corriendo del portal hasta llegar a mi coche.

- Hola tía, gracias por recogerme. Mi madre, vaya cochazo. - Dijo ella saludándome con dos besos y poniéndose el cinturón de seguridad.

- Hola. Pues que sepas que odio este coche, es demasiado trasto para mí. - dije medio riendo mientras salía del aparcamiento.

- Pues a mi me encanta, el mío me está dando tantos problemas que creo que mejor me compro otro. En fin, ¿dónde está el restaurante ese?

- Mmm.. No tengo mucha idea pero el gps nos ayudará, además vamos sobradas de tiempo. ¿Te importa si pongo la radio?

- Por supuesto que no, mientras que no te desconcentre demasiado.

- No, estoy acostumbrada a hacer todo con música así que no te preocupes.

---------------------

Llegamos al restaurante tras desviarnos del camino solo dos veces. Salimos y nos encontramos siendo de las primeras personas en llegar al pequeño, pero lujoso restaurante que había sido cerrado solo para que nosotros lo disfrutaramos. Nos sentamos al lado de Fredo y Nick, y los saludamos.

Al cabo de pocos minutos, fueron apareciendo algunas personas del Team Bieber y todos los bailarines. Justin fue el último en llegar, nos saludo a todos con un gesto de la mano y se sentó en una silla. Parecía un poco distante, pero pronto empezó a gastarle bromas a Ryan Good y a... ¿cómo se llamaba? ¿Jesse?.. No. Mmm.. Empezaba por "J" Aghs...

- Bueno, Justin deja a Johnny ya hombre, que vais a romper algo.  - decía Fredo. En ese momento, Justin subió las manos y puso una expresión de niño pequeño al que le han pillado con las manos en la masa.

¡ESO ERA! ¡SE LLAMABA JOHNNY! Yo y mi memoria de pez, ays. De repente un par de ojos mieles se posan en mí mientras rie y yo me quedo como una total idiota mirándolo hasta que el movimiento de varios camareros entrando con la comida me distrajo.

Estaba tan nerviosa que sin querer casi hago que el pobre camarero me tire el refresco encima, menos mal que no hubo daños colaterales y solo fue un pequeño susto.

La comida transcurrió entre charla y risas hasta que poco a poco la mayoría se fue yendo. Me despedí de cada uno con un par de besos mientras que esperaba que Judit saliese del baño.

- ¿Tú no te vas? - me preguntó una voz detrás de mi. Sonreí. Sabía perfectamente quien era.

- Aún no, estoy esperando a Judit. 

- Si quieres te puedo llevar yo.

- Muchas gracias Justin, pero no hace falta, tengo mi coche afuera. - dije con una sonrisa.

- Bueno, ya nos podemos ir - Dijo Judit llegando hasta mi.

- Emmm, si, claro. Hasta luego, Justin.

- Os acompaño hasta el coche.

- Vale - dijo Judit.

Me detuve junto a la caja registradora para pagar la comida cuando Justin dijo: Sara, ¿qué haces?

- No sé, ¿pagar quizás?

- Ya está todo pago, no te preocupes por eso.

- ¿Qué? Pero yo tengo que pagar lo mio. No es justo que lo vayas a pagar tú todo.

- No tienes por qué pagar nada, en serio. - Dijo Justin un poco cabreado conmigo.

- Sara, ¿nos podemos ir? He quedado con mi novio y voy tarde. - Me dijo Judit un poco tímida al interrumpir.

- Em, vale. Pero Justin...

- Ya dije que pagaba yo, no me hagas un feo.

- Está bien - dije resignada - pero esto no se queda así, Bieber. - le dije mientras me despedía de él con un beso en la mejilla.

No sé como segui respirando después de eso. Llegué al coche, abrí la puerta y encendí el motor.

- ¡OH DIOS MÍO, TE GUSTA JUSTIN!

Enamorado de una belieber {Justin Bieber fanfic}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora